Sociedad

RTVE gasta más de 4,3 millones de euros en programas religiosos al año

La misa del domingo, conocida como El día del Señor, se lleva una gran parte del presupuesto: en 2019 tuvo un coste de 1,5 millones de euros.

Emisión de El Día del Señor en La 2 de TVE

La corporación de Radio Televisión Española gastó en 2019 4.345.661 euros en programas religiosos emitidos tanto TVE como en RNE. En televisión, los programas se repartieron principalmente entre La 2, TVE América, TVE Asia, TVE Europa/África, y algunos en la desconexión de La 2 en Cataluña. El segundo canal de la corporación fue el que más horas de programación religiosa emitió, con un total 180 horas en todo 2019.

TVE emite 10 programas religiosos, la inmensa mayoría dedicados al catolicismo. También hay espacio para el judaísmo, el cristianismo evangélico o el islam.

Si atendemos a los gastos, a los que ha tenido acceso La Marea a través de una petición al Portal de Transparencia, la misa del domingo, conocida como El día del Señor, se llevagran parte del presupuesto. En total, la eucaristía dominical tuvo un coste de 1,5 millones de euros en 2019. La 2 de TVE fue el canal que emitió las 61 celebraciones católicas que acapararon un total de 67,5 horas de televisión. En 2017, el actual vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias aseguraba que la “Iglesia católica tiene ya bastantes canales en los que podrían emitir misa o lo que quieran”, por lo que pedía acabar con la misa televisada: «A mí me parece que las televisiones públicas tienen que estar para emitir contenidos culturales, contenidos que defiendan la diversidad y la educación sexual”, defendía hace tres años.

Pueblo de Dios es el segundo programa religioso más costoso de la televisión publica, también de orientación católica. Entre los recursos propios y externos la corporación gastó 760.277,87 euros en sus 101 programas en La 2, algunos de los cuales fueron repuestos en las cadenas internacionales.

La Misa (solo emitida en La 2 Cataluña), Buenas Noticias TV (programa evangélico), Shalom (comunidad judía) y Últimas Preguntas completan el top de los programas religiosos de mayor coste, con un presupuesto de entre 300.000 y 400.000 euros cada uno y una media de 50 programas anuales.

El resto de programas representan un menor gasto: Testimonio, Procesiones, Medina TVE (para la comunidad musulmana) y Culto evangélico. De este último tan solo se emitió un programa en todo 2019 con una duración menor a una hora. A pesar de ello tuvo un coste cercano a los 20.000 euros.

La mayor parte de estos programas se llevaron a cabo con recursos propios –en un 89%–. Para el 11% restante se necesitó contratar recursos externos.

También en RNE

Con un menor presupuesto, la radio pública también dedica espacio a la religión. En 2019, RNE gastó casi 110.000 euros en este tipo de programación. El espacio más costoso fue Frontera, “un programa de entrevistas basado en el diálogo entre la fe y la razón”, según reza en la propia web. Las 46 horas en antena en Radio1 supusieron unos 54.000 euros para las arcas de la corporación.

Fe y convivencia es un programa semanal “específico dedicado a otras confesiones religiosas no católicas” para creyentes evangélicos, judíos y musulmanes que se emite los domingos. El año pasado ocupó más de 45 horas y tuvo un valor de  21.320,64 euros. El resto de programas –misas, Alborada, Horizonte…– supusieron un coste menor.

Domingos religiosos

En octubre de 1956, el capellán de Franco bendijo las instalaciones de Paseo de la Habana donde comenzaron las primeras emisiones de TVE. Tal y como explica el periodista Ángel Munárriz en su libro Iglesia S.A., el catolicismo “goza de un claro privilegio en los medios públicos” que viene arrastrando desde la dictadura. Los acuerdos con el Vaticano no obligan a que exista programación religiosa, aunque sí especifican que “el Estado velará para que sean respetados en sus medios de comunicación social los sentimientos de los católicos”.

El bloque dominical de programas religiosos se fraguó en los 80 y, 40 años más tarde, siguen formando parte de la parrilla de la televisión pública de los domingos por la mañana, con una clara preponderancia de la religión católica. La crisis de la COVID-19 ha provocado un aumento de los espectadores de la Santa Misa. La imposibilidad de salir de casa hizo que la eucaristía del 15 de marzo fuese seguida 1.061.000 espectadores –el doble que la semana anterior–, lo que la convirtió en líder de su franja horaria con un 14,3% de cuota de pantalla y obteniendo su mejor dato histórico.

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Comentarios
  1. Nuestra democracia defiende la libertad de conciencia y la pluralidad democrática en su Constitución, pero se emiten rituales religiosos en algunas televisiones públicas. Esto, de alguna manera, vulnera, queramos o no, estemos o no de acuerdo, por nuestras creencias, la aconfesionalidad del Estado, recogida por la Carta Magna.

    Las religiones tienen sus propias cadenas televisivas y emisoras de radio privadas, por lo que las televisiones públicas son para todos y todas y se debe actuar con la máxima neutralidad. No sirve aquello de apagar el televisor si no se quiere ver. ¿Se puede decir, de esa manera tan superficial, que si no me gusta un artículo de la Constitución puedo incumplirlo? Por eso, porque hay lugares para el culto de las diversas confesiones religiosas, porque hay emisoras de radio y cadenas de televisión privadas que las propias confesiones han creado, considero con el debido respeto a los creyentes y el respeto que ellos deben tener hacia los que no lo somos que las televisiones públicas deben de dejar de emitir rituales religiosos.

    Lo contrario puede ser sectarismo y adoctrinamiento y más si cabe cuando se prima a una determinada confesión sobre las otras. No atenta contra la libertad de expresión ni tampoco contra aquellos que no puedan asistir por motivos físicos. La Constitución habla de aconfesionalidad y debemos cumplir. Eso hace más grande nuestra democracia y sus valores.

    Ximo Estal Lizondo

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