Opinión
Trump, Europa y el gasto militar
"El aumento del gasto militar, siguiendo la estela de Estados Unidos, tiene consecuencias devastadoras para la economía y la población", escribe el economista Fernando Luengo
Que la amplia victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses tendrá —y tiene ya, de hecho— importantes consecuencias económicas, sociales y políticas, tanto en Estados Unidos como a escala global, es evidente. Y, por supuesto, también afecta a Europa.
Habrá que ver cómo se concretan las proclamas electorales y cómo se traducen en políticas concretas, pero parece probable un cierto distanciamiento del gobierno presidido por Trump en lo relativo al soporte logístico y financiero a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que se pretende reducir, para centrarse en espacios de mayor relevancia estratégica para Estados Unidos —Oriente Medio, Asia y, especialmente, China— y un acercamiento a Rusia con el propósito de encontrar una salida negociada a la guerra de Ucrania.
En este contexto de incertidumbre y cierta redefinición de las prioridades estratégicas de Estados Unidos, se alzan voces —muy relevantes, por cierto— que exigen un sustancial aumento del gasto militar de la Unión Europea (UE). La más reciente, la de Josep Borrell, que insistía en su último viaje a Ucrania en la necesidad de que la UE mantenga y amplíe su compromiso militar con este país, que permita cubrir, al menos en parte, la “retirada” de Estados Unidos y hacerse cargo de la supuesta amenaza para Europa de “la Rusia de Putin”.
De hecho, los presupuestos de Defensa, tanto en los países europeos como a escala comunitaria, siguiendo las presiones llevadas a cabo desde el complejo industrial y financiero, que no ha dejado de ganar protagonismo, ya ha registrado un notable crecimiento en los últimos años (aunque todavía se encuentra lejos del exorbitante gasto de Estados Unidos). Unas cifras cuya cuantificación precisa constituye un espacio opaco, pues partidas en principio destinadas a la esfera civil en realidad tienen una finalidad militar.
Pero se pide más, mucho más.
Este sería el camino, se nos cuenta, para que Europa se convierta en lo que ahora no es: un actor relevante, con autonomía estratégica, con capacidad para hacer valer una voz propia en un escenario internacional crecientemente dominado por la tensión y el conflicto.
Se reivindica, desde esta perspectiva, más Europa; una Europa más fuerte y solvente, presuponiendo que la clave de bóveda para avanzar en esa dirección es disponer de una potente industria militar, con capacidad disuasoria y, en su caso, para intervenir en los escenarios de conflicto (como el que ahora representa Ucrania). En el colmo del desatino, algunos llegan a afirmar incluso que «si Europa quiere la paz, debe prepararse para la guerra». Una guerra, no lo olvidemos, que enfrentaría a potencias nucleares y que podría llevarnos directamente al abismo.
Es cierto, vivimos una situación de encrucijada; los últimos años lo han sido —pensemos en el crack financiero, la COVID-19, la hiperinflación o la guerra de Ucrania— y las respuestas en materia económica, social y medioambiental no sólo han sido decepcionantes sino también sesgadas. Pero precisamente porque asistimos a momentos críticos, que requieren de actuaciones de calado estratégico, es obligado actuar en una dirección radicalmente distinta de la que ha hecho suya y pretende imponer el relato militarista, cada vez más influyente.
En lugar de continuar alimentando la confrontación militar entre Rusia y Ucrania suministrando al gobierno ucraniano logística y armamento, cada vez más sofisticado y potente, Europa debería defender como posición política irrenunciable que Ucrania tiene cerradas las puertas a su ingreso en la OTAN, ahora y en el futuro. Este podría ser el primer paso para una negociación entre las partes implicadas, ciertamente compleja, destinada a poner punto y final al conflicto. Porque la confrontación, no lo olvidemos, es deseada y promovida por Estados Unidos y la OTAN, a la que han respondido sumisamente las instituciones y los gobiernos comunitarios, también el nuestro.
Dar este decisivo paso contribuiría a colocar a la UE como un actor relevante, en una lógica radicalmente distinta de la militarista actual y de las empresas que se benefician de la misma, que están objetivamente interesadas en el enquistamiento y agravamiento de la(s) guerra(s).
Por lo demás, hay que tener muy presente que el aumento del gasto militar, siguiendo la estela de Estados Unidos, tiene consecuencias devastadoras para la economía y la población. Porque ese gasto compite, con ventaja, con el destinado a las esferas social y productiva. Suponer que contribuye positivamente a la expansión y fortalecimiento de la demanda agregada, al consumo y a la inversión, es un grave error, no sólo porque en realidad detrae recursos de esos ámbitos, sino porque condiciona su utilización. Resulta asimismo evidente que avanzar en esa dirección simplemente cierra las posibilidades, ya muy mermadas, de enfrentar el cambio climático y la transición energética, dado que la industria militar y las guerras constituyen uno de los principales factores de contaminación.
Ya lo hemos señalado antes: quienes defienden el aumento del gasto militar lo hacen en nombre de “Más Europa”. En un sentido similar, argumenta el informe recientemente publicado encargado a Mario Draghi por la Comisión Europea, que apuesta por el sustancial aumento de los presupuestos de Defensa en los países comunitarios y en la UE. Pero ese pronunciamiento pretende estigmatizar a los que sostienen (sostenemos) la necesidad de abordar un debate en profundidad sobre la Europa realmente existente, sobre las políticas aplicadas y las consecuencias de las mismas. Porque lo cierto es que el denominado proyecto europeo ha sido capturado —es una característica estructural del mismo— por las elites económicas y políticas, ha propiciado un continuo aumento o ha mantenido en niveles inaceptablemente elevados la desigualdad social y territorial y ha renunciado de facto a la implementación de políticas destinadas a enfrentar el cambio climático, el imparable deterioro de los ecosistemas y la transición hacia patrones energéticos sostenibles.
No quiero cerrar estas reflexiones, centradas en el papel del gasto militar, sin hacer referencia al genocidio que está llevando a cabo el ejercito y el gobierno de Israel. Decenas de miles de asesinatos cometidos impunemente, con el apoyo explícito o el silencio cómplice o el rechazo protocolario de las instituciones y los gobiernos comunitarios. Una oportunidad dolorosamente perdida por Europa y los países europeos para levantar una voz y tomar medidas eficaces y contundentes contra los genocidas y en defensa de los derechos del pueblo palestino y, de este modo, reivindicarse como un actor global y relevante en defensa de la paz y en contra de la guerra.
Sánchez habló con Zelenski y le prometió al ultraderechista el apoyo total del gobierno (PSOE+Sumar)
Recuerden a Don Pedro cuando salga a pedir votos progres para parar a la derecha…
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantuvo este miércoles una conversación telefónica con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, para reiterarle el apoyo de España «frente a la agresión rusa».
«Nuestro compromiso con Ucrania sigue firme e intacto, como demuestra el acuerdo bilateral de seguridad que firmamos en mayo», aseguró Sánchez.
«La unidad europea ha sido clave para hacer frente a la guerra de Putin. España seguirá trabajando para afianzarla», zanjó.
Este miércoles los países de la Unión Europea (UE) han llegado a un acuerdo político para imponer más sanciones a Rusia, en lo que supone ya el decimoquinto paquete de medidas restrictivas contra Moscú, sin conseguir menoscabar la economía rusa.
Mientras tanto, la desprotección a lxs más débiles, los deshaucios, la precariedad y desmantelamiento de lo público, sigue su curso ascendente.
¿capitalismo?: ni en sueños.
NO PODREMOS DECIR QUE NOS HAN ENGAÑADO: RECORTAR EL GASTO PUBLICO PARA MANTENER EL MODELO DE BIENESTAR. HA OMITIDO ACLARAR QUE EL MODELO DE BIENESTAR DE LOS RICOS.
Cristine Lagarde, presidenta del BCE, manifiesta que sin un cambio significativo en las políticas económicas, Europa no podrá mantener su modelo de bienestar ni abordar las leyes del cambio climático NI LA INVERSIÓN EN DEFENSA PARA PODER APOYAR A UCRANIA. Hay que aplicar políticas fiscales más estrictas, como recortar el gasto público ha manifestado.
https://insurgente.org/lucas-brett-el-bce-advierte-que-europa-no-puede-mantener-el-estado-del-bienestar-sin-cambios-profundos-en-la-economi
Esta misma individua, de 70 años, nos pedía hace un par de años a lxs mayores que nos diéramos prisa en morir pues el sistema no nos podía mantener.
Esta individua, como la von der Leyen, además de corruptas son seres nefastos que trabajan para el capital.
Fue directora del FMI y acusada de corrupción y abuso de autoridad, pero como buena sirvienta del capital le dieron a continuación la presidencia del BCE.
EE.UU. continúa echando gasolina al fuego: enviará minas antipersonas a Ucrania
Zelenski había solicitado estas armas y su jefe, el inquilino de la Casa Blanca, le ha concedido su demanda.
Esto es lo que tiene para España pertenecer a la Europa del capital y al «eje del bien» en lugar de optar por los valores e ideales del socialismo: Nuestros impuestos para matar inocentes y para financiar las guerras del capital:
El gobierno español (PSOE+Sumar) firma un Comunicado contra Rusia
En el Comunicado, obviamente, no se menciona el papel terrorista de la OTAN, el fascismo del ejecutivo de Zelenski….Por cierto, ¿sobre Israel algo qué decir?….
… «hoy consideramos imperativo:
– reafirmar el papel duradero de una OTAN fuerte y unida como piedra angular de la defensa y la seguridad europeas, que se fundamente en un fuerte vínculo transatlántico y en un compromiso férreo de defensa mutua, así como en un reparto equitativo de las cargas;
– reforzar la OTAN incrementando nuestro gasto en seguridad y defensa, en línea con nuestros compromisos anteriores. Además, reafirmamos que, en muchos casos, será necesario un gasto superior al 2 % del PIB para hacer frente a las crecientes amenazas a la seguridad y cumplir los objetivos de prevención y defensa en todos los ámbitos del área euroatlántica.
– reforzar la seguridad y la defensa de Europa, utilizando todas las herramientas a nuestro alcance, incluido el poder económico y financiero de la Unión Europea y reforzando la base industrial de Europa. Para ello, desarrollaremos el trabajo en la OTAN, la Unión Europea, entre grupos de aliados y con países afines, debatiremos sobre financiación innovadora y eliminaremos los obstáculos al comercio y la inversión en defensa.
…intensificar aún más nuestro apoyo militar, económico y financiero a Ucrania, al tiempo que acogemos con satisfacción el préstamo de 50 000 millones de dólares del G7 para garantizar que Ucrania disponga de recursos suficientes para el próximo año…
… Consideramos que estamos además ante una oportunidad única para reforzar los pilares de nuestras relaciones transatlánticas con los Estados Unidos de América, reforzando la OTAN y garantizando un reparto equitativo de las cargas dentro de la Alianza….
https://insurgente.org/el-gobierno-espanol-psoesumar-firma-un-comunicado-contra-rusia/
A propósito de Europa, Ucrania y el gasto militar.
Circula en las redes una conmovedora carta de los izquierdistas y socialistas ucranianos dirigida a Pedro Sánchez y a la Internacional Socialista. Entre otros medios , ha salido publicada en LoQueSomos, El Viejo Topo, Diario Red, Rafael Poch de Feliu…
Yo puse parte de ella como comentario en este artículo y en el artículo de Óscar F. Civieta «Defensa ha adjudicado contratos a empresas de armas de Israel…y no ha salido publicado.
A qué es debido?
Pues claro aumentar el gasto militar , arrasando con los gastos sociales, terminando de desmantelar lo publico , para que ?
Para enviar armas, tanques, y demás máquinas de matar obreros , que se veran reducido a cenizas en 3 días por la maquina bélica rusa.
Pues venga vamos al suicidio colectivo capitalista de meternos de pleno en una guerra perdida.
Después que será? La vuelta a la mili para mandar a nuestros hijos al frente , a defender la grandeza del capitalismo imperialista ??
Pronto lo sabremos , pero malos tiempos vienen con el anaranjado , la fuhrer vender lyen y demás parásitos políticos.
Salud y anarkia