Economía
El impacto económico del racismo en España: 17.000 millones de euros, un 1,3% del PIB
Un informe encargado por el Ministerio de Inclusión pone cifras al coste del racismo en España, tanto en el ámbito laboral como en el educativo. Cuantifica el valor de los salarios que los extranjeros dejan de percibir por razón de la discriminación. Y cifra en 500 euros mensuales la diferencia de sueldos entre la población extranjera y la autóctona.
El racismo o, como lo definen desde el Gobierno, “la discriminación laboral y educativa hacia la población extranjera”, tiene un coste de 17.000 millones de euros para España, un 1,3% del Producto Interior Bruto (PIB). Es la principal conclusión de un informe encargado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, cuya evaluación se apoya, fundamentalmente, “en la cuantificación del valor de los salarios que estas personas dejan de percibir por razón de la discriminación”.
El estudio, realizado por los profesores de la Universidad Autónoma de Madrid Ramón Mahía y Eva Medina, y cofinanciado por la Unión Europea, divide este impacto económico principalmente en el ámbito laboral (12.300 millones de euros o el 1% del PIB) y el educativo (4.800 millones de euros o el 0,36% del PIB).
Discriminación laboral
Publicado por el Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (OBERAXE), el informe subraya que, en la actualidad, la tasa de desempleo entre personas extranjeras se sitúa en un 18,2%, en comparación con el 11,6% de población autóctona. Esto supone, según el estudio, una pérdida de aproximadamente 5.100 millones de euros.
Además, a pesar de que la tasa de actividad entre extranjeros es generalmente más alta (71%) que la de los autóctonos (56%), se observan importantes diferencias de participación laboral de las mujeres extranjeras, que tienen un 2,3% menos de probabilidad de empleo (una brecha que representa una pérdida de aproximadamente 1.200 millones de euros anuales).
El estudio también analiza otra forma de discriminación laboral: la sobrecualificación. Un 15% de los trabajadores extranjeros con estudios superiores y un número considerable de aquellos con estudios secundarios están empleados en un puesto de trabajo que está por debajo de su formación.
Este problema también afecta particularmente a las mujeres extranjeras, quienes enfrentan con más frecuencia la falta de oportunidades acorde a su nivel de formación.
Discriminación salarial
Las diferencias salariales brutas entre población extranjera y autóctona ascienden al 23%, esto es, alrededor de 500 euros brutos mensuales.
La diferencia salarial es también “una cuestión de género: tanto en el caso de las trabajadoras autóctonas (merma del 15% respecto a los varones autóctonos) como entre las extranjeras (merma del 19% respecto a los varones extranjeros). Esto explica que la brecha salarial media del 23% sea aún mayor (25%) cuando se comparan las mujeres extranjeras con las mujeres autóctonas”.
Racismo en la educación
El estudio también se centra en el ámbito educativo. Según el mismo, la tasa de escolarización de estudiantes extranjeros es un 17% inferior a la de los autóctonos. “Este dato representa a más de 222.000 jóvenes extranjeros que no acceden al sistema educativo en igualdad de condiciones, lo cual tiene implicaciones directas en su desarrollo y en su capacidad de contribuir a la economía española”, explican.
Una vez incorporados al sistema educativo, añaden, los estudiantes extranjeros enfrentan mayores tasas de repetición, peor rendimiento académico y una mayor exposición al acoso escolar, factores que incrementan el riesgo de abandono y afectan a sus oportunidades futuras.
Además, el estudio pone de relieve que la discriminación educativa se refleja también en el nivel máximo de estudios alcanzado: la población extranjera tiene menos probabilidades de acceder a estudios superiores. Ello supone una pérdida de ingresos a largo plazo que, según el informe, se cuantifica en 4.800 millones de euros al año.