Opinión | OTRAS NOTICIAS | Sociedad
Los paseos de mayo
Las acciones del movimiento okupa y las elecciones municipales y autonómicas han marcado los hechos más relevantes del mes de mayo para la autora
Este mes ha estado protagonizado por los procesos municipalistas que han culminado en victorias en distintos rincones del Estado, como es el caso de Barcelona en Comú con Ada Colau a la cabeza y Manuela Carmena en Ahora Madrid. Se trata de dos procesos que provienen de movimientos sociales y activismo, pero que han desembocado en la toma de las Instituciones.
Tras las elecciones municipales, llegó la calma, pero la lucha y reivindicación en las calles no cesaron. Es el caso de colectivos potentes como El Patio Maravillas de Madrid. Sus integrantes y personas afines al espacio llevaron a cabo una ocupación de un nuevo Patio, que duró pocas horas ya que fue desalojado por la UIP, pero fue una manera simbólica de reivindicar los espacios culturales autogestionados, ya que su sede en la calle Pez se encuentra pendiente de desalojo.
El 15-M volvió a Sol e hizo un grito mudo por su cuarto aniversario saltándose así la prohibición de no poder reflexionar en común el día de reflexión. Un día antes se celebraron asambleas temáticas, talleres, teatro y música a cargo de la Solfónica. Bajo el lema «2015M 4 AÑOS: No nos amordazarán, la lucha sigue en las calles», se trató de demostrar que de una manera o de otra la ilusión sigue intacta a pesar del tiempo. El día 16 tuvo lugar una manifestación que recorrió las calles desde Cibeles a Sol y que transcurrió sin incidentes.
También se conmemoraron los 30 años de la primera okupación en Madrid. La Oficina de Vivienda de la ciudad realizó un paseo por todos los lugares donde había pasado el movimiento, partiendo desde el número 83 de la calle Amparo, donde se encuentra el edificio que acogió la primera okupación de la capital del Estado. “Son 30 años okupando y con orgullo decimos que seguiremos muchos más, mientras haya gente sin casas y casas sin gente no nos quedaremos de brazos cruzados, porque tenemos las llaves de todas las casas.”, aseguran los activistas del colectivo.
Otra cita obligada que tiene lugar cada año es el Paseo de Jane, una iniciativa ciudadana consistente en tejer redes a pie de calle. Se trata de una mirada desde una perspectiva crítica reivindicando “una ciudad por y para quienes la habitamos, con el fin de encontrarnos, de poner cara, cuerpo y voz a las historias, conflictos y resistencias que se dan en nuestros barrios”. El Paseo de Jane se hace andando, narrando, enredando y compartiendo diversas temáticas: urbanismo, movilizaciones vecinales, memoria histórica, vivienda, huertos urbanos, mercados de abastos, centros sociales, parques y centros culturales.
En Barcelona han tenido lugar otros procesos como el encierro durante una semana de los Trabajadores de Movistar en la tienda de la empresa enPortal de l’Àngel que finalmente han llegado a un acuerdo gracias a su perseverancia. El sábado tuvo lugar un acuerdo entre ambas partes poniendo fin al conflicto que en redes sociales se movía bajo el hashtag #ResistenciaMovistar.
Para finalizar, recordar que la lucha antifascista continúa latente en el barrio madrileño de Chamberí, donde el sábado tuvo lugar una movilización para poner fin al racismo en el distrito y al refugio Hogar Social neonazi que continúa sin ser desalojado a pesar de la presión vecinal.