Política | Sociedad
“El debate no es la Ricarda, sino el modelo económico”
Cientos de entidades convocan una concentración domingo 19 de septiembre para tratar de visibilizar el rechazo social a la ampliación del Aeropuerto del Prat en Barcelona.
VÍCTOR SAURA // Domingo 19 de septiembre, a las 12 de la mañana, miles de personas se concentrarán en la calle Tarragona de Barcelona, ??entre las plazas de Espanya y Països Catalans, para hacer visible su rechazo a la intención de AENA (bendecida por los gobiernos español y catalán) de ampliar el Aeropuerto de Barcelona. Esta mañana se ha presentado en rueda de prensa la movilización, y sus promotores han querido dejar bien claro, en palabras de María García, portavoz de la plataforma Zeroport, que «el debate no es La Ricarda sí o no, sino el modelo económico que quieren perpetuar».
Zeroport es una plataforma social surgida hace dos años para oponerse a los planes de ampliación de las dos grandes infraestructuras de transporte del área de Barcelona: el puerto y el aeropuerto. En julio pasado presentó un manifiesto contra la ampliación del aeropuerto que firmaron más de 300 entidades, y en la presentación de esta mañana se ha rodeado de algunas de ellas: representantes del Sindicat de Llogaters, la Xarxa de Justícia Climàtica y Ni un Pam de Terra han explicado las razones por las que se suman a la movilización.
La concentración del día 19 (que no puede ser manifestación por protocolo Covid) se dividirá en tres bloques, según la sensibilidad de cada organización (justicia climática, vidas dignas y defensa del territorio), y tendrá animación de calle y un escenario central, desde donde intervendrán varios portavoces de las entidades convocantes y la filósofa Marina Garcés. Los detalles se pueden consultar en la web ampliacionsno.cat .
Según esta plataforma, la propuesta de ampliación del aeropuerto responde únicamente al interés especulativo de AENA de incorporar los 1.700 millones de euros de inversión a su contabilidad y resolver así un problema en su balance, que arrastra una elevada deuda de 7.300 millones de euros, lo que estaría provocando una fuga de inversores. AENA es la empresa operadora que gestiona prácticamente todos los aeropuertos españoles. Fue fundada como sociedad pública al 100%, pero en 2015 se privatizó el 49% de su capital y sus acciones comenzaron a cotizar en el mercado de valores como una de las empresas del Ibex 35.
El gobierno catalán «desvía la atención»
La portavoz de Zeroport, Maria Garcia, se ha mostrado convencida de que el proyecto podrá detenerse antes de que llegue a la mesa del Consejo de Ministros, se supone que el 30 de septiembre. Pero de lo contrario lo seguirán combatiendo. Tampoco ha dado ningún valor al acuerdo interno del Gobierno catalán, presentado el fin de semana pasado, según el cual se opondrán a cualquier proyecto que implique destrozar el estanque de la Ricarda. Según Garcia, «la movilización va mucho más allá de salvar la Ricarda, están tratando de desviar la atención para no afrontar el gran debate; es demencial que estemos dedicando esfuerzos a detener este despropósito en vez de pensar como reconvertimos este modelo económico, no podemos perder más tiempo».
Las entidades convocantes piden la paralización total de todos los proyectos de ampliación (no sólo la tercera pista, sino también la terminal satélite y las conexiones por AVE con los aeropuertos de Reus y Girona), las compensaciones ambientales que aún están pendientes de la última ampliación (de la que hace más de 10 años), el redimensionamiento de AENA (porque «ya antes de la pandemia la mitad de sus aeropuertos eran deficitarios») y la protección de los espacios naturales y agrarios del Delta del Llobregat.
También han criticado que los partidos y administraciones que defienden el proyecto «se pasan el día hablando de la Agenda 2030 y de las políticas contra el cambio climático». «El sector aeroportuario representa el 5-6% de las emisiones mundiales, la ampliación supondría un incremento del 30% de las emisiones del aeropuerto, todo ello va en contra de los compromisos de reducción de emisiones, porque cualquier plan de reducción de emisiones pasa por una reducción drástica de la aviación», explica Joana Gelabert, de Ni un pam de terra. Esta entidad vecinal de El Prat no sólo se opone a la ampliación del aeropuerto, en sintonía con su ayuntamiento, sino que también combate dos nuevos planes urbanísticos que están impulsados ??por el mismo consistorio y que afectan al parque agrario del Baix Llobregat.
Según Carmen Arcarazo, del Sindicat de Llogaters, «el debate no es Ricarda sí o no, sino el modelo de movilidad, ambiental y económico, estamos en una emergencia climática y habitacional, y no queremos seguir apostando por un modelo que está en crisis, ya hemos visto en anteriores ampliaciones que hacer venir más turistas a Barcelona supone la expulsión de sus ciudadanos». «Este proyecto en ningún caso mejorará la vida de los catalanes, sólo la de los accionistas de AENA y la élite del 1%», añadió.