Sociedad
[INVESTIGACIÓN] ¿Quién maneja Gestlife?
Una investigación de ‘La Marea’ ha reunido evidencias de que la agencia de gestación subrogada Gestlife, registrada en EE.UU. (donde esta actividad es legal), desarrolla su operativa desde Barcelona sin ser fiscalizada. Para ello utiliza un complejo entramado de sociedades. Todas ellas tienen el mismo administrador único: Diego Prados Hill, el nuevo nombre del empresario condenado por pederastia por abusar de un niño del Casal del Raval.
Este artículo sobre Gestlife forma parte del dossier de #LaMarea105, dedicado a la industria del alquiler de vientres. Puedes conseguir la revista aquí o suscribirte para recibirla y apoyar el periodismo independiente.
Aunque en España la gestación subrogada no es legal, Gestlife, la agencia que se presenta a sí misma como líder en Europa en este negocio tiene su sede justo enfrente de la Casa Batlló, en pleno paseo de Gràcia de Barcelona. En la puerta, su logo muestra a un bebé bien encajado en una G mayúscula. «Gestlife. Gestación Subrogada. Oficina Informativa», se puede leer.
Una joven con un ligero acento extranjero abre la puerta. La salita de la entrada es un pequeño vestíbulo con un sofá. En las paredes hay pegados varios folios DIN-A4 encabezados por banderas de distintos países. «La política de la empresa es no hablar con periodistas», dice.
Gestlife explica en su página web que pertenece al grupo empresarial estadounidense Invest Medical LLC, registrado en Florida. Sin embargo, La Marea ha encontrado pruebas de que ofrece sus servicios de gestación subrogada a través de un complejo entramado de compañías españolas que desarrollan desde labores comerciales y publicidad hasta la gestión de los contratos, aunque, oficialmente, no parecen guardar ninguna conexión con Gestlife. Además, todas ellas comparten un administrador único común: el empresario catalán que fue condenado en 2007 a más de ocho años de prisión por abusar de un menor del Casal del Raval. Hoy se hace llamar Diego Prados Hill. Entonces su nombre era José María Hill Prados.
Tras insistir, la joven accede a facilitarnos un correo electrónico para enviar unas preguntas a los responsables de Gestlife. En un papel escrito a mano, se lee una dirección de e-mail con el dominio panamsa.com. Al preguntarle qué es Panamsa, se encoge de hombros y dice que no lo sabe.
Entender qué es exactamente Gestlife (una empresa que asegura realizar «programas de maternidad subrogada en todos los países donde la gestación subrogada es legal») y saber quién está detrás de esta agencia no es nada sencillo.
Ni en la página web de Gestlife ni en la de Invest Medical LLC hay rastro de las empresas propiedad de Diego Prados Hill que trabajan para esta agencia de gestación subrogada. El único que existía fue eliminado pocos días antes de publicar esta información y después de que, desde La Marea, preguntáramos qué labores desarrollaba. Se trata de la Sociedad Prestataria de Cobros y Gestión de Pagos SL, que hasta finales del pasado febrero figuraba en el aviso legal de la página web de Gestlife como responsable de la misma. Su actividad principal es «otras actividades de apoyo a las empresas n.c.o.p. [siglas de «no comprendidas en otras partes]».
Otras compañías propiedad de Prados Hill que trabajan para la agencia de vientres de alquiler son Promarketing and Sales Force SL, encargada de la parte comercial de Gestlife, al igual que IMarketing and ISales SL; y Panamerican Sales Institute SL, la sociedad propietaria de Panamsa que, entre otros, gestiona un centro de formación a través del cual se ofrecen cursos para las madres gestantes después del parto.
Algunas de estas sociedades administradas por Prados Hill comparten número de teléfono y empleados, como ha podido comprobar La Marea tras realizar varias llamadas y visitar la oficina de Gestlife en Barcelona. También coinciden sus domicilios fiscales, que se reparten entre varios pisos ubicados en dos edificios de un gran bloque de la avenida Meridiana de la capital catalana. Pero la prueba más evidente de que todas están vinculadas a Gestlife es que sus respectivas cuentas anuales han sido presentadas, al menos en una ocasión, por la misma persona, cuyo correo electrónico pertenece al dominio gestlifesurrogacy.com, tal como se recoge en la documentación del Registro Mercantil consultada por este medio.
Se trata del responsable de recursos humanos de Gestlife, quien también figura como tal en IMarketing and I Sales, SL y ProMarketing And Sales Force, SL –al menos así era a finales de 2022, según documentación a la que ha tenido acceso este medio–. Es, además, la persona con correo de Panamsa a la que nos remitieron en la oficina de Paseo de Gràcia para enviar nuestras preguntas por escrito. Nunca las respondió.
En la dirección de la avenida Meridiana también estaba registrada, a nombre de Kevin Arjona Calzada, el CEO de Gestlife, la compañía Empire External Services SL. Aunque esta fue liquidada en febrero de 2023, sus datos seguían apareciendo el pasado 3 de marzo en el aviso legal de la web del despacho de abogados especializados en gestación subrogada Brachmann & Brachmann, que en algunos foros se presenta como servicio jurídico de Gestlife. La presunta directora legal de este bufete, Amaya Itúrbide, estaba promocionando los servicios de la agencia en la feria Wish for a Baby, que se celebró el 1 y 2 de marzo en Berlín, según ha podido comprobar este medio tras visitar su estand.
La historia de Prados Hill
José María Hill Prados fue condenado en 2007 a más de ocho años de prisión por abusar sexualmente de un niño de 12 años. Cuando fue puesto en libertad, el menor por cuyos abusos había sido condenado ya había alcanzado la mayoría de edad y había comenzado a colaborar empresarialmente con los hijos adoptivos de su agresor. Esta cooperación es una de las evidencias incluidas en una investigación de El Confidencial, que en 2015 concluyó que el verdadero dueño de la red de empresas era José María Hill Prados, aunque su nombre no figuraba en ningún registro.
El niño era Diego Giménez Sánchez, quien a sus 22 años se había convertido en un joven prodigio del mundo empresarial español conocido por su nuevo nombre oficial: Diego (Dídac, en catalán) Sánchez Giménez. Entre las sociedades de su imperio, supuestamente conformado por 18 compañías, destacaba Eliminalia, la empresa que limpiaba el pasado en Internet de sus clientes mediante técnicas fraudulentas; la agencia Subrogalia –que fue condenada en 2017 a pagar casi 90.000 euros por prácticas engañosas en las que la empresa acababa pidiendo a unos clientes más dinero de lo pactado para llevar a cabo un proceso de subrogación–. Y también Gestlife Solutions SA, una compañía constituida en 2016 y de la que se desvinculó en 2018.
En la actualidad, según cuenta en sus redes sociales, la principal ocupación de Sánchez Giménez son las actividades de la Fundación Ideas Dídac Sánchez, desde la cual se estaría dedicando a la asistencia de niños y niñas en situación de pobreza.
La forma de operar de Hill Prados también funciona hoy de un modo distinto. A sus 65 años, ya no queda oculto tras empresas registradas a nombre de jóvenes como Dídac o sus propios hijos. Ahora es él mismo quien, con su nuevo nombre, Diego Prados Hill, figura en el Registro Mercantil como administrador único en 13 sociedades españolas; en 11 de ellas le acompaña como apoderado uno de sus hijos, Alan Alexis Hill Prados.
Las pruebas de que Diego Prados Hill está tras Gestlife van más allá de los registros oficiales. Distintos extrabajadores de la empresa con los cuales se ha comunicado este medio, y que han solicitado el anonimato por temor a represalias legales, le han identificado como el verdadero dueño de la agencia de vientres de alquiler, asegurando que era el primero en entrar y el último en salir de las oficinas de la avenida Meridiana. Exactamente como ocurría en Subrogalia, según confirmó El Confidencial.
Por otro lado, en agosto de 2024, la Asociación de Centros Colombianos de Reproducción Humana (ACCER) envió a sus miembros una circular informativa en la que les informaba de que alguien «que en Colombia se ha presentado con el nombre de Diego […] ha querido ingresar en el país para la celebración de servicios de medicina reproductiva humana» en nombre de la compañía Gestlife. ACCER avisaba a sus asociados del pasado de Hill Prados y les recomendaba «precaución, prudencia y cuidado». El caso llegó a los tribunales, ya que Alan Alexis Hill Prados denunció a ACCER por perjudicar la imagen de Invest Medical. Finalmente, el juzgado desestimó la causa.
Otra denuncia por agresiones
Otro hecho que vincula a Prados Hill con Gestlife tiene que ver con la investigación iniciada a finales del pasado enero por el Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona. Tal como avanzó Crónica Global, un joven de 21 años acusa al empresario de haberlo sometido a agresiones sexuales reiteradas bajo amenazas y manipulación que le causaron «ansiedad y angustia». Según su declaración, conoció a Prados Hill en su oficina situada en la avenida Meridiana, donde lo contrató para trabajar como recadero de Gestlife a cambio de «tener relaciones sexuales» una vez a la semana.
A pesar de que en su página web Gestlife explica que opera en 11 países y cuenta con «12 años de experiencia», la agencia de vientres de alquiler no proporciona información sobre sus orígenes ni tampoco sobre su equipo directivo. Las fotos del supuesto personal son, en realidad, imágenes de stock del banco gratuito Freepik. La sección «Nosotros» no menciona nombres, sino que exhibe una lista de supuestos premios otorgados por organizaciones de dudosa credibilidad. Entre ellos, uno destinado a «productos y servicios para mascotas».
La reivindicación de esos 12 años de trayectoria choca con los comentarios de usuarios que se identifican como representantes de la empresa en foros de Internet que niegan cualquier vínculo entre la actual Gestlife y Subrogalia, a pesar de que el hilo conductor entre ambas parece evidente. Por ejemplo, en sus respectivos vídeos promocionales se incluyen frases calcadas y describen formas de trabajar similares. Pero, sin duda, el indicio más revelador se encuentra en el registro mercantil: Subrogalia fue constituida en 2013, hace justo 12 años, mientras que la marca Gestlife nació en 2016, cuando fue creada Gestlife Solutions SA.
El apoderado de Invest Medical, la compañía de EE.UU., a la cual Gestlife dice pertenecer, es Joan Ramon Gallego Aragón, quien firmó los contratos con los clientes a los que ha tenido acceso La Marea. Gallego está vinculado al universo Gestlife desde hace años: en 2022 fue uno de los liquidadores de Gestlife Solutions SA., la empresa de Diego Sánchez, y en 2015 figuró como cofundador de la Fundación Dídac Sánchez. Varios exempleados confirman haberle visto en las oficinas de avenida Meridiana trabajando en Contabilidad.
Una nueva cara en Gestlife
Actualmente, la figura más visible de Gestlife es Kevin Arjona Calzada, un joven de 29 años que se identifica como CEO de Gestlife España en su perfil de LinkedIn y que mantiene numerosas conexiones empresariales con Diego Prados Hill y sus hijos.
Con 18 años recién cumplidos, en 2016, Arjona registró Empire External Services, una empresa que posteriormente se utilizó para crear diversos dominios web relacionados con Gestlife, incluida la página del bufete legal Brachmann & Brachmann. Un año después, registró a su nombre la empresa International Reproduction Programs SL, dedicada a «la publicidad de tratamientos de reproducción asistida».
Entre los supuestos éxitos empresariales de Arjona figura la aplicación MyFreeHands, diseñada para escuchar mensajes de WhatsApp mientras se conduce. Esta fue desarrollada por Secure Drive Empire SL., empresa en la que el joven era administrador único y Prados Hill, apoderado (hasta su cierre en 2023). Posteriormente, el empresario ha registrado otras sociedades con nombres que incluyen la palabra Empire.
Kevin Arjona fue también director de Investmedical Europe Ltd, empresa activa entre 2019 y 2022, y cuya razón social se asemeja a la del grupo estadounidense propietario en la actualidad de la marca Gestlife. Asimismo, comparte varias sociedades junto a Alan Alexis Hill Prados, quien, según fuentes internas, ejerce como jefe de contabilidad.
Los nombres de Kevin Arjona y de Alan Alexis Hill Prados figuran en varias empresas registradas en los países donde la agencia dice tener filiales. Sin embargo, están dadas de alta como empresas turísticas y evitan referencias explícitas a Gestlife, Invest Medical o la gestación subrogada. Así ocurre en Albanian Assistance Group (Albania), Invest Medical Greece (Grecia), Assistance Group EU (República Checa), Global Assistance Georgia LLC (Georgia), Sogetur (México) y Turismed Colombia (Colombia).
El CEO de Gestlife no solo pone su nombre en empresas vinculadas a la familia Hill Prados. También aparece en vídeos promocionales de los cursos que ofrece Panamsa, en los que explica cómo ofrecer una «imagen confiable» de una empresa.
‘Follow the money’
«Participar en nuestro programa de gestación subrogada te permitirá cumplir muchos de tus sueños», dice un vídeo promocional de Gestlife en ucraniano, subido a YouTube. La narración se acompaña de imágenes de stock donde se ve a una mujer rubia lanzando billetes al aire. «Podrás comprar tu propia casa o un coche nuevo, brindar la mejor educación a tus hijos o viajar con tu familia». Y añaden: «Nadie te cuidará como lo hacemos nosotros».
Según la propia página web de Gestlife Ucrania, las mujeres que participan en su programa como gestantes pueden ganar alrededor de 20.000 euros si el embarazo se lleva a cabo dentro de sus fronteras. Esta cifra aumenta si aceptan ser trasladadas a otros países, como Grecia, donde el pago alcanza los 23.500 euros por un solo bebé (prometen bonificaciones adicionales en caso de gemelos o de cesárea). Además, Gestlife ofrece pagos extra a quienes recluten a otras mujeres y, como incentivo adicional, un iPhone.
Las cantidades sufragadas a las gestantes suponen menos de una cuarta parte de lo que las parejas acaban pagando a Gestlife. Según un contrato al que ha tenido acceso La Marea, la agencia pidió a una pareja más de 85.000 euros para contratar a una mujer que llevase a cabo el proceso fuera de su país de origen. Esta suma puede aumentar dependiendo de varias circunstancias, tales como el retraso en las gestiones legales, la necesidad de procedimientos médicos añadidos, la hospitalización del recién nacido en una incubadora o la selección de características específicas en la donación de óvulos.
Según lo que se lee en el contrato, el pago ha de hacerse a un banco de Carolina del Norte a nombre de una empresa registrada en Florida, Invest Medical LLC. En otros casos, los pagos van hacia otras cuentas bancarias en Nueva York o incluso Delaware, donde está inscrita la empresa Global Medical Services LLC, cuya página web fue creada por la empresa, hoy disuelta, Gestlife Solutions SL. Pero otros documentos internos de la empresa revisados por este medio muestran un modus operandi diferente y potencialmente incompatible con la ley española, que prohíbe la publicidad y el negocio de vientres en alquiler.
En realidad, la persona encargada de vender estos servicios no trabajaba para Gestlife ni Invest Medical, sino para la empresa española Promarketing And Sales Force SL, propiedad de Diego Prados Hill, y recibía comisiones que variaban dependiendo del país de destino de la subrogación. El suyo no es un caso aislado: otras personas que recientemente han trabajado en ventas para Gestlife han confirmado a La Marea que fueron contratadas por la misma empresa y por otra con las mismas características, IMarketing and I Sales SL, para las cuales tenían que alcanzar unos objetivos mínimos de contratos de gestación subrogada, que después se firmaban a nombre de Invest Medical.
Otro extrabajador empleado en marketing para Gestlife dijo haber firmado el contrato laboral con la Sociedad Prestataria de Cobros y Gestión de Pagos SL., la misma compañía que a finales de febrero de 2025 desapareció del apartado de «protección de datos».
Este cambio no es el único realizado por sociedades del universo Gestlife en los días previos a la publicación de este reportaje. Uno de ellos tiene que ver con el despacho Brachmann &
Brachmann. El nombre de este bufete, que a principios de marzo de 2025 no existía como empresa registrada, empezó a aparecer a partir del 24 de febrero en Google Maps al escribir Gestlife, ubicado justo en la dirección donde está la oficina informativa de la agencia de vientres de alquiler. También las voces que contestan al teléfono han cambiado su mensaje inicial varias veces en las últimas semanas. A veces, responden diciendo Gestlife; otras, Brachmann & Brachmann.
Lo que parece no cambiar son los anuncios recurrentes de Gestlife en Infojobs en los que buscan comerciales para atender a «pacientes que solicitan información sobre nuestros programas para ser padres». Además del salario, de 24.000 euros brutos anuales, la agencia ofrece un sistema de incentivos con el que «se pueden alcanzar fácilmente los 80.000 euros anuales».