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Dossier #LaMarea104 | La vivienda social que necesitamos
#LaMarea104 hablamos con especialistas en arquitectura sobre cómo deberían ser las viviendas sociales que es imprescindible construir para dar solución a la emergencia habitacional en España.
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El tema de la vivienda llevaba años casi desaparecido del espacio público. Las calles habían dejado de reclamar el derecho constitucional a su acceso y, prácticamente, solo la incansable lucha de la Plataforma de Afectadas por la Hipoteca (PAH) nos recordaba que en este país sigue habiendo demasiadas casas sin gente y demasiada gente sin casa. Pero en 2024 se produjo el cambio. Protestas multitudinarias por todo el país (en las islas y en la península) empezaron a exigir a las administraciones poner freno a un modelo turístico voraz que agrava aún más las dificultades de la población local para conseguir un espacio donde vivir con dignidad. Desde entonces, son cada vez más frecuentes las marchas que reivindican que «la vivienda es un derecho, no un negocio».
En la actualidad, hay pocos días sin que los medios de comunicación incluyan una noticia sobre vivienda. Una de ellas nos pilló preparando este dossier. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la creación de una empresa pública de vivienda. Sobre este proyecto, pero también sobre las promesas y brindis al sol de las últimas décadas, hablamos en esta revista. Pero sobre todo preguntamos a especialistas en arquitectura cómo deben ser las viviendas sociales que necesitamos para evitar volver a caer en los errores cometidos en el pasado.
Porque la vivienda social no tiene que ser pequeña, monótona, construida con materiales de baja calidad ni tiene que estar situada en la periferia de las grandes ciudades. Ejemplos recientes construidos en España, algunos de ellos premiados y reseñados por medios internacionales como The Guardian, así lo demuestran.
El objetivo de acercar el porcentaje de vivienda social respecto al total en España (2,5%) al de la media de la Unión Europea (9,3%) parece aún muy lejano. Soñar con rozar el de los Países Bajos (30%) es justo eso, un sueño. O alcanzar una política de vivienda como la de Viena puede sonar a utopía. En cualquier caso, lo innegable es que la lucha por recuperar este derecho ha vuelto a despertar.
El alarmante machismo de Italia
Pero además de hablar de vivienda, #LaMarea104 incluye otros temas de interés, como un reportaje de Bárbara Celis sobre el machismo en Italia, un país que se echó a la calle tras el asesinato de Giulia Cecchettin, de 22 años, por parte de su expareja en noviembre de 2023, justo una semana antes de que se graduara en la Universidad de Padua. El feminicidio sacudió los cimientos patriarcales de un país que ocupa el puesto 87 en el Global Gender Gap Report 2024 que el Foro Económico Mundial utiliza para medir la paridad de género. Para hacernos una idea, España se sitúa en el número 10.
Y, una vez más, nuestra revista bimestral mira a Palestina. El reportero John McAuley nos cuenta cómo Israel ambiciona ocupar totalmente Cisjordania, un propósito para el que ahora, además, contará con el apoyo de gobierno de Donald Trump en Estados Unidos.
Por su parte, Olivia Carballar nos trae en esta revista la historia del viaje del virus del Nilo a través de los mosquitos que conectan Uganda y Andalucía. Para ello ha estado documentado durante meses el trabajo del equipo de científicos del Observatorio de Mosquitos de Guadalquivir.
También podrás leer sobre la nueva apuesta nuclear de Silicon Valley, por Marco Dalla Stella; sobre los ejércitos y la crisis climática, gracias a Helena Rodríguez; y de València, 50 días después de la Dana, por Carolina Gulino con fotos de Álvaro Minguito.
El toque de humor viene con Peli de Tarde, quien hace un repaso de la cartelera (ficticia) de 2024. Y, como siempre, guardamos espacio para la reflexión con El Incordio de Ana Carrasco-Conde; y para la cultura en nuestro suplemento ‘El Periscopio’, donde han huido de la nostalgia del cambio de año porque, como sostienen sus coordinadores Laura Casielles y José Ovejero: “la cultura no conoce fechas ni plazos. Se proyecta hacia el futuro y nos une con el pasado”.