Economía
De Guindos dice que la ayuda a la banca es "una medida de una sola vez"
El vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rehn, expresa su apoyo a los recortes y reformas del Gobierno español. De Guindos respalda una unión bancaria para evitar los errores del pasado.
MADRID // El gobierno de Mariano Rajoy es “perfectamente consciente” de que se están pidiendo grandes sacrificios a los ciudadanos, mientras las ayudas a la banca se comen una gran parte del dinero ahorrado por estos recortes. Así lo explicó el ministro de Economía, Luis de Guindos, este lunes en una rueda de prensa conjunta con el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, en Madrid. “Es un acto de responsabilidad mantener la solvencia del sistema bancario”, aseguró el ministro.
La evaluación hecha por la consultora Oliver Wyman, publicada la semana pasada, concluye que la banca española necesita hasta 54.000 millones de euros para su recapitalización. El gobierno confía en que finalmente bastará con gastarse solo 40.000 millones de los 100.000 millones de euros que los socios europeos han puesto a disposición de España. “Es una buena noticia saber que España no necesitará toda esta cantidad”, comentó Rehn.
Las ayudas a la banca ya efectuadas a través del FROB, el fondo público de rescate bancario, lastran el déficit y la deuda del Estado. De Guindos aseguró, sin embargo, que se trata de “medidas de una sola vez que no han impactado en el déficit estructural”. El Gobierno apoya la creación de una unión bancaria en la UE, para que en el futuro «se puedan evitar los errores del pasado», según el titular de Economía.
El finlandés Rehn, que se había entrevistado con el presidente Rajoy por la mañana, expresó el respaldo de Bruselas a los presupuestos generales que acaba de presentar el Gobierno, así como al plan de reformas económicas para los próximos meses. El también vicepresidente de la Comisión subrayó que “no hay camino fácil” para salir de la crisis y que la actual situación es dolorosa. “No hay nadie en la Comisión que no esté preocupado por las familias españolas”.
Rehn no quiso entrar en especulaciones sobre si Madrid pedirá un rescate del país o no. Se limitó a constatar que la UE “está preparada” si llega a producirse. Tampoco valoró el impacto en las cuentas públicas de una actualización de las pensiones según el IPC, una decisión que el Gobierno aún no ha tomado. Rehn insistió en que hace falta profundizar en la reforma del sistema de pensiones tomando en cuenta los cambios demográficos.
Rajoy, dimite con toda tu pandilla de inútiles para que el Pueblo pueda constituir un gobierno de salvación nacional y deja ya de cantar el cara al sol mientras cagas.
Ochenta mil parados mas en el mes de septiembre que van a emprender el camino del ¡QUE SE JODAN! de la doctrina Pepe.
Ochenta mil parados que no van a tener como los cinco millones que ya hay, futuro para ellos ni para sus hijos, que no podrán alcanzar una jubilación y que no pueden pagarse una privada.
Pero no son solo los ochenta mil parados como números en una lista sino que también cuentan las familias que dependen de ellos en mayor o menor número.
Y todavía insisten en aplicarnos el sistema liberal asesino a porrazo limpio de sus policías si ven que peligran sus privilegios.
Estos que protestan en las calles, de todas las edades, son desahuciados de la sociedad. Son parias que saben que si no se oponen al robo de este gobierno el porvenir que les espera es la aniquilación.
Un país de consumidores no se puede sostener. Esto es lo que han hecho de nuestra tierra, nuestro país, nuestra sociedad, esto es lo que han hecho nuestros políticos, Gobernantes y banqueros, con mentiras, falsas promesas, engaños y corrupción por doquier, y aún quieren seguir gobernándonos, aún con sus vergüenzas al aire, mostrándolas sin escrúpulos sin siquiera tratar de esconderlas, se las vemos mentira tras mentira, mientras se aferran al timón del país todos los sinvergüenzas, sin dejar que la sensatez y la honradez de nuestro pueblo tome el timón, las riendas de éste país que va sin remisión alguna a caer por el precipicio de la perdición, el desastre y el caos social. Luchan deslealmente y se aferran al timón tan solo para que el tremendo caos de la caída borre sus culpas.