Cultura
Alicia Borrachero: “Vivimos empastillados”
En 'El efecto', una obra de teatro que se estrena esta semana, se platean temas como el amor, la salud mental o la ética de las farmacéuticas.
La actriz Alicia Borrachero interpreta a una doctora en El efecto, una obra de teatro que califica de «experiencia teatral intensa y estimulante» que examina con humor el origen del amor, la salud mental y los límites de la ética: «Vivimos totalmente empastillados».
«Vuelvo a ponerme la bata blanca, vuelvo a la medicina», ha contado con humor este lunes a EFE Alicia Borrachero, (Madrid, 1968), que fue la doctora Cruz Gándara en la mítica seria de televisión Hospital Central. Ahora, en ‘El efecto’, que se estrenará este miércoles en los Teatros del Canal de Madrid, interpreta de nuevo a una doctora junto a Fran Perea (otro médico), y ambos realizan un ensayo clínico con Elena Rivera e Itzan Escamilla como pacientes.
En el ensayo clínico descrito en la obra teatral se desarrolla un antidepresivo cuyo efecto genera enamoramiento. «Es un tema actual, vivimos totalmente empastillados», ha explicado la actriz, quien se pregunta si es ético o si tiene más que ver con el negocio de las farmacéuticas. En ella se platean temas como el amor, la salud mental o la ética de las farmacéuticas, «todo bajo la óptica de humor ágil e inteligente».
«Esta pieza es una experiencia impactante a través de un viaje sensorial que propone no solo la autora, la británica Lucy Prebble -creadora de la multipremiada serie Succession, sino también el director, el peruano Juan Carlos Fisher», explica Alicia Borrachero.
Es un texto dinámico: «Es como hacer esgrima, aparecen duelos dialécticos de gran ingenio», cuenta Borrachero, que destaca la agilidad y agudeza de la escritora: «Su escritura es un reto, me divierte interpretarlo».
A lo largo de la obra, Connie (Elena Rivera) y Tristán (Itzan Escamilla) se plantean cuestiones como: ¿Qué es el amor? ¿Somos pura química? ¿Estás enamorado o solo estás experimentando una descarga fuerte de dopamina? «El problema es que no saben si la conexión que sienten es real o si es la consecuencia de un nuevo antidepresivo«, dice Elena Rivera.
La pieza plantea distintos puntos de vista «dependiendo de los personajes y de lo que les va ocurriendo», añade Borrachero, quien explica que en la obra se expone que ya no vivimos en un mundo de locos o cuerdos, «sino de personas con problema de salud mental o personas que todavía no tienen un problema de salud mental».