Política
Lo que el rey Felipe no dirá (tampoco) esta Navidad
¿A qué se dedica? ¿Cómo es su relación con el IBEX? ¿Qué nota le pone la ciudadanía? Algunas claves que Felipe VI no citará esta Nochebuena.
¿Te estás preguntando qué dirá el rey Felipe en su discurso de Nochebuena? Qué intriga, ¿verdad? Pues mira, para ir matando el gusanillo, te dejamos por aquí unas cuantas claves de las que el rey, salvo sorpresa, no hablará en su discurso –y tampoco los medios en general–. Sé responsable esta noche, por favor. Y, si eres de aquellos o aquellas que apagarán la tele cuando salga el monarca, no te olvides de compartir esta selección de temas publicados en La Marea en 2020. ¡Feliz Navidad!
¿A qué se dedica el rey?
Por primera vez en 20 años, el rey no presidió la entrega de despachos a los nuevos jueces en Barcelona. Felipe VI quería ir a Catalunya, según reveló el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, pero no pudo. “La decisión la ha tomado quien corresponde”, explicó la vicepresidenta Carmen Calvo. La secundó el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo: “Quien tenía que tomar la decisión la ha tomado”, espetó. Según la Constitución “los actos del rey serán refrendados por el presidente del Gobierno y, en su caso, por los ministros competentes”. Esto demuestra que el monarca no tiene vía libre para elegir a qué lugares acudir y a cuáles no. Ante esto, cabe preguntarse: ¿quién conforma la agenda de la Casa Real? Y lo más importante: ¿para qué sirve un rey?
La agenda de Felipe VI y Letizia Ortiz creció de manera suntuosa durante los meses de la pandemia. Así puede comprobarse a través de la página web de la Casa Real, donde los actos efectuados entre el 16 de marzo y el 1 de agosto suman 217. En todo 2019 no alcanzan los 200, lo que indica una hiperactividad desde que comenzó el primer estado de alarma en España, que es cuando, a su vez, el diario británico The Telegraph publicó que Felipe VI había sido beneficiario de una sociedad offshore creada por Juan Carlos I para recibir una supuesta donación de 100 millones de euros por parte del entonces rey de Arabia Saudí.
¿En qué han consistido esos actos? Además de emprender una gira por toda España en junio, la mayoría han sido videoconferencias realizadas desde el Palacio de la Zarzuela, lo que les ha permitido acercarse a sectores sociales con los cuales no suele tener tanto contacto.
Tras el fin de verano, los reyes recuperaron su asistencia a actos institucionales, sobre todo relacionados con Economía o Defensa, en los que Felipe VI tiene un papel puramente testimonial. A través de las siguientes postales, hacemos un repaso de la agenda de los monarcas durante los meses de pandemia. La Marea ha enviado varias preguntas a la Casa del Rey relacionadas con la confección de su agenda, pero no ha obtenido respuesta.
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¿Qué nota le pone la ciudadanía?
No podemos saber si la valoración del reinado de Felipe VI, que accedió al trono en 2014, hubiera sido más o menos positiva sin las andanzas de su padre. Lo que sí muestran los datos ahora, cuando lleva seis años como rey y con el escándalo de Juan Carlos I en lo alto, es que Felipe VI es apoyado por la mayoría de la ciudadanía española. La duda está en si es por mérito propio o por aquello de que el padre ha hecho bueno al hijo, del que, por otro lado, siempre se ha destacado su preparación.
Según la encuesta realizada por el instituto demoscópico 40dB. para 16 medios independientes*, entre ellos La Marea, Felipe VI es el único, junto con su madre, que logra un aprobado (5,8) –su padre se queda con un 3,3 y la reina Letizia con un 4,7–. Los únicos que suspenden al rey, son quienes votaron a Unidas Podemos en las últimas elecciones y la juventud de 16 a 24 años.
El PSOE, PP, Vox y Ciudadanos han intentando desvincular, de hecho, a Felipe VI de los escándalos de su padre en un claro intento de legitimación de la monarquía. No obstante, según la encuesta, el 48% cree que Felipe VI conocía los negocios de su padre, frente a un 23,3% que considera que no y un casi 29% que no lo sabe. Sobre si se benefició de las supuestas comisiones de su padre, el 32,3% cree que sí lo hizo, frente al 41%, que considera que no. Un 26,7% responde que no lo sabe.
La puntuación sobre su honradez, aunque no es mala, no es contundente: obtiene un 6,6 de media. Y logra un aprobado raspado en entender las necesidades de la gente. La mejor cualidad, para la mayoría de las personas encuestadas, es su formación y preparación, seguida de su defensa de la integridad territorial y la promoción que hace de España en el exterior.
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¿Cómo se relaciona con el IBEX?
Las formas han cambiado en La Zarzuela. Parece complicado que vayamos a ver a Felipe VI aceptando un yate valorado en 3.000 millones de pesetas (unos 18 millones de euros) pagado por empresarios baleares a razón de 100 millones por barba. O yéndose a Brasil a ver la Fórmula 1 con la invitación de la familia Botín, propietaria del Banco Santander. O colocando a sus familiares en empresas como La Caixa o Telefónica. “Felipe VI lo que intenta es distanciarse de su padre, que fue algo que le propuso el Gobierno”, asegura el periodista José García Abad, autor de, entre otras investigaciones, Sobra un rey y El maldito IBEX (Ed. El Siglo).
Sin embargo, también cree que lo tiene difícil porque, aparte de sucesor, son padre e hijo: “La tarea es complicada, pero no le queda otro remedio”, sostiene. El sociólogo y periodista Andrés Villena, autor de Las redes de poder en España (Rocaeditorial), también considera que estos cambios de comportamiento entre ambos reyes obedecen a una “estrategia de marketing” del nuevo monarca: “Felipe VI quiere tener un perfil más comedido y evitar cualquier tipo de escándalo. Es una relegitimación del poder del rey que tiene que labrarse”.
García Abad ha investigado durante años la relación entre Juan Carlos de Borbón y los poderes económicos, iniciada al casarse con Sofía de Grecia, en 1962, cuando la banca organizó una colecta “para hacerle un fastuoso regalo de bodas”. El resto de la historia es harto conocida: la amistad con empresarios como Mario Conde, Emilio Botín, César Alierta, Isidro Fainé, Juan Miguel Villar Mir… La intermediación del monarca fue clave, por ejemplo, para que un consorcio de empresas españolas, capitaneadas por Villar Mir, obtuviese el contrato millonario del AVE a La Meca. El rey emérito está siendo investigado ahora por haber cobrado supuestamente una comisión millonaria. Fue también Juan Carlos I quien otorgó el título de marqués al empresario en 2011. No obstante, existía una segunda línea de empresarios que lo único que tenían que hacer para estar cerca del rey era “aportar dinero cuando él lo pedía”, asegura Gacía Abad.
¿Cuál es la relación ahora entre el IBEX y el rey Felipe?
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¿Qué diría en un discurso… de abdicación?
«Su Majestad, le supongo un hombre ocupado, y más en estos momentos de gira de promoción por toda España. Como imagino que no habrá tenido tiempo para escribir su discurso de abdicación como Rey de España, me he tomado la molestia de hacerlo por Su Alteza, tómelo como un último servicio de un siervo a su monarca». Así comenzaba un artículo publicado en La Marea nuestro colaborador David Durán.
«Lo he escrito con las palabras exactas que ha utilizado su propio padre, el rey emérito, en sus discursos más emblemáticos. Creo que es de justicia; si con Juan Carlos I empezó todo, también todo debe acabar con él», escribía. ¿Quieres saber cómo sería ese otro discurso?
En el final de esta aciago año de 2020 llegamos al 90 aniversario de la sublevación republicana de Jaca, que en un momento de clara descomposición de la monarquía tenemos que poner aún más de relieve. La República como necesidad, la República como única salida democrática. La corrupción ha carcomido nuevamente a la institución monárquica, nada nuevo en este país, aunque su papel de intervención política sea menor que en el siglo XIX y el primer tercio del XX. Un mal entendido concepto de estabilidad ha hecho que los distintos gobiernos e instituciones desde la Transición hicieran la vista gorda ante los desafueros del «emérito» Rey Juan Carlos. Cuando las vergüenzas han sido imposibles de ocultar, aunque se conozcan solo por investigaciones periodísticas y no por actuaciones judiciales, la estrategia política y mediática es circunscribir los hechos al exclusivo periodo del anterior rey y desvincularlos totalmente de la persona del actual monarca Felipe VI. Pero hay indicios claros de beneficio por parte del mismo, siquiera indirectamente, que merecerían una investigación de la que cualquier persona de a pie no escaparíamos. Pero esto no es solo una cuestión de personas. La institución es corrupta, además de antidemocrática. Nos acusan de aprovechar estos hechos para cuestionar la monarquía. Pero es ella la que se ha puesto en cuestión a sí misma, la que se ha hecho el mayor daño. Los hechos solo han venido a darla razón a las organizaciones de izquierda que la cuestionábamos. La República sería un principio democrático irrenunciable.
La República sería un principio democrático irrenunciable aunque esta fuera la más limpia y honrada de las monarquías, pues estás siempre parten de la desigualdad que supone que la jefatura del estado caiga en manos de una familia por el hecho de serlo, anacrónico más de dos siglos después de la abolición del antiguo régimen y de la sociedad estamental. Pero si encima la monarquía es corrupta los motivos para abolirla se multiplican.
Pero la República no debe ser solo la elección democrática del Jefe del Estado. Debe ir acompañada de unos valores republicanos y sociales que no deberían ser solo patrimonio de la izquierda, aunque el péndulo electoral pueda pasar de un lado a otro en los sucesivos procesos que ha de atravesar una democracia. Hablamos de valores éticos, de ciudadanía, de libertad, de fraternidad, de igualdad real, y no solo teórica, ante la ley. Pero estos valores no se sustentan sin derechos sociales, sin la capacidad detener unos mínimos cubiertos como el derecho al trabajo, ala vivienda, a una educación pública de calidad y a una atención sanitaria universal. Que el trabajo y la suficiencia económica permitan que todas las personas tengamos tiempo de ocuparnos de los asuntos públicos, de la “res pública, de lo que a todas atañe. Sin esos derechos sociales y económicos no es posible ejercer los derechos políticos en libertad. Unos y otros van indisolublemente ligados en una verdadera República en libertad.
https://arainfo.org/a-los-90-anos-de-la-sublevacion-de-jaca-la-republica-necesaria/
A d. Felipin nº 6 solamente le falta la mirada de » perrillo abandonado… » que luce su antecesor y padre , » nuestro entrañable Juancar 1º » anteriormente apodado con el alías del » campechano » y actualmente penoso/cochambroso fugado negociando con la justicia » justiciera » de su ex penoso y acabado reino.
PD.
Eso si ; los » andares » ya los tiene desde la cuna nuestra nueva criatura auto encumbrada como » jefe del estado ( mafioso)» y con el preocupante apodo del » preparao………» ; ni más ni menos.
Salud y cada día más próxima 3ª República de Repúblicas de los pueblos y gentes de España.