Sociedad
Tres claves del nuevo pacto de Estado: violencia económica, violencia vicaria y violencia digital
El nuevo Pacto de Estado contra la Violencia de Género tipificará como delito la violencia económica contra las mujeres.
En muchas ocasiones, los maltratadores no pasan la pensión a los menores; otras veces dejan de pagar la hipoteca; y en otros casos se niegan incluso a autorizar una refinanciación del préstamo para que la mujer pueda asumir los gastos ella sola, como le ocurrió a Luisa. Son distintas formas de violencia económica que perpetúan el maltrato hacia las mujeres después de la separación y la denuncia. Ahora, el nuevo Pacto de Estado contra la Violencia de Género tipificará también como delito esta violencia específica contra las mujeres.
Fuentes parlamentarias han informado a EFE de parte del contenido del dictamen que la subcomisión creada para ello en el Congreso aprobó el lunes gracias al respaldo de todos los grupos menos Vox. EH Bildu aún no ha desvelado su posición definitiva.
El dictamen llegará a la Comisión para la evaluación y seguimiento del pacto de Estado, en donde se debatirán los votos particulares que presenten los grupos y el resto del contenido. Si sale adelante, el pleno de la Cámara lo debatirá y lo votará. El pacto renovará el que respaldó el Congreso en 2017 y tendrá una vigencia de 5 años.
Más dinero para autonomías y ayuntamientos
La dotación económica del nuevo pacto de Estado subirá un 50%, hasta 1.500 millones. Este incremento beneficiará especialmente a las administraciones autonómicas y municipales. De acuerdo con las cifras dadas por las fuentes, a las comunidades llegarán 160 millones anuales (un 60% más) y a los ayuntamientos, 40 millones (un 50% más).
La nueva columna vertebral del pacto será, no obstante, la protección de la infancia frente a la violencia machista. Así, en violencia vicaria, el acuerdo aboga por mejoras en la formación de los profesionales que tengan contacto habitual con niños, niñas y adolescentes víctimas; por las reformas necesarias para perfeccionar las redes asistenciales de mujeres con hijos e hijas; y por revisar los protocolos de valoración de riesgo para que tengan en cuenta a las víctimas menores de edad.
Violencia económica y violencia digital
La violencia económica contra las mujeres es una de las manifestaciones de la violencia machista, en la que el maltratador ejerce control sobre la víctima mediante, por ejemplo, impagos de pensiones alimenticias, privaciones de recursos, prohibiciones de tener empleo, etcétera.
El Convenio de Estambul incluye esta forma de control y sometimiento como tipo específico de violencia machista. Estaba pendiente en España la tipificación como delito.
El nuevo pacto de Estado incorpora la propuesta por primera vez, apuntan las fuentes parlamentarias, al igual que una batería de medidas concretas destinadas a detectar y combatir la violencia económica.
Dado que en internet y en redes sociales se expresa cada vez más «violencia digital» contra la mujer, el dictamen del pacto de Estado enumera una serie de propuestas, entre las que destaca la formación en peritaje informático dentro de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Y como esta clase de violencia afecta cada vez más a los menores, los grupos parlamentarios quieren que haya una ley específica para su protección ante entornos digitales. Además, incluirá un apartado sobre prevención del acceso a pornografía, en el que el desarrollo de sistemas efectivos de verificación de edad será clave.
Víctimas en el mundo rural y víctimas con discapacidad dispondrán de propuestas concretas, así como las víctimas españolas en el extranjero y las víctimas migrantes en España.