Política
“Guarras”, “putas”, “rojas de mierda”: el relato de dos jóvenes que fueron “rodeadas” en una de las protestas de Madrid
"Que fuésemos dos mujeres y que estuviésemos en una calle transitada y con gente alrededor hizo que al final la violencia sólo fuese verbal", denuncian.
M.T. y M.G. iban en moto a comprar a una tienda en Gran Vía, en Madrid. Fue el martes, 7 de noviembre, sobre las ocho de la tarde. Se dirigían desde la calle de Alcalá hacia Atocha. En sentido contrario, una gran masa de personas ocupaba la calle, la principal de la capital, lo que provocó que el tráfico se ralentizase. Una de ellas cuenta que pensó que quizá hubiese un partido de fútbol. «Lo que nos extrañaba es que no hubiese policía por ningún lado», explica M.T.
Sin planearlo, se vieron en mitad de la marcha que se había desgajado de la concentración frente a la sede de PSOE, en Ferraz, y que, de manera ilegal, había decidido ocupar la Gran Vía en dirección al Congreso de los Diputados. Ambas relatan un desfile de banderas franquistas y carlistas, cánticos y gritos homófobos y saludos fascistas. «Iban alentando a todo el mundo a que se uniesen y miraban con un odio que daba miedo. Llegamos a escuchar un ‘¿qué miras, guarra?'», explica M.G.
Fue entonces cuando su compañera, quien conducía la moto, en ese momento parada, decidió dirigirse a uno de ellos: «Simplemente le dije que guardase la bandera, que era anticonstitucional». Asegura que lo hizo fruto de la rabia ante la impunidad de ver cómo se paseaban con ese tipo de símbolos por uno de los lugares más importantes de la ciudad. «No lo pensé demasiado, simplemente vi cómo levantaba el brazo para hacer el saludo fascista y me salió», añade.
En ese momento, según denuncian ambas jóvenes, unos 8 o 9 individuos, todos hombres, empezaron a rodearlas e increparlas mientras ellas seguían subidas a la moto: «Empezaron a gritarnos ‘guarras’, ‘putas’, ‘rojas de mierda’, a decir que nos fuésemos a casa a limpiar…», relata M.T. Sentada detrás, M.G. asegura que uno de ellos se pegó a su cara mientras la insultaba: «Te juro que nunca había visto a nadie mirarme con tanto odio».
En conversación telefónica con este medio, las dos creen que el contexto provocó que la situación no fuese más grave: «Que fuésemos dos mujeres y que estuviésemos en una calle transitada y con gente alrededor hizo que al final la violencia sólo fuese verbal, pero no sé que habría pasado en otro lugar», relata una de ellas.
A tres metros de la escena se encontraba el periodista de la Cadena SER Miguel Ángel Campos, quien pidió en Twitter dejar a un lado «la tibieza» al hablar de estas manifestaciones: «Son protagonizadas por los nazis de Democracia Nacional, que ante mí en G Vía han agredido a dos chicas». Posteriormente, en antena, relató lo sucedido, asegurando que los radicales «no eran una minoría» en esa marcha: «Daba miedo porque no se trataba de personas normales. Era gente perfectamente organizada, estética nazi, todos vestidos de negro, gritos y miradas amenazantes a la gente que estaba alrededor…».
Las dos jóvenes aseguran que no han denunciado los hechos porque sería muy difícil identificar a las personas que se abalanzaron sobre ellas y porque creen que las agresiones verbales sólo tienen recorrido judicial si son reiteradas.
Lo sucedido con M.T. y M.G. se suma a las diferentes agresiones denunciadas desde que comenzaron las protestas contra la amnistía frente a la sede federal del PSOE. Periodistas de La Sexta, CNN y Antena 3 han sufrido acoso y han sido atacados mientras realizaban su trabajo, y la violencia verbal contra los informadores se ha convertido en una constante durante las concentraciones, con acusaciones de manipulación y mentira.
El culmen de la violencia se alcanzó el martes 7 de noviembre, cuando un grupo numeroso de radicales de extrema derecha intentaron cruzar el cordón policial para acceder a la calle de Ferraz. Fue en ese momento cuando comenzaron a lanzar objetos contra los antidisturbios y la prensa que se encontraba al otro lado de las vallas, por lo que la Unidad de Intervención de la Policía cargó contra ellos, lo que desató una batalla campal en las inmediaciones de la sede socialista. Eso provocó que 39 personas, 29 de ellos miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, resultasen heridas. Entonces hubo seis detenidos.
Los disturbios fueron provocados por algunas de las organizaciones sociales y partidos políticos más conocidos y violentos de la ultraderecha en España, como Democracia Nacional, España 2000, Bastión Frontal o Hacer Nación, entre otros.
«En España, de 10 cabezas, nueve embisten y una piensa».
» Tu verdad no, la Verdad; y ven conmigo a buscarla. La tuya guárdatela».
Cuanta sabiduría y honestidad tenía, Antonio Machado, poeta y maestro.
A más ver, a más saber, más sufrimiento. Cuanto debió sufrir D. Antonio y que final más triste. ¡Qué dichosos los necios!
Algunas personas dicen que mejor que descanse en Colliure, dónde sus restos son honrados tanto por la población, como por españoles que le admiran y le quieren y se acercan al cementerio a rendirle homenaje Aquí cabría la posibilidad de que sus restos fueran profanados.
¡Que visca Catalunya!, impensable que casos como éste que se dan en la capital del reino Borbónico y Ayusino se dieran en Catalunya.
Que odio,se tramspira odio por todos lados….. lenguaje (Belén Esteban), chabacano ruin machista,de zonas deprimidas económicamente (de guetos de vivienda de los 25años de paz, habitáculos de 60metros cuadrados con una amplia familia numerosa.apartir de cinco hijos, hasta no hace mucho), con aulas con 50,o más alumnos, una sola fuente de ingresos siempre el macho de la casa,sin ayudas sociales.., pero a cincuenta años casi de la muerte del dictador es la sensación que tengo cuando leo este artículo.
Blanqueamiento de la dictadura en el lenguaje de los medios de comunicación,llamar PRECONSTITUCIONAL a la bandera del pollo (@guila), los partidarios de la bandera del pollo (@guila)de alzaron contra la democracia con un golpe de estado al fracasar el golpe de estado, preparo la guerra contra la democracia.BASTA YA de blanqueamiento de la dictadura y llamemos a las cosas por su nombre.la bandera con el águila no es PRECONSTITUCIONAL es la de la DICTADURA.Sr dio un golpe de estado para acabar con la democracia cuando ganaron los fascistas (los de la bandera del pollo (águila)se instala una dictadura militar que dura cuarenta años (40). hubo una DICTADURA de cuarenta años,no cuarentena años de PREDEMOCRACIA.
Ahora a sorprendernos de que el fascismo egpaño campa libremente en el penoso y agonizante reino de Borbonia después de convivir , participar y guardar silencio absoluto con esta amenaza más que latente , ¿ verdad señores/as pseudo socialistas de P$(—)€ ? .
Salud.