Internacional
Alemania gira a la derecha y da el mejor resultado de su historia a los ultras de AfD
La CDU de Friedrich Merz gana las elecciones con casi un 30% de los votos. La extrema derecha, segunda fuerza más votada, obtiene su mejor resultado desde la Segunda Guerra Mundial.
BERLÍN // Los conservadores de la CDU-CSU liderados por Friedrich Merz, multimillonario del ala más derecha del partido de la excanciller Ángela Merkel y el que fuera durante años su gran oponente interno, han ganado claramente las elecciones en Alemania, con un 29%, según los resultados preliminares. El motor económico de la Unión Europea ha dado un volantazo claro a la derecha este 23 de febrero de 2025, que se recordará por ser el día en que la extrema derecha, liderada por Alternativa por Alemania, con Alice Weidel a la cabeza, ha obtenido el mejor resultado histórico desde la Segunda Guerra Mundial. Un 20% de los votos ha recibido este partido con su discurso xenófobo, que incluso amenaza con devolver a sus países de origen a personas que ya cuentan con nacionalidad alemana y que se enorgullece de perseguir los derechos de las minorías y de ser prorruso y trumpista.
Los socialistas del SPD, que gobernaron en la legislatura anterior con Olaf Schölz como canciller en tripartito con Los Verdes y Liberales, sufren una derrota histórica y caen hasta el 16,5%. En comparación con el patinazo de los socialistas, Los Verdes han salvado los muebles pese a haber registrado tan solo un 12% de los votos, según datos preliminares.
No obstante, la sorpresa en la parte izquierda del espectro la ha dado Die Linke (La izquierda), que empezó la campaña electoral temiendo por sus asientos en el Parlamento y ha logrado un 8,5% de los votos a pesar de la competición con su exlíder Sarah Wagenknecht. Tanto su partido como el de los liberales –estos últimos socios de coalición del SPD– se enfrentan a una noche de incertidumbres, pues ambos rondan el umbral del 5% necesario para ingresar en el Bundestag pero es bastante probable que acaben quedando fuera.
Desde Die Linke, la diputada Heidi Reicheneck ha destacado que el enfoque en temas sociales ha sido clave para el éxito. «Escuchar y actuar en favor de la gente nos ha llevado a este resultado”. Entre las principales propuestas que su partido impulsará en el Bundestag están la regulación del precio del alquiler, la eliminación del IVA en productos básicos y un sistema fiscal más justo. Reicheneck asegura que su formación luchará por mayorías sociales que respalden estos cambios.
Perspectivas de coalición
La CDU/CSU emerge como la principal fuerza política, pero lejos de una mayoría absoluta. Es más que probable que los conservadores, sin embargo, logren conformar un gobierno sin tener que recurrir a la extrema derecha, a la que en principio todos los partidos mantienen aislada con un cordón sanitario que Merz rompió por primera vez puntualmente, al aprobar con los votos de AfD, un paquete de políticas antiinmigración.
En la sede del SPD se esperaban los malos resultados, que han sido incluso calificados de “catastróficos” por el ministro de Defensa, Boris Pistorius, al que muchos veían como el candidato alternativo a Schölz. El aún canciller ha reconocido su total responsabilidad en la derrota, felicitó a Merz por su victoria, y expresó su preocupación por el ascenso de la ultraderecha. Los socialistas no ocultan su interés por cooperar con la CDU para contribuir a un gobierno estable, aunque Schölz ya dijo que no tenía interés en formar parte de él.
Con Los Verdes, el pacto será quizás más complicado porque la CDU se ha mostrado reacia y distante a sus posiciones, pero el candidato a la cancillería, Robert Habeck, se declara dispuesto a seguir asumiendo responsabilidad de Gobierno en caso de que las cifras lo hagan posible y que el ganador plantee esa posibilidad.
Merz, por su parte, celebró el triunfo de su partido en las elecciones y destacó que la formación está lista. En su discurso desde la sede del partido, agradeció al líder de la Unión Social Cristiana (CSU), Markus Söder, y a los militantes que trabajaron intensamente durante la campaña. «Hemos realizado un gran esfuerzo y los votantes han depositado su confianza en nosotros. Asumo esta responsabilidad con el mayor respeto».
El que será futuro canciller subrayó que la CDU enfrentó un «duro pero necesario» proceso electoral en el que se debatieron temas clave como la economía, la migración y la seguridad. «Ahora es momento de dialogar y formar un gobierno funcional con una sólida mayoría parlamentaria», añadió. También advirtió que Alemania no puede permitirse negociaciones prolongadas y que se necesita actuar con rapidez para garantizar la estabilidad interna y la presencia del país en Europa y el mundo.
La AfD se convierte en segunda fuerza aunque, a juzgar por lo dicho por su líder, Alice Weidel, en estas elecciones lo que ha ganado es su discurso. “La CDU prácticamente ha adoptado el programa de la AfD, por lo que no serían necesarios compromisos adicionales”, ha dicho la candidata del partido con el que Merz ya dijo que no pactaría.
Alemania enfrenta ahora un período de incertidumbre. El país, con una situación económica en declive, dará un giro a la derecha que amenaza con llevarse por delante derechos sociales conquistados. Cora, una joven de 25 años que ha votado en Berlín, expresaba su preocupación por el avance de la derecha por sus consecuencias preocupantes para sectores de la sociedad, como la comunidad LGBTIQ+, las personas con ascendencia migrante y aquellos con menos recursos económicos. En su caso particular, mencionó su inquietud sobre el posible recorte del Bürgergeld, el subsidio ciudadano que recibe, en caso de que se implementen ciertas medidas propuestas por estos partidos. Para ella, este cambio representaría un retroceso.
Zein, que ha votado por primera vez en unas elecciones generales en Alemania, adonde llegó como refugiada desde Siria, también vive con miedo no solo a AfD sino por el giro a la derecha de los conservadores de la CDU que quieren acabar radicalmente con los principios que le permitieron a ella llegar a este país. “Como persona queer puedo decir que los resultados de estas elecciones son una noticia terrible”, asegura. Unas posiciones y un miedo que comparte mucha gente en Alemania. Tras los resultados históricos de la ultraderecha, hay convocadas manifestaciones para enviar un mensaje de resistencia contra el ascenso de la extrema derecha.