Política
Sumar pregunta al Gobierno sobre la definición de antisemitismo y las acusaciones de Israel contra la solidaridad con Palestina
España acata la definición de antisemitismo propuesta por la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA), bajo la cual se incluyen las críticas a Israel o al sionismo.
El grupo parlamentario Sumar ha presentado una serie de preguntas en el Congreso de los Diputados sobre la definición de antisemitismo que usa el Gobierno y sobre las acusaciones de funcionarios israelíes contra la vicepresidenta Yolanda Díaz. Lo ha hecho después de que la embajadora israelí, Rodica Radian-Gordon, acusase a Díaz de llamar “a la eliminación de Israel, fomentando el odio y la violencia”, e instara al Gobierno a que “España cumpla el compromiso de luchar contra el antisemitismo”.
El texto, presentado por el diputado Enrique Santiago, recuerda las advertencias y posteriores críticas de varias organizaciones de derechos humanos a la definición de antisemitismo que adoptó el gobierno en 2021. Esta descripción, que fue impulsada por varias organizaciones proisraelíes bajo el manto de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA), incluye las críticas a Israel o al sionismo.
La embajadora israelí también hizo referencia al Plan Nacional Contra el Antisemitismo que elaboró el Gobierno español, en el que figura la definición de la IHRA. Sumar, por tanto, pregunta también si las palabras de Díaz y si las críticas a las políticas de Israel y la defensa pública de los derechos humanos son compatibles con este plan.
El alcance de la IHRA
La exvicepresidenta Carmen Calvo (PSOE), tras reunirse con la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) en 2020, anunció que el Gobierno acataba esta definición de antisemitismo. El grupo parlamentario de Más País ya advirtió entonces que los ejemplos que planteaba la IHRA para definir el antisemitismo «podrían entrar en colisión con el derecho a la libertad de expresión y opinión, en tanto estos derechos protegen la manifestación pública de opiniones políticas, incluidas las relativas al conflicto palestino-israelí».
Israel lleva esgrimiendo la acusación de antisemita contra toda muestra de solidaridad con Palestina y contra toda crítica a su acción militar en Gaza y en los territorios ocupados de Cisjordania. Ni siquiera las Naciones Unidas ni las ONG que trabajan sobre el terreno se han librado de estas acusaciones, que se combinan con otras como un supuesto apoyo a Hamás.
En España, tanto los funcionarios del Gobierno israelí como sus principales apoyos repiten sistemáticamente estas mismas consignas, sirviéndose precisamente de la definición de la IHRA y en la supuesta autoridad del llamado Observatorio Contra el Antisemitismo. Este organismo está impulsado por la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) y el Movimiento Contra la Intolerancia. Entre los incidentes antisemitas que recogen en su página web, incluyen varias pintadas contra Israel y a favor de Palestina, y un cartel con la frase “Desde el río hasta el mar, Palestina será libre”.
Este observatorio fue uno de los promotores de la carta enviada a varios medios de comunicación el pasado mes de mayo en la que alertaba sobre incidentes antisemitas en las acampadas por Palestina. Tras ser preguntado por lamarea.com sobre los mismos, Esteban Ibarra, fundador del Movimiento Contra la Intolerancia, otra de las organizaciones promotoras de la carta, no aportó ningún dato. Tampoco demostró la existencia de más de una veintena de organizaciones que firmaban el manifiesto y de las que no había rastro ni en los registros ni en internet.
La embajadora sionista acusa a Yolanda Díaz de fomentar el odio y la violencia.
Cinismo más grande, perfidia más grande, sólo comparable con la historia que se inventaron, y que por desgracia sigue vigente, los golpistas fascistas del 36 de la guerra de España, dictadura y hasta hoy mismo…
Intolerancia? No son infinitamente peores los genocidas que los intolerantes?
Son ellos los que matan y se quejan como si fueran las víctimas.
Indigeribles. Lo más lejos posible de la humanidad. Confinados en una isla remota. Y tanta gente honesta, comparada con ellos, que se pudre en las cárceles.