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La marea violeta inunda Madrid para frenar la reforma del aborto de Gallardón
A su llegada a la estación de Chamartín, las mujeres feministas se han encontrado en el andén del tren que debía llevarlas hasta Atocha con Esperanza Aguirre
MADRID// Entre aplausos y gritos de “sí se puede“ y “Gallardón, dimisión“, salía del Congreso la representación de las mujeres del tren de la libertad que había entrado una hora antes para entregar su manifiesto contra la reforma de la ley del aborto propuesta por el ministro de Justicia. Escrito por Alicia Miyares, Porque yo decido es un texto de rechazo a la voluntad del Gobierno del Partido Popular de decidir por las mujeres sobre su derecho a la maternidad. “Me niego a ser sometida a tratos degradantes, injerencias arbitrarias y tutelas coactivas en mi decisión de ser o no ser madre“, reza el documento que las feministas asturianas han presentado con el fin de hacérselo llegar al presidente del Gobierno, el del Congreso, la ministra de Sanidad, Ana Mato, Alberto Ruiz Gallardón y los distintos grupos del Congreso.
La salida de las feministas asturianas ha supuesto el punto final de una manifestación que, para ellas, se había iniciado hacía 24 horas. Después de pasar la noche en Valladolid, donde fueron recibidas por cerca de mil quinientas personas, las mujeres del tren de la libertad salían hacia Madrid. No iban solas. Con ellas viajaban diversos grupos feministas vascos y vallisoletanos. Durante el viaje, que ha durado algo más de una hora, no han dejado de cantar y gritar los lemas que las iban a acompañar en la manifestación.
En el vagón donde viajaban las mujeres vallisoletanas solamente había un hombre, Santi, que llevaba peleando por el derecho a decidir del aborto desde los años 80. “Tiene guasa –comentaba- que la cúpula del PP esté reunida en Valladolid y nosotros salgamos de allí para venirnos a Madrid“. Sentada a su lado estaba Nieves, quien aseguraba que, por parte de las feministas, el Gobierno se iba a encontrar con una insumisión absoluta, “se apruebe esta ley de mierda o no. No vamos a parar hasta que el aborto en España sea libre y gratuito“, aseguraba.
A su llegada a la estación de Chamartín, se han encontrado con Esperanza Aguirre, en el andén del tren que debía llevarlas hasta Atocha, quien se dirigía a Valladolid para participar en la convención popular. En ese momento, las mujeres del tren de la libertad han comenzado a cantar sus proclamas en voz muy alta, lo que ha provocado la espantada de la expresidenta de la Comunidad de Marid. Una anécdota que han estado comentando hasta que el recibimiento de Atocha las ha dejado sin habla. Cientos de personas, ataviadas con camisetas violetas, las aguardaban con lemas como “esta reforma la vamos a parar“ y el ya conocido “sí se puede“. Abrumadas en un inicio, se han recuperado pronto de su sorpresa y se han unido a los manifestantes que las esperaban.
“En las calles o en las urnas, vamos a echarlos“
Después de escuchar la canción que la Solfónica había compuesto para la convocatoria estatal contra la reforma de la ley del aborto, ha tomado la palabra Begoña Piñero, presidenta de una de las asociaciones que habían organizado desde Asturias el tren de la libertad, la Tertulia Feminista Les Comadres. Tras agradecer el recibimiento en Valladolid -“porque ya sabemos cómo nos acoge Madrid siempre que venimos, no hay más que recordar la marcha de los mineros“- Piñero ha asegurado que las feministas no van a parar hasta que prometan que la actual ley del aborto continuará vigente. “En las calles o en las urnas, pero vamos a conseguir echarlos“, ha sentenciado entre vítores.
La manifestación ha tardado algo más de lo esperado en arrancar dada la gran cantidad de gente que ha acudido, la mayoría para apoyar la protesta y algunas otras para trabajar. Es el caso de Guadalupe, una de las 150 integrantes de la Asociación de Mujeres Cineastas que se han organizado para elaborar un documental sobre el tren de la libertad. “Hemos salido desde Asturias, Barcelona, Murcia o Extremadura, pero también hemos rodado material en Argentina, Bélgica o Edimburgo“, contaba. Es tanto lo que han grabado que aún no saben cuándo estará terminado; lo que sí que tenían claro es que “estamos completamente de acuerdo con sus reivindicaciones“ y que su forma de demostrarlo era mediante la elaboración del documental.
Durante la marcha hacia el Congreso, las miles de personas que se han congregado en la capital no han dejado de hablar sobre los motivos que les habían llevado allí. Miguel Ángel, un joven que había acudido desde Ciudad Real en autobús, explicaba que la manifestación “debería ser una defensa de la dignidad; no ya de las mujeres, sino de la sociedad española en su conjunto“. Otra mujer, Lucía, residente en Madrid, comentaba que “con la reforma que pretenden introducir, nos van a devolver a una época dictatorial. Esta gente no escucha, le da igual lo que opine el pueblo. Su única aspiración es contentar a la Iglesia“.
La marcha hacia el Congreso se ha detenido por un espacio aproximado de veinte minutos en la puerta del Ministerio de Sanidad, donde han abucheado a la ministra Ana Mato y han exigido su dimisión. Unzizu, una mujer madrileña, hablaba con sus compañeros sobre cómo la reforma que quiere sacar adelante el Gobierno estaba dando carta blanca a un determinado sector “retrógrado“ de la sociedad para decir públicamente “verdaderas burradas“. Unzizu explicaba que ya estaba harta de escuchar a algunos decir que “las mujeres que abortan son unas putas o que lo que tendrían que hacer es cerrar las piernas“. Y proseguía: “Es como volver a ser personas de segunda. No se dan cuenta de que abortar es una de las decisiones más duras que puede tomar una mujer y que, si lo hace, algún motivo tendrá. Cuestionarla por eso es intolerable“.
Desde que se conoció la intención del Partido Popular de sustituir la actual ley de plazos por una de supuestos, una de las bases de la la oposición a la reforma ha girado en torno al sentir de los españoles. Diversos grupos feministas han aseverado en multitud de ocasiones que, según las encuestas, el 80% de la población se había mostrado en contra, incluidos votantes del PP o algunas personas católicas. Una católica como Adela, que ha sido una más de la marea violeta. “Soy cristiana –contaba- por lo que no estoy a favor del aborto en sí mismo sino de la maternidad responsable“.
A pesar de ello, el hecho de que Gallardón planee prohibir la interrupción del embarazo incluso cuando el feto presente malformaciones, ha sido “la gota que ha colmado mi vaso“. Adela explica que el ministro de Justicia ha demostrado ser “un hipócrita y un falso. Está más que probado que las leyes restrictivas van de la mano con una ausencia de educación sexual, lo que provoca más embarazos no deseados y, por tanto más abortos“. A esto hay que añadirle que “este Gobierno está recortando todas las ayudas posibles, las dirigidas a las familias, a los niños, o a las personas enfermas. Todo esto te hace darte cuenta de lo hipócritas que son. Lo único que consiguen es dejar a la mujer y al bebé desamparados en lugar de ayudarlos antes, durante y después de la gestación“, sentenciaba.
Tras su salida del Congreso, las mujeres del tren de la libertad, acompañadas por otros grupos de feministas, se han dirigido a las oficinas de CC.OO. situadas al lado del Ministerio de Sanidad para celebrar la Asamblea de la Libertad. Una de las organizadoras comentaba que “el auditorio Marcelino Camacho tiene un aforo para mil personas; no sé cómo vamos a caber“. Antes de comenzar la manifestación, ya había alrededor de 50 mujeres que habían pedido tomar la palabra, por lo que estaba previsto que la asamblea se alargara hasta última hora de la tarde, aunque varias comitivas se irán antes para poder tomar el tren o el autobús que las lleve de vuelta a casa. “Esto de hoy solo ha sido el principio“, comentaba una mujer ataviada con un peto violeta de camino al auditorio. “No saben contra quién están luchando“, sentenciaba.
Mientras, en el akelarre de Valladolid lo único que se ha escuchado como soflamas estilo (fin de la cita) en el aplaudido entre ellos bla bla bla pepero, ha sido el POROMPOMPERO, pero nada de MICARRO MELOROBARON que es precisamente lo que canta el Pueblo.
Todos han quedado de acuerdo en la idea final colofón de su cumbre de im-presionante corte intelertuá liberaloide de mala lecha, corriente torerista mataó, seguir aplicando el método KESEJODAN patentado por la niña Fabra.
Dice Gallardón esta frase que pronunció Hitler en varios mítines: NINGÚN GRITO EN LAS CALLES ME HARÁ RENUNCIAR A MI COMPROMISO.
Eres muy tonto muchacho, porque es muy fácil hacerte tragar tu antiley cuando sea sometida a votación en el Parlamento ¿ o es que todavía no te has dado cuenta de que pueden votar contra ti tus mismos correligionarios para salvarle el culo al Pepé, eh?
Es que es la última alternativa que les dejas y además, que eso les haría recuperar algunos votos de los que ya se han ido por la alcantarilla.
La verdad es que en el facherío español la inteligencia es cosa de los bienaventurados que pastan en los prados del Señor.
Aunque nuestros ministros son cortos de luces y el ingenio no les sobra, incluso a ellos dentro de su fanatismo y su intransigencia no se les puede escapar el hecho de que por mucho que prohíban en España el derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo y a tener el número de hijos que ellas deseen, vivimos en un mundo globalizado en donde por unos pocos cientos de euros en una compañía de bajo coste, las españolas podrán viajar a cualquier ciudad europea y allí realizar con garantías lo que sus fanáticos gobernantes les impiden por orden de los sotanados de siempre. Así, ya me parece estar viendo la cara de satisfacción del presidente de RyanAir calculando el aumento del tráfico aéreo (y de beneficios) de su compañía gracias al papanatismo religioso de nuestros gobernantes meapilas. http://diario-de-un-ateo.blogspot.com.es/2014/01/la-nueva-ley-del-aborto-espanola-ha.html