Dossier #LaMarea100 | La hora de la verdad

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Cumplimos 100 números. Esta circunstancia ha dado pie a una revista especial centrada en el oficio que nos ocupa: el periodismo. Y no es un tiempo fácil para hablar de periodismo. Esta época de posverdad y fake news nos ha llevado a poner el foco sobre los compañeros y compañeras que ejercen la modalidad más pura y más complicada: la del periodismo de investigación.

Para la elaboración de nuestro dossier La hora de la verdad hemos contactado con más de 25 profesionales especializados en mirar donde nadie mira, en denunciar abusos, delitos, corrupciones al margen de la agenda oficial. Nuestro compañero Dani Domínguez ha reunido sus opiniones para componer un informe sobre el periodismo de investigación en España, sus retos, sus carencias, sus triunfos y sus dificultades.

Además, Antonio Rubio, maestro de periodistas y veterano muckraker (‘rastrillador de la mierda’, según la terminología del presidente Theodore Roosevelt), enumera las claves que distinguen a un buen reportaje de investigación y hace un recorrido histórico por esta especialidad en España, desde la guerra del Rif hasta los «protocolos de la vergüenza» que acabaron con la vida de miles de ancianos en las residencias madrileñas.

En el mismo dossier, Bob Pop entrevista a la mexicana Lydia Cacho, periodista que ha sido perseguida y hasta torturada por su trabajo. Sus reportajes de investigación destaparon una red de pederastia en su país que provocó un enorme escándalo y el procesamiento de empresarios y políticos corruptos. A pesar de las represalias, no ha dejado de reportar casos relacionados con la violencia y la esclavitud sexual, el abuso de menores y el crimen organizado.

Azahara Palomeque, por su parte, habla con Júlia Nueno, ingeniera e investigadora especializada en analizar datos capaces de revelar crímenes de guerra. Trabaja en el centro Forensic Architecture del Reino Unido estudiando los patrones militares que muestran la mecanización de un genocidio. Su objeto de estudio actual es la masacre de Gaza.

La labor de exponer la verdad choca a menudo con empresas como Eliminalia, especializada en reputación online. Entre sus clientes hay políticos, narcotraficantes o agresores sexuales que contratan sus servicios para que sus delitos, recogidos por la prensa, desaparezcan de Internet. Marco Dalla Stella firma un reportaje en el que detalla los métodos fraudulentos usados por esta empresa para llevar a cabo su labor de borrado digital.

En el extremo opuesto a la búsqueda de la verdad que llevan a cabo los y las periodistas que protagonizan nuestro dossier está la infame «máquina del fango» de la que tanto se habla últimamente y que tanto daño está causando. A golpe de libelo, esos seudomedios al servicio de la propaganda y la mentira están poniendo en riesgo la paz social y política en todo el mundo. Por eso les hemos dedicado un cuadernillo especial, Paren las máquinas, para reflexionar con calma sobre la deriva de este paraperiodismo (expresión acuñada por Iñaki Gabilondo) que, aliado con el lawfare, se ha constituido en un peligro para la democracia.

El análisis corre a cargo de una excepcional nómina de firmas invitadas: Aurora Labio-Bernal, Laura Casielles, Idafe Martín, Arantxa Tirado, Josep Carles Rius, Azahara Palomeque, Jordi Nieva Fenoll, Miquel Ramos, Nora Rodríguez, Thilo Schäfer, Julián Macías y Alán Barroso.

Al margen de nuestros dos especiales, el número 100 de La Marea se completa con varios reportajes en profundidad. Uno de ellos trata sobre el viaje que hacen tus cookies cuando navegas por Internet. Esa información personal es recopilada por empresas caracterizadas por su opacidad. Estas cookies se mueven en un mercado que, en teoría, sirve para personalizar la publicidad que recibes en tu ordenador o teléfono móvil. En la práctica, su potencial va mucho más allá y puede poner en peligro la privacidad de los usuarios.

Por su parte, Patricia Simón y Ricardo García Vilanova viajan a Chad, hasta la frontera con Sudán, para relatar la crisis humanitaria en la que se hayan inmersos 2 millones de refugiados. Los países ricos han priorizado Ucrania y Gaza y no están destinando los recursos necesarios en Sudán para evitar «la peor hambruna en décadas», según la ONU.

También examinamos a fondo el papel que el Opus Dei tiene en la educación española. Por aulas de los centros vinculados a la Obra desfilan cada día casi 100.000 alumnos que van desde la educación primaria hasta la universitaria. Esta actividad mueve hasta 1.000 millones de euros al año.

Por último, destacamos Habitar el vacío, el proyecto de un grupo de periodistas que combate el vaciado rural de Galicia. Sergio Pascual, Cláudia Morán, Lucía Abarrategui y L. Rey reivindican, a contracorriente, una vida posible en el campo. Su trabajo, ilustrado por el fotógrafo Brais Lorenzo, será publicado próximamente en la web de La Marea.

La filósofa Ana Carrasco-Conde, ganadora del último premio de Ensayo Eugenio Trías, cierra la revista con su sección El Incordio. En ella reflexiona sobre si merece la pena todo el esfuerzo que requiere ejercer una buena labor periodística.

Nosotras creemos que sí. Según la célebre cita de Condorcet, «los amigos de la verdad son los que la buscan, no aquellos que se vanaglorian de haberla encontrado». Eso es lo que hemos pretendido en este especial número 100, cuya portada firma el ilustrador Pablo Caracol y que ha sido rediseñada para la ocasión por Fernando Rapa. De hecho, es lo que siempre hemos intentado hacer y lo que queremos seguir haciendo con tu ayuda como principal soporte a nuestra independencia.

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