El pasado domingo, la Guardia Civil arrolló una embarcación con cuatro migrantes para impedir su llegada a Melilla. El vídeo, en el que se ve cómo la lancha de los agentes pasa por encima de la de los migrantes (haciendo que uno de ellos caiga al agua), se hizo viral en las redes sociales. La Guardia Civil, en declaraciones a La Marea, admite que la maniobra “visualmente parece un poco agresiva”.
Desde el Cuerpo también manifiestan que, “como no hay heridos, ni detenidos, ni nada más allá de esa maniobra”, descartan que vaya a haber ninguna investigación al respecto.
Desde el Departamento de Comunicación del Cuerpo argumentan que el Servicio Marítimo pidió a los migrantes que pararan la barca, y estos no lo hicieron. “Si hay un control de la Guardia Civil en la carretera y tú te lo saltas, vamos a ir detrás de ti. Pues en el mar igual, pero en un barco. Porque si estás huyendo, estás cometiendo un delito, o algo puede haber”, afirman.
En este caso, agregan las mismas fuentes, “intentaron escaparse de nuestro control, por ello, se abortó el intento de entrada y se volvieron a Marruecos”.
Una maniobra peligrosa
La Guardia Civil afirma que esta maniobra “no es habitual, puesto que normalmente hay colaboración y, cuando les mandas parar, se paran. Pero, si esto no sucede –como en esta ocasión–, vamos a ir detrás para intentar detenerles, no podemos dejarles ir”.
Sobre la peligrosidad de la acción, aseguran que “cuánta más velocidad le metes al medio de transporte, más peligro. Son maniobras evasivas”.
Y respecto al riesgo que supone esta práctica, en la Guardia Civil aseveran que “el riesgo lo tiene cada agente cuando sale de servicio. Tanto el guardia civil como la persona que decide saltarse un control policial, en carretera, en el mar o en el aire. Cuando actúan de esa manera hay riesgo para todos, para nosotros como guardias civiles y para los ciudadanos que han decidido saltárselo”.
Sin heridos, sin investigación
En los primeros momentos, la Asociación Marroquí de Derechos Humanos – Sección Nador (AMDH) informó, a través de Facebook, de que se había recibido “el cuerpo de un migrante marroquí en la morgue del Hospital Hassani de Nador”, y que podría ser “la primera víctima de la intervención criminal de la Guardia Civil”.
Más tarde, sin embargo, publicaron otro mensaje en el que afirmaron que la gendarmería marítima de Beni Ensar les había confirmado “que no hubo muertos tras la violenta y peligrosa intervención de la Guardia Civil ayer contra la pequeña embarcación migrante. Según esta fuente, los cuatro migrantes a bordo están a salvo y bajo arresto”.
En una nueva publicación de Facebook, la AMDH señala que, “cuando conocemos el destino de varias investigaciones iniciadas por la parte marroquí, en varios casos similares, cuyos resultados nunca se han visto, se puede tener una idea de las causas de este traspaso total de este caso a Marruecos. Los españoles son totalmente responsables y deben asumir la responsabilidad de abrir una investigación”.
Artículo ampliado a las 17.15h