Macron opta por su aliado centrista Bayrou como nuevo primer ministro

El centrista François Bayrou, aliado de Emmanuel Macron desde su llegada al Elíseo en 2017, es el elegido por el presidente como nuevo primer ministro de Francia, para intentar cerrar la crisis política que vive el país. Tiene 73 años y es el líder del Movimiento Democrático.

Bayrou se convertirá en el cuarto jefe del Ejecutivo en lo que va de año y sustituirá al conservador Michel Barnier, nueve días después de la moción de censura que derribó su Gobierno, el más efímero del país desde la Segunda Guerra Mundial.

Su nombre era uno de los que sonaba con más fuerza en los últimos días de este proceso, que Macron ha ido estirando ante las dificultades que se ha encontrado para designar al sucesor de Barnier.

El pasado martes, el presidente francés pasó la mayor parte de la jornada en Varsovia, donde mostró su respaldo a Ucrania junto al primer ministro polaco, Donald Tusk, pero suspendió algunos de sus actos para regresar lo antes posible a París. Poco después de aterrizar en la capital francesa, el Elíseo comunicó que el anuncio llegaría este viernes.

Las urnas

Durante todo el periodo de deliberación de Macron, la izquierda le exigió que hiciera caso a las urnas (la alianza izquierdista fue la que obtuvo un mayor apoyo parlamentario en las legislativas de julio pasado), pero los ‘macronistas’ y conservadores se mostraron reacios a apoyar a alguien que no procediera de la débil alianza en la que se apoyó Barnier.

Macron, al que la Constitución otorga el poder de nombrar al primer ministro, tardó dos meses en elegir al exnegociador del Brexit, cuyo futuro pasaba por la benevolencia de la extrema derecha lepenista. Ahora prometió actuar con más celeridad y dejar que sea en nuevo primer ministro quien encuentre los respaldos suficientes en el Parlamento.

Sobre la mesa estaba el nombre del finalmente elegido, François Bayrou, pero también otros que surgían del actual Ejecutivo, como el titular de Defensa, Sébastian Lecornu, o la de Trabajo y Sanidad, Catherine Vautrin, que la izquierda consideraba continuadores de la política ‘macronista’.