Política
Defensa quiere robots autónomos: financiará con 785.000 euros proyectos de enjambres de drones para misiones militares
El Ministerio ha publicado una resolución para seleccionar proyectos de enjambres de drones con un “alto grado de automatización” y “comportamiento inteligente”. Se requiere también que sean capaces de realizar una redistribución de tareas de manera autónoma y de seguir operando en caso de pérdida de las comunicaciones.
Los “conflictos actuales”. Es la ‘coletilla’ con la que se justifica cada paso de la escalada bélica en la que están inmersos los países de la OTAN. Desde alcanzar el 2% del PIB en gasto militar, hasta avanzar hacia una nueva tipología de guerra. Una en la que los humanos son sustituidos por enjambres de drones.
El pasado 13 de mayo, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó una Resolución de la Dirección General de Armamento y Material (dependiente del Ministerio de Defensa). En ella, entre otros, se buscan proyectos de “múltiples vehículos no tripulados (UXV) trabajando de forma colaborativa, como un único sistema, en base a una inteligencia colectiva de cara a la consecución de una misión común”, como se apunta en el propio texto.
El objetivo final, concretan, “es aprovechar los últimos avances tecnológicos realizados en el ámbito de la robótica y de la inteligencia artificial para desarrollar enjambres de vehículos aéreos no tripulados (RPAS) capaces de ejecutar misiones militares específicas (por ejemplo: patrulla y vigilancia, exploración y reconocimiento, búsqueda y rescate, apoyo logístico, defensa NRBQ…)”.
Las propuestas elegidas contarán, cada una, con una aportación por parte de Defensa de 785.129,96 euros.
Un alto grado de automatización y comportamiento inteligente
Afirman en la Resolución que hay “una constante y progresiva introducción de sistemas no tripulados en los escenarios donde operan las Fuerzas Armadas (FAS)”. Y que “los conflictos actuales demuestran la importancia creciente de estos sistemas en las operaciones militares, en donde se está haciendo un uso intensivo de los mismos en diferentes dominios (aire, mar y tierra) y para diferentes propósitos”.
Quizá por encontrar esa ansiada versatilidad de los robots, en la convocatoria elaborada por el Ministerio de Margarita Robles se hace especial hincapié en el alto grado de autonomía que deben tener los enjambres de drones. Se especifica que es necesario, por un lado, “un alto grado de automatización de cada uno de los RPAS”, y, por otro, “un comportamiento inteligente en el funcionamiento conjunto y colaborativo”.
Explican también que “el sistema deberá poder realizar una redistribución de tareas de manera autónoma y eficiente ante eventualidades (pérdida de aeronaves, presencia de obstáculos, fallos en comunicaciones o señal GNSS), así como tomar nuevos cursos de acción, para poder seguir desarrollando la misión”.
Para todas estas funcionalidades, continúan, “se valorará el uso de técnicas de inteligencia artificial que permitan tomar automáticamente decisiones de alto nivel (…) ante eventos imprevistos y/o variables no definidas en la planificación inicial”.
Se pide que “el operador deberá poder configurar la misión desde el puesto de mando y control en modo offline, lanzarla y monitorizarla”. Sin embargo, también “se requerirá que el sistema pueda seguir operando en caso de pérdida de las comunicaciones entre las plataformas y el operador, así como entre las plataformas entre sí”.
El Programa COINCIDENTE
Esta convocatoria se enmarca dentro del programa de Cooperación en Investigación Científica y Desarrollo en Tecnologías Estratégicas (Programa COINCIDENTE). Se puso en marcha en 1985, con el propósito principal de “»aprovechar las tecnologías de carácter? civil desarrolladas en el ámbito del Plan Nacional de I+D para incorporar soluciones tecnológicas innovadoras de interés para el Ministerio de Defensa, fomentando así el tejido industrial, científico y tecnológico dedicado a la defensa”, apuntan desde el propio Ministerio.
Los proyectos, cofinanciados por Defensa con un grado de participación entre el 20% y el 80%, “deben ser tendentes al desarrollo de un demostrador con funcionalidad militar y deben suponer una novedad tecnológica significativa”.
En la convocatoria de 2024, además de los enjambres de drones, se seleccionarán proyectos que apliquen “la inteligencia artificial generativa a misiones militares” y “tecnologías de propulsión química aplicada a defensa”.
Un año antes, lo que se solicitó fue el “desarrollo de baterías estructurales para su aplicación en plataformas militares” –con una aportación del Ministerio de 750.000 euros–; la “generación de datos sintéticos para el entrenamiento de algoritmos de IA en aplicaciones de defensa” –750.000 euros–, y “sistemas de neutralización para aplicaciones de defensa antiaérea de muy baja cota” –950.000 euros–.
EL PUEBLO NO QUEREMOS MILITARIZACION, QUE SE DEVOREN LOS TIBURONES ENTRE SI, EL PUEBLO QUEREMOS UNA BUENA SANIDAD Y ESCUELAS, IES Y UNIVERSIDADES PUBLICAS LAICAS Y SIN QUE SE MERCANTILICE LA ENSEÑANZA. Son nuestros impuestos y tenemos derecho a decidir en que es necesario que se destinen.
La situación del Sistema Sanitario Público en España es preocupante, tras los recortes de recursos en las sucesivas crisis para reducir gasto público, la pandemia COVID. El Sistema se enfrenta ahora a una ofensiva del sector privado por penetrar en el mismo, proceso liderado por multinacionales (Freshenius- Quirón, Ribera Salud-Centene), grupos hospitalarios (HM hospitales) aseguradoras sanitarias (Asisa, Sanitas, Axxa…), laboratorios farmacéuticos, muchos de ellos controlados por la banca y fondos de inversión, empresas
informáticas interesadas en el control de la información sanitaria de la población (Indra,IBM..).
La llegada del PP y VOX a los gobiernos de Andalucía, Valencia, La Rioja, Cantabria…) y el mantenimiento del poder en Madrid o Galicia, ha desatado un aumento de la ofensiva privatizadora que ha cerrado de Centros de Salud y Servicios de Urgencias, aumentado de los conciertos, paralización de los procesos de recuperación de concesiones hospitalarias, cedido a de la asistencia en áreas sanitarias a centros privados, construido de hospitales
fantasma (Cendal en Madrid), intensificado la Colaboración Público Privada para construir y gestionar centros sanitarios, externalizado servicios, o investigar en hospitales públicos,lo que supone un acelerón en el proceso de privatización y desmantelamiento del sistema sanitario público de los últimos años sin apenas respuesta de los últimos Ministerios de Sanidad sumidos en la inacción.
Con la llegada al Ministerio de Sanidad de una profesional comprometida con las luchas por la sanidad pública se ha abierto una puerta a la esperanza de un cambio en la política ministerial. Aunque la situación es difícil y compleja, el Ministerio sigue sin abordar los problemas del SNS ni adoptar medidas urgentes para afrontar la gravedad de la situación.
Mientras la derecha en el poder acelera el desmantelamiento y privatización del sistema sanitario público el Ministerio de Sanidad en manos progresistas parece estar sumido en una política tímida y medrosa, incapaz de frenar la destrucción del sistema.
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La humanidad de una persona se nota en el cargo que ocupa. Ya es bastante inhumano el ministerio de la guerra (más propio llamarlo de la guerra que de la defensa) para ponerlo en manos de esta mujer, embustera y cruel.
Lo opuesto a la humanidad y empatía de Carme Chacón.
Eso es lo que quiere Defensa, más propio llamarlo Ministerio de Agresión o sucursal de la OTAN.
Pero los recursos salen del bolsillo del ciudadano y tenemos derecho a decidir a donde queremos que se destinen.
Por lo visto el pueblo está muy ocupado en temas de máyor importancia y ha dado carta blanca al gobierno para que disponga de nuestro dinero como el amo Yankee le ordene.
Mientras tanto la sanidad pública y la educación se precarizan, en las calles hay gente del estado español pidiendo, parece ser que ni siquiera cobran la paga mínima; pero ya digo el pueblo sin duda está ocupado en temas mucho más importantes que estas insignificancias.
Margarita Robles: El PP dice, y con razón, que es de los suyos. Aguirre, Ayuso y hasta la Tahtcher estarían encantadas de tenerla a sus órdenes. Que gran trabajo hubiera hecho con Aznar en la invasión de Irak!!!
Hubiera preferido que le ministerio de defensa en lugar de trabajar para perfeccionar los métodos “de ofensa” hubiera dedicado estos dineros a estudiar programas (informáticos) de mejora y optimización de las labores de “desminado” de los miles (millones, tal vez) de kilómetros cuadrados de territorio “estéril (y asesino) que existen, a veces desde hace más de medio siglo, en muchos países (generalmente pobres).
Y mucho más me alegraría, que los contratos de nuestra industria bélica fueran para fabricar Bulldozer y demás “aparamenta” destinada a ese fin, para ponerla a disposición de la ONU para realizar esa labor en los sitios que se considere más necesario.