Política
Debate Sánchez-Feijóo en el Senado en clave electoral
El presidente del Gobierno y el líder de la oposición debatirán sobre las medidas de ahorro energético y la renovación judicial
El curso político –el último del gobierno de coalición antes de las próximas elecciones generales– arranca de manera oficial este martes 6 de septiembre con el primer cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo. En sus primeros meses como máximo mandatario del PP y senador por designación autonómica, Feijóo ha realizado una pregunta oral al presidente del Gobierno: “¿Considera que su Ejecutivo está a la altura de las necesidades de las familias españolas?”. Es la única actividad parlamentaria del político gallego según figura en la página web del Senado.
El cara a cara entre el presidente y el líder de la oposición se juega en clave de precampaña electoral permanente. Sánchez ha anunciado que recorrerá una parte importante del país en los próximos meses con el objetivo de “reconectar con la ciudadanía”. Ante unas encuestas que vaticinan una pérdida de apoyos por parte del electorado, el líder del PSOE ha decidido también confrontar con el gallego para tratar de acabar con el “efecto Feijóo” en las encuestas. Así lo ha asegurado la portavoz socialista y ministra de Educación, Pilar Alegría: “Este año y medio que queda para las elecciones generales se le va hacer eterno al PP”.
La comparecencia de Pedro Sánchez en el Senado fue una petición del presidente popular para tratar asuntos relacionados con la emergencia energética que atraviesa el país. Lejos de rechazar la petición, el presidente del Gobierno acudirá a la Cámara Alta con el objetivo de destacar las medidas acordadas para hacer frente a la crisis, como los descuentos en el transporte público o la bajada del IVA en la factura de la luz y el gas. Esta última medida, solicitada por Alberto Núñez Feijóo, fue anunciada la pasada semana como un golpe de efecto antes del debate en el Senado.
Asimismo, Sánchez mantendrá un discurso duro contra el Partido Popular, a quien ya ha señalado como “oposición negacionista” por no apoyar el decreto de ahorro energético aprobado a finales de agosto. El objetivo es tratar de evidenciar al líder popular y acabar con la pátina de “sentido de Estado” que impregna al presidente del PP: “Feijóo es más de lo mismo, pero a peor”, aseguró recientemente el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Héctor Gómez.
Otra de las grandes bazas discursivas del presidente del Gobierno será la buena posición internacional de la que goza, principalmente en Europa. La “excepción ibérica” lograda por España y Portugal para abaratar la factura de la luz ahora podría hacerse extensiva a todo el continente, según lo anunciado por la presidenta de la Comisión Europea, quien propuso «una intervención de emergencia» del mercado eléctrico. Ursula von der Leyen, del Partido Popular Europeo, no esconde sus simpatías por Pedro Sánchez y ha calificado a España como “motor de la UE”.
El plan del PP
Feijóo acudirá al Senado con su propia hoja de ruta para paliar los efectos de la crisis energética. Un plan que el PP hará llegar al Gobierno esta misma semana y donde se incluyen medidas como alargar la vida útil de las centrales nucleares. Asimismo, los populares pedirán al Ejecutivo que las medidas de ahorro energético sean obligadas en el sector público y que, en el caso del ámbito privado, solo sean recomendaciones. Medidas en consonancia con el discurso mantenido hasta ahora por Feijóo que achaca al PSOE contar con el Gobierno “más caro de la democracia”: “No es razonable obligar a apagar escaparates cuando se mantienen encendidos ministerios superfluos”, aseguró durante un desayuno informativo organizado por Europa Press.
En sus redes sociales, el presidente popular también ha pedido “extender la rebaja del IVA del gas y electricidad el invierno”, “explotar todas las fuentes de energía”, “desburocratizar las renovables” y “ayudas para atemperar el precio de la energía en empresas».
En una entrevista en La Razón, el político gallego cifra en 16.500 millones de euros el aumento de la recaudación entre el segundo trimestre del año como consecuencia de la inflación: “Ante una crisis como esta, esa mayor recaudación hay que devolverla a los ciudadanos”, propone, pero critica que el Gobierno quiere “utilizar la recaudación extraordinaria para cambiar votos por cheques”.
La no renovación de los jueces
El debate en el Senado también estará marcado por las declaraciones que ayer realizó el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes. Tras el acto de toma de posesión del nuevo fiscal general del Estado, Lesmes se mostró enfadado ante la falta de acuerdo para la renovación del Tribunal Constitucional. En una semana concluirá el plazo del CGPJ para elegir a dos magistrados del TC y el sector conservador del mismo no parece tener intención de llegar a un acuerdo.
Asimismo, Lesmes ha denunciado una campaña en su contra para intentar hacer que se “tambalee”: “Las personas que están detrás de estos rumores de que yo tengo interés en el TC no quieren que se hagan los nombramientos del TC”. Se refiere a una noticia publicada por el diario El Mundo que asegura que el Gobierno habría ofrecido a Lesmes una plaza en el Tribunal Constitucional a cambio de acelerar la renovación del mismo. Un hecho desmentido por el propio aludido: “En el Gobierno saben perfectamente que yo no quiero ser candidato al TC. Lo saben perfectamente porque se lo he puesto yo de manifiesto”.
La renovación de los jueces es un mandato constitucional que está siendo incumplido ante la negativa del Partido Popular de llegar a un acuerdo. Alegría ha calificado de “trilerismo político” la posición inamovible del PP, que obliga al principal órgano de los jueces a estar en funciones desde finales de 2018.