Los desplazados en 2015 igualan a los habitantes de España, Portugal y Dinamarca juntos

El lunes 20 se celebra el día internacional del refugiado. Resulta una ironía macabra hablar de celebración a la luz del informe que ha presentado esta mañana la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR): en 2015 se superó la cifra de 60 millones de desplazados en el mundo, según ACNUR. Es decir, la suma de todos los habitantes de España, Portugal y Dinamarca.

La mayoría son niños. El 51% de los desplazados tienen menos de 18 años. Por sí sola, la guerra de Siria ha forzado el exilio de unos cinco millones de personas y obligado al desplazamiento a 7,6. De nuevo, es más sencillo de entender si pensamos en todos los ciudadanos de Madrid, Barcelona, Sevilla, Zaragoza, Valencia y Bilbao obligados a dejar su casa y su tierra.

El presidente de CEAR, Carlos Berzosa, cree que la Unión Europea ha actuado ante esta tragedia de manera irreconocible: “Ha dado de lado a sus principios fundacionales, su respuesta ha recrudecido el drama”. Para la secretaria general del organismo, Estrella Galán, la voluntad política de la Unión se ha demostrado “en la lentitud del proceso de reubicación y la rapidez con la que se ha adoptado el acuerdo con Turquía”. “Acogemos a cuentagotas durante meses, cerramos fronteras en un instante”, protesta. El acuerdo entre la Unión Europea y Turquía vulnera, según la organización, varios aspectos de la Convención de Ginebra (como el principio de no devolución a un país en el que la persona corra peligro) o el Convenio Europeo de Derechos Humanos, que prohíbe expresamente las expulsiones colectivas.

Las trabas e impedimentos que encuentran estas personas es causa, en muchas ocasiones, de que se vean obligados a emprender un viaje mucho más difícil del que ya realizaron. Así es como el Mediterráneo se ha convertido en un cementerio: más de 3.700 personas perdieron la vida en esta ruta en 2015. Um Gasim ofrece en este vídeo un testimonio de su odisea:

La actuación de España ante esta situación es, para CEAR, muy decepcionante. De los 18.000 refugiados que se comprometió a acoger, sólo ha reubicado a 18 hasta el momento. Además, el Gobierno ha reducido la protección internacional este año, ya que, por ejemplo, concedió 124 estatutos derefugiados menos y redujo en 399 los de protección subsidiaria en 2015. El organismo también denuncia la continuación de las devoluciones en caliente de Ceuta y Melilla, a las que el Ejecutivo popular pretendió dar cobertura legal con la Ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como Ley Mordaza.

Entre las medidas urgentes que CEAR reclama al nuevo Gobierno que nazca de las urnas tras el 26-J, están la retirada del apoyo al acuerdo de la Unión Europea y Turquía, el cumplimiento de los acuerdos de reubicación alcanzados en el Consejo Europeo, la puesta en marcha de “vías legales y seguras” de acceso al asilo y poner fin a las devoluciones ilegales.