Política
Fabra castiga a los consellers de los impagos
El presidente valenciano remodela su gobierno, que pasa de tener diez a ocho consellerías. Sanidad y bienestar social, las dos carteras con impagos más impopulares, tendrán nuevos responsables.
VALENCIA // Sanidad y bienestar social. Los dos ámbitos donde los impagos de la Generalitat Valenciana son más evidentes tendrán nuevos responsables políticos tras la remodelación del Consell que ha hecho el presidente Alberto Fabra.
La crisis de gobierno se planteó como la respuesta a la dimisión del exconseller de hacienda, José Manuel Vela, imputado por, presuntamente, filtrarle a su compañero de partido, Rafael Blasco, el auto del caso Cooperación donde se le acusa de seis delitos, entre ellos fraude, malversación de caudales públicos o cohecho.
Esa fue la excusa perfecta que encontró Fabra para remodelar su gobierno, reduciendo el número de consellerias y castigando a los responsables de dos de las carteras más contestadas: bienestar social y sanidad, las más afectadas por los recortes e impagos del ejecutivo valenciano.
La huelga de las farmacias de las tres provincias dejaron tocado al cesado conseller Luís Rosado. Para sustituirle, Fabra ha echado mano de la empresa privada. El elegido ha sido Manuel Llombart, hasta hoy director general de la Fundación Instituto Valenciano de la Oncología. Un gestor de 43 años y con una formación en ciencias económicas y no en sanidad.
Igual que Rosado, el conseller Jorge Cabré sale del gobierno tras las protestas de sectores como el de la atención a discapacitados o de la dependencia. Su sustituta será Asunción Sánchez, responsable, hasta ahora, del área de bienestar social de la ciudad de Alicante.
El otro nombre que entra en el gobierno es el de Juan Carlos Moragues, una persona con ese perfil ‘burócrata’ que tanto gusta a la política de hoy en día. El nuevo conseller de Hacienda era el delegado de la Agencia Tributaria en Castellón y antes había sido administrador de distintas oficinas de la Agencia e inspector de aduanas. Moragues tiene las licenciaturas de Derecho y de Económicas y Empresariales.
Dos son los premiados por Fabra en esta remodelación. Por un lado, José Ciscar, un hombre de su confianza y que además de la vicepresidencia y la portavocía del Ejecutivo, asumirá la Conselleria de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua.
Por otro lado, el presidente hace un guiño a la estructura del partido y mantiene en el cargo a Serafín Castellano que además asume las competencias de Justicia. Castellano es el único conseller que viene de etapas anteriores y ha tenido cartera con los cuatro presidentes populares, además de haber ejercido la portavocía del grupo en Les Corts Valencianes y ser el actual secretario general del partido.
Quien sí sale del gobierno es Lola Johnson, persona de la absoluta confianza de Francis Camps que la rescató para su gabinete de la dirección de Canal Nou. Curiosamente el cese de Johnson coincide con la dimisión de José López Jaraba al frente de Radio Televisión Valenciana (RTVV) en mitad del expediente de regulación de empleo (ERE) que dejará en la calle a 1.198 trabajadores. El Consell ha anunciado que el nombramiento del nuevo responsable de RTVV se deja para la semana que viene. Demasiados cambios para un solo día.