Política
Los 21 acusados por la protesta “Rodea el Congreso”, a juicio 12 años después
España fue condenada en 2021 por parte del Tribunal de Derechos Humanos al considera que no había investigado las denuncias de abusos policiales presuntamente ocurridos durante algunas de estas concentraciones
Los 21 acusados de causar desórdenes y enfrentarse a Policía durante la protesta denominada «Rodea el Congreso» del 25 de septiembre de 2012, la más multitudinaria de las convocadas entonces, se sentarán en el banquillo 12 años después para enfrentarse a penas que van entre los tres años y ocho meses de cárcel y los siete años y cuatro meses de prisión.
El Juzgado de lo Penal número 20 de Madrid tiene previsto celebrar desde este lunes el juicio por los altercados que tuvieron lugar entre la tarde del 25 de septiembre de 2012 y la madrugada del día 26 en las cercanías de la Cámara Baja.
Aquella jornada, convocada por varios colectivos que coreaban consignas como «Que no nos representan» o «Lo llaman democracia y no lo es», se saldó con 35 detenidos y al menos 64 heridos entre manifestantes y policías. Participaron unas 6.000 personas, según informó la Delegación del Gobierno entonces.
Esa protesta fue seguida por otras similares en los días siguientes, en las que también hubo algunos altercados que han desembocado en otros procesos penales.
De cara al juicio de este lunes, la Fiscalía pide penas de entre tres años y ocho meses de cárcel y los siete años y cuatro meses de prisión para los 21 encausados, a los que imputa los delitos de desórdenes públicos, atentado contra agente de la autoridad y de resistencia, y falta de lesiones.
La plataforma convocante de esas protestas, la Coordinadora 25S, ha hecho público un comunicado en el que critica que se llegue a un juicio «político» por unos hechos ocurridos hace 12 años, algo que ya debería llevar a que se suspenda, y que se pidan unas penas que suman un total de 112 años y 5 meses de cárcel.
Por su parte, la Fiscalía de Madrid solicita la mayor pena para cuatro de los procesados, para los que pide tres años y ocho meses de cárcel por un delito de desórdenes públicos más otros tres años y ocho meses por atentado. Por su parte, para dos de los imputados, Fiscalía de Madrid pide la solicitud mínima: tres años y ocho meses por un delito de desórdenes públicos.
El Ministerio Público sostiene que algunos de los congregados aquel día, en dos protestas cuyos integrantes confluyeron en la plaza de Neptuno, cerca del Congreso, acabaron «arremetieron violentamente contra el dispositivo policial desplegado tirando vallas y arrojando objetos contundentes contra ellos, lo que obligó a organizar el despliegue de diversas unidades de UIP para tratar de contenerlos».
Para la Fiscalía fueron «diversos grupos controlados y organizados», además de ciudadanos individuales, los que «dirigieron sus acciones a causar destrozos en la vía pública, intentando rebasar los cordones de seguridad establecidos, arrojando objetos no solo contra la fuerzas se seguridad sino contra los vehículos policiales».
Sobre algunos de los imputados relata que, además de lanzar objetos, pegaron patadas y puñetazos a los agentes, algunos de los cuales resultaron heridos.
El pasado mes de febrero, tres agentes antidisturbios fueron juzgados en Madrid acusados de mentir en sede judicial por acusar a una joven de agredirles durante una de las manifestaciónes que tuvieron lugar en 2013 a pesar de que los vídeos mostraban lo contrario. Los agentes alegaron no recordar bien los hechos pero, años antes, sostuvieron haber recibido puñetazos y patadas por parte de la joven manifestante. A pesar de que el fallo judicial recoge la falta de pruebas ante estas acusaciones, el juzgado absolvió a los policías al considerar que aunque en los vídeos no se pueda apreciar violencia contra los agentes, “tampoco puede decirse que tal acción no se produjera”.
En 2021, el Tribunal de Derechos Humanos condenó a España por la actuación policial que tuvo lugar durante una de estas manifestaciones. Una mujer denunció haber sido desalojada por la fuerza y de forma humillante mientras tenía lugar la concentración ocurrida el 29 de septiembre de 2012. El caso fue cerrado por falta de pruebas pero el TEDH consideró que el Estado no había investigado estas denuncias tras la negativa del Tribunal Constitucional a revisar la denuncia.
Negras tormentas agitan los vientos, Durruti.
Con el agravante de que, en la época que le tocó vivir a Durruti el pueblo estaba despierto y luchaba junto a sus defensores, y actualmente, en esta época que nos toca vivir a nosotros que definen como de gran progreso, el pueblo está manipulado, aborregado y dormido.
Qué haremos con estos mimbres?
Igual es que para despertar tienen que venir hostias que pongan los pelos de punta…
Lo malo es que vendrán para todxs.
Fuerza a lxs compas que van al juicio del sistema judicial franquista.
Ojalá hubiera todavia esta fuerza obrera combativa de los años del rodea el Congreso, de la primera marcha de la dignidad .
Eso fue antes que Podemos y su panda de revolucionarios de salón vinieran a reventar la verdadera lucha del pueblo, cuando había fuerza para reventar y hacer frente a un cordón de perros del estado.
Por aquí se está negociando el convenio del metal de nuevo como en 2021, si no se consigue y hay huelga , ya estamos preparados para enfrentar las tanquetas de Marlaska y toda la represión del gobierno vendeobrerxs de psoesumar, que arde Troya
Salud y anarkia.
Honor y gloria a quienes se enfrentan a la policía en defensa de los derechos y las libertades del pueblo.
Buscan, como siempre, escarmentar, intimidar.
Deberíamos estar cada día en la calle hasta que consigamos derogar la ley mordaza.
De lo contrario se quedará para siempre.
Seguimos dormidos, hay miedo o que nos pasa para que cada día seamos más dóciles ante los despotas?