Economía
Y vencieron las eléctricas: se acabó el impuesto
Repsol, una de las empresas más beligerantes contra el impuesto permanente, celebra la decisión: “The tax is over”, asegura su consejero delegado
El impuesto a las energéticas decaerá el 31 de diciembre. El tributo, que grava un 1,2% los ingresos de las grandes empresas energéticas, no tendrá continuidad a partir de 2025. Así lo ha pactado el PSOE con el PNV y con Junts. Ha sido este último partido el gran escollo para la ampliación en el tiempo del canon. Mientras que los nacionalistas vascos se habían mostrado favorables siempre que la gestión recayese en manos de las haciendas de Euskadi y Navarra, la formación independentista catalana no apoya la prologanción del mismo al considerar que pone en riesgo una inversión de 1.100 millones de euros en Tarragona.
Una decisión que no aceptan los socios parlamentarios y gubernamentales como EH Bildu, ERC, Podemos y Sumar. La formación de Ione Belarra ya ha anunciado que votará en contra de la reforma del impuesto de sociedades si esta no incluye la continuidad del gravamen, lo que haría decaer la trasposición de una directiva europea que fija un tipo mínimo del 15% para empresas multinacionales. Los cuatro votos de Podemos son imprescindibles para configurar una mayoría parlamentaria que saque adelante la propuesta.
Sumar, aunque todavía no ha avanzado cuál será el sentido de su voto, también se ha mostrado contraria a la decisión pactada por el PSOE con los nacionalistas vascos y catalanes.
Repsol, por el contrario, sí ha celebrado la decisión. «The tax is over» [«El impuesto se acabó»], ha asegurado el consejero delegado de la petrolera, Josu Jon Imaz, presidente del PNV entre 2004 y 2008, y uno de los ejecutivos más beligerantes contra el gravamen en las últimas semanas. La multinacional energética advirtió que retiraría sus inversiones del país si se ampliaba el impuesto.
Sin embargo, de acuerdo con diferentes medios, fuentes parlamentarias han dejado abierta la puerta a un acuerdo de última hora con Junts para el mantenimiento del tributo que pueda ser incluido en las próximas semanas mediante una enmienda transaccional.
Durante los años que estuvo vigente, el gravamen logró recaudar 2.410 millones de euros procedentes de las cinco principales eléctricas españolas: Endesa, Iberdrola, Naturgy, Repsol y Cepsa.
Continua el impuesto a la banca
Por el contrario, el impuesto a la banca sí se verá ampliado y las haciendas forales vascas podrán gestionarlo. Este canon establece que las entidades financieras con una facturación superior a los 800 millones de euros deberán pagar un 4,8% de los intereses y las comisiones generadas en España, con el objetivo de aminorar los beneficios extraordinarios logrados por los bancos como consecuencia de la subida de los tipos de interés en los últimos años.
Las enmiedas introducidas mantendrán vigente el tributo al menos hasta 2028. El nuevo gravamen será progresivo e irá del 1% al 6%, según la base liquidable de cada entidad financiera. La norma también permitirá la deducción del 25% de la cuota de Sociedades y deducciones extraordinarias en el caso de un descenso prolongado de la rentabilidad de las empresas.
Con visión de largo alcance CARLOS MARX ya señaló: el capitalismo tiende inevitablemente a destruir sus dos fuentes de riqueza: la naturaleza y el ser humano, en un ciclo de acumulación constante que no puede coexistir con los límites naturales de los ecosistemas.
(Martín Álvarez, Canarias Semanal)
Además de contaminar, son refractarias a pagar impuestos y amenazan con retirar las inversiones del país. Que generosos!
Siempre se ha dicho que el capital no tiene patria.
Los bancos que tienen más ganancias que nunca, han devuelto el rescate al pueblo?
El lobby de los grandes tiburones son los verdaderos amos del país.
Escucha pueblo: tenemos más motivos que nunca para luchar.
Si luchas puedes perder si no luchas estás perdido.