En plena negociación entre el Gobierno y la patronal para reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales, y con los empresarios argumentando –entre otras cosas– que supondría una importante pérdida económica para la empresa, CCOO ha hecho público un estudio que cifra en 3.254 millones de euros el dinero que los empleadores se ahorran al año por las horas extras no pagadas entre salario, impuestos directos y cotizaciones sociales.
Las horas extras trabajadas (y no abonadas), apuntan desde el sindicato, “siguen siendo un abuso habitual para cientos de miles de trabajadores. Es una forma de explotación laboral que lleva presente décadas y que no se ha logrado reducir sensiblemente en los últimos años, a pesar de la aprobación de normativa específica como el registro obligatorio de la jornada de trabajo”.
Más beneficios, más explotación
Gracias a los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) de los dos últimos trimestres de 2023 y los dos primeros de 2024, CCOO indica que, cada semana, 419.000 trabajadores y trabajadoras hacen 2,6 millones de horas extras impagadas, que equivaldrían a crear 170.000 empleos a jornada completa.
En el sindicato destacan que “esas horas de trabajo no son pagadas, pero los empleadores se apropian íntegramente del valor añadido obtenido de ellas, engordando sus beneficios a costa de la sobre explotación de la población asalariada. Además, causan un grave perjuicio tanto a la población asalariada explotada como al conjunto de la sociedad a través de unos menores ingresos públicos (cotizaciones, IRPF e impuestos al consumo vinculados a los salarios no pagados)”.
Cada trabajador (dentro de los 419.000) realiza, de media, 6,3 horas extras no pagadas de media a la semana, lo que le supone que deja de percibir alrededor de 141 euros a la semana de coste laboral (salarios y cotizaciones).
Entre los sectores que concentran un mayor volumen de horas extras no pagadas a la semana se encuentran, a la cabeza, la Educación, con 410.000 horas extras, y la Industria manufacturera (281.000). Por detrás están Hostelería (272.000), Comercio (245.000), Transporte y almacenamiento (242.000) y Actividades profesionales, científicas y técnicas (229.000).