La Uni en la Calle
Durabilidad de los materiales en las construcciones arquitectónicas
El autor es Profesor Titular de Construcción del Departamento de Construcciones Arquitectónicas y su Control de la Universidad Politécnica de Madrid
Muchos de los materiales de construcción que utilizamos actualmente nos llegan después de haber sufrido una transformación, desde su estado natural, la materia se convierte en material tras un aporte energético. Sin embargo, esta energía artificialmente comunicada tiende a perderse para volver a su estado natural, completándose así un ciclo en el que su energía libre es menor. Es el envejecimiento natural, que recientemente se tiende a definir como una duración limitada de su vida en servicio.
Este tema suscita cada vez mayor interés, tanto por razones económicas (obtener el máximo rendimiento de un material aplicándole el mínimo de energía), como por razones técnicas de diseño (aprovechando el máximo de las características del material con el grado de seguridad suficiente).
En la actualidad, el proceso de industrialización que repercute en todos los sectores de producción arrastrará irremediablemente a la construcción, a desterrar paulatinamente procedimientos tradicionales utilizados durante siglos y cambiarlos por otros nuevos, obtenidos, en muchos casos, artificialmente o partiendo de materias primas naturales modificadas industrialmente. Esta nueva situación plantea la importancia de la durabilidad en el rendimiento económico de los materiales.
La mayor parte de los cambios tecnológicos surgen de manera progresiva, ya sea mediante mejoras de las especificaciones de los materiales, nueva puesta en obra, etc. Por ello, es necesaria una continua actualización de los conocimientos sobre nuevos productos y su colocación; la falta de esta información puede provocar el fracaso de nuevas técnicas constructivas.
Esta desinformación se produce a todos los niveles:
• Escasez de conocimientos, formación y capacitación de los operarios.
• Falta de datos del comportamiento de los materiales a largo plazo y su compatibilidad con otros materiales.
• Falta de decisión de los técnicos responsables
Por lo tanto, podríamos deducir que uno de los problemas de la construcción reside en la inercia de uso producida por los materiales tradicionales, unida a una deficiente difusión técnica (no comercial), de los nuevos productos. Es necesaria, también, una mano de obra especializada, abierta a nuevos materiales y procedimientos a medida que evolucionan las técnicas de puesta en obra y conocimiento aproximado de la durabilidad de aquellos nuevos materiales con un alto nivel de transformación.
El nuevo técnico precisa de organizaciones dispuestas a ofrecer la información necesaria para conocer, de forma fiable y contrastada, estos nuevos materiales y sus tecnologías de puesta en obra.
———————–
Jesús González Martín es Profesor Titular de Construcción del Departamento de Construcciones Arquitectónicas y su Control de la Universidad Politécnica de Madrid. Después de terminar sus estudios, comienza a trabajar en la empresa de ingeniería Gibbs and Hill, como ingeniero responsable para la arquitectura de los proyectos de centrales nucleares, actividad profesional que abandona, después de 19 años, para dedicarse íntegramente a la docencia.
Me parece muy interesante