Este artículo se ha publicado originalmente en Democracy Now. Puedes acceder a sus titulares en castellano aquí.
En los territorios ocupados de Cisjordania, al menos nueve palestinos murieron en la noche del martes, cuando el Ejército israelí llevó a cabo su mayor incursión militar en dos décadas. Soldados israelíes, respaldados por vehículos blindados, excavadoras, aviones de combate y drones, lanzaron ataques simultáneos en Yenín, Tulkarem y Tubas.
La organización Media Luna Roja Palestina asegura que las fuerzas armadas de Israel han bloqueado los tres principales hospitales de Yenín, donde los soldados no permiten que las ambulancias transporten a los heridos. Mientras tanto, algunos testigos describieron cómo las excavadoras israelíes destruyeron carreteras e infraestructura hídrica y eléctrica.
Mientras comenzaba la redada, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Israel Katz, abogó por el desplazamiento masivo de los palestinos en Cisjordania. Katz escribió en las redes sociales: “Debemos abordar la amenaza del mismo modo que abordamos la infraestructura terrorista en Gaza, incluida la evacuación temporal de los civiles palestinos y cualquier otra medida que sea necesaria. Esta es una guerra en todos los sentidos, y debemos ganarla”.
Las autoridades sanitarias palestinas afirman que desde el 7 de octubre las incursiones israelíes en Cisjordania han matado a más de 650 palestinos, 148 de los cuales eran menores.
Continúa la masacre en Gaza
Los ataques que Israel ha estado lanzando contra el centro y sur de la Franja de Gaza se han cobrado la vida de decenas de palestinos en las últimas 24 horas. Entre los fallecidos hay seis personas que murieron cuando un ataque aéreo israelí destruyó varios edificios residenciales en la ciudad de Jan Yunis.
Alaa al-Najjar, testigo de los ataques, explica: “Una vivienda repleta de residentes fue bombardeada. Había alrededor de 100 personas dentro, personas desplazadas que vinieron de Rafah y de ciudades que están alrededor de Jan Yunis. Todos fueron bombardeados por [aviones de combate] F-16. Eran todos menores y mujeres, todos niños y niñas que no tenían ninguna relación con la resistencia ni con nada por el estilo. El Ejército israelí está cometiendo un genocidio”.
Mientras tanto, un ataque israelí contra una escuela de Deir al-Balah que albergaba a personas desplazadas les causó la muerte a ocho palestinos. En la mañana de este miércoles, las fuerzas armadas de Israel mataron al reportero gráfico palestino Mohammed Abd Rabbo y a su hermana tras lanzar un ataque aéreo contra su vivienda en el campamento de refugiados de Nuseirat. El Sindicato de Periodistas Palestinos afirma que Israel ha matado al menos a 161 trabajadores de medios de comunicación desde el 7 de octubre.
El martes, las Naciones Unidas advirtieron que los continuos ataques de Israel contra Gaza han obstaculizado severamente las operaciones de ayuda humanitaria, al tiempo que están alterando los planes para iniciar la próxima semana una masiva campaña de vacunación contra la polio.