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No perdáis la fe en el Derecho
Antonio Manuel, profesor de Derecho Civil, prepara una clase con un caso práctico sobre un conflicto privado sobre un inmueble: "Les pedí que sustituyeran la familia Almazán por el pueblo palestino y la familia Benavides por el Estado de Israel. Se quedaron perplejos. Mudos".
Debo confesar que me siento desolado e impotente. Como jurista y como ser humano. Enfermo de este cansancio que provoca saberme inútil y fracasado. Decía Albert Camus que “si el hombre fracasa en conciliar la justicia y la libertad, fracasa en todo”. Suelo decir a mis hijos que jamás respondan a un mal con otro mal, porque entonces se cometerían dos males. Contemplo desde la distancia la epifanía del fracaso absoluto del ser humano.Misiles por doquier para responder a las bombas, muerte por doquier para responder a la muerte, siempre injusta, aprovechando que las víctimas carecen de esa brizna de libertad que les hubiera salvado la vida. Y mientras este rotundo fracaso de la humanidad es retransmitido en directo para que la humanidad se abochorne de lo que somos, los más altos dirigentes internacionales se muerden la lengua para no condenar este genocidio, o se retratan sin pudor con quien lo perpetra, redoblando el fracaso. Fue entonces cuando escribí este mensaje: “¿Cómo explico a mis estudiantes que el Derecho, que debería ser la garantía de los débiles, sigue siendo papel mojado para los poderosos?”.
Olivia, periodista y amiga, me pidió que escribiera la experiencia y acepté el reto. La clase ha sido este jueves por la mañana. De manera sorpresiva, les puse un caso práctico. Soy profesor de Derecho Civil y muy escrupuloso con lo que digo en el aula para que nadie pueda reprocharme que la ideología se coló por las rendijas de mi boca. Así que lo redacté como si fuera un conflicto privado sobre la tenencia de un inmueble, consciente de que era un ejemplo burdo, sin matices:
La familia Almazán y la familia Benavides
“La familia Almazán vive en un piso con cocina, baño, trastero y cinco habitaciones. La comunidad, reunida en Junta de propietarios, acuerda ceder dos habitaciones en calidad de propietaria a la familia Benavides que las había ocupado, argumentando que sus bisabuelos fueron injustamente desahuciados del piso hace un siglo. La familia Almazán no acepta la decisión y así lo hace constar en el acta.
La familia Benavides, nada más conocer el acuerdo de la Junta de propietarios, ocupa el resto de habitaciones, dejando a la familia Almazán confinada en el trastero. El hecho es condenado por la comunidad reunida en asamblea, con el voto en contra del dueño con más patrimonio y el piso más grande, sin ninguna consecuencia para la familia ocupante. La convivencia se hace imposible, debido a que la familia Benavides cambia las llaves del piso, limita el acceso a las zonas comunes, y amenaza con ocupar también el trastero.
La familia Almazán, harta del continuo hostigamiento, provoca unos daños considerables en una de las habitaciones ocupadas por la familia Benavides que, como respuesta, corta la luz en el trastero y cierra las puertas del baño y de la cocina. La situación deviene insostenible para la familia Almazán. Los hechos vuelven a ser condenadospor la comunidad, de nuevo con el veto del propietario más poderoso, sin ninguna consecuencia para la familia Benavides”.
Les pedí que reflexionaran cada uno por su cuenta durante unos minutos. Luego que compartieran sus opiniones formando parejas, unas para defender a la familia Almazán y otras a la familia Benavides. A continuación les pregunté: “Si este asunto se llevase a juicio, ¿cuál de las dos ganaría?«. La mayoría de la clase levantó la mano en favor de la familia Almazán. Unos pocos se mantuvieron con los brazos cruzados. Ninguno apostó por la familia Benavides. A continuación, escribí en la pizarra el nombre de ambas familias separadas por una línea vertical, y les pedí argumentos jurídicos a favor de una uotra. Jurídicos, enfaticé. El análisis fue revelador.
Dejaron claro desde el comienzo que, en el peor de los casos, la familia Almazán era poseedora del piso y que como tal era merecedora de protección jurídica. En ningún caso podría justificarse la ocupación de lo que ya se habita, no importa el título. Dedujeron que el piso tendría que ser propiedad de la comunidad porque fue ella la que cedió las habitaciones a la familia Benavides. A partir de ahí, la columna de la pizarra correspondiente a la familia Almazán comenzó a llenarse de argumentos a favor, siendo el más contundente la reiteración en el incumplimiento por la familia Benavides de lo acordado por la comunidad. Por supuesto, no entendían suimpunidad sólo porque el vecino más adinerado estuviera de su parte. Y admitieron que el daño merece ser reparado en todo caso porque no existe norma alguna que ampare el derecho a dañar, no importa quién lo sufra.
Llegados a ese punto, les pedí que sustituyeran la familia Almazán por el pueblo palestino y la familia Benavides por el Estado de Israel. Se quedaron perplejos. Mudos. De nuevo les advertí que el caso era simplista, que no mantuvieran alegatos ideológicos, y que dejaran a un lado sus prejuicios. El nudo del debate no consistía en otorgar la razón absoluta a cualquiera de las partes, sino en verse a sí mismos defendiendo sus posturas con arreglo a Derecho. Y es ahí donde estallaron las costuras de quienes sólo creemos en un fundamentalismo: la democracia.
Les costaba encontrar argumentos jurídicos que respaldaran las ocupaciones y los incumplimientos de las convenciones y acuerdos internacionales. Les costaba encontrar argumentos jurídicos que justificasen el genocidio de millones de personas, por más que se invocara el derecho a la defensa. Como juristas y como demócratas, se sintieron desolados, impotentes, fracasados. Y eso es intolerable en una clase de Derecho. Yo sólo aspiraba a enseñarles una lección esa mañana: no perdáis la fe en el Derecho. Vuestra profesión consiste en hacer justicia y vuestra herramienta es la ley. No permitáis jamás la derrota del Derecho.
Aunque os hagan creer que las normas no sirven para nada, ondearlas como una bandera pacífica frente a los que pretendan hacer justicia con la espada. Quizá perdamos mil batallas, pero no podemos perder la guerra de la barbarie. Un Estado de Derecho no responde a la violencia con la violencia. Un Estado de Derecho no puede condenar a muerte aunque sus ciudadanos maten, porque en su Constitución se protege la vida y no puede atentar contra ella. Un Estado de Derecho responde a la bestialidad con la razón de sus leyes. Y a vosotros y vosotras os corresponde cargarlas de corazón. Por lo que más queráis, sed justos. Por lo que más queráis, defended el Derecho porque es la única garantía de los débiles. Por favor, no perdáis la fe en el Derecho.
Cuando terminó la clase, se me acercó un alumno al que había tocado defender a la familia Benavides. Lo hizo con brillantez y sinceridad. Me dijo: “Me manda saludos para ti una amiga que fue alumna tuya y que no te olvida. Hay clases que te cambian la vida”. Le di las gracias, me limpié el polvo de la tiza en los pantalones y me fui sin sentirme desolado, impotente ni fracasado, gracias a mis estudiantes, hechos de la aleación más hermosa que conozco, de rigor y esperanza, de juventud y utopía. Hasta que vuelva a ver las noticias.
El 7 de octubre Israel dio comienzo a la operación venganza tras los ataques de Hamas que provocaron 1.400 muertos, la mayoría civiles. Frente a las dudas expresadas por el propio Joe Biden sobre el número de víctimas en Gaza, las autoridades de la Franja han publicado la lista de los 7.000 fallecidos, con nombres y apellidos. De ellos, más de 3.000 son niños y niñas.
La idea machacada por la propaganda israelí y los grandes medios españoles de que se trata de una operación militar para acabar con Hamas contrasta con la frecuencia con la que un niño palestino es asesinado por la bombas del ejército de ocupación. Cada 10 minutos Israel mata a un menor en la Franja, lo que tarda en cocerse un huevo, el tiempo que necesita una cafetera italiana.
(El Salto)
MHUEL – CHARLA COLOQUIO INMATRICULACIONES 31/03/2017
Antonio Manuel Rodríguez es una persona versada en el Renacimiento, habla y escribe varios idiomas entre ellos el árabe, profesor, jurista, músico, intérprete de varios instrumentos, compositor, escritor, poeta…
Generoso acompañante de causas justas con una bondad y coherencia interna entre su palabra y su sentimiento que hace creer y crecer como personas.
Fue un privilegio conocerlo.
https://mhuel.org/?p=4613
Pues si hace falta fe es que no hay pruebas física y reales.
Poco útil es entonces si es un espejismo que sólo sirve para que el malvado tenga una escusa y sus fechorías se perpetúen.
Gracias por vuestros comentarios.
Ojalá hubiera más profesores como tú en el mundo y que se os dé la oportunidad de ser escuchados por la población mundial.
En cualquier Estado de Derecho, deben existir leyes, pero que se vean apoyadas por la ética y la moral ( palabras que harán desaparecer dentro de poco, para seguir imperando » la ley de la selva «). Si las leyes, se hacen para que se puedan realizar distintas interpretaciones a gusto de un juez o estado, que no va a ser objetivo, para que queremos leyes? «Que gane el más fuerte «.
La ley nace para que sea posible la convivencia en armonía, para defender a las víctimas, de los que ejercen la violencia contra ellos, ya sea física, moral o financiera, u de otro cualquier tipo.
No nos debería costar , como sociedad, saber distinguir entre lo bueno y correcto y lo que está mal y es un abuso de poder. Pero por desgracia, cada vez se manipula más la verdad, los hechos y los actos que comete cada quien, están ahí y eso no se debe cambiar ni interpretar. Se exponen , continuamente, frases machacadas que a fuerza de ser repetidas como mantras,la gente se las cree, porque así es más fácil seguir con su mísera vida, que hacer el esfuerzo de posicionarse y pelear por lo que es más justo.
En este mundo de opinologos, hay que opinar siempre, pero con la verdad y objetividad, y el cerebro. Ya sabemos que opinar » con las tripas » y las emociones, solo lleva a conflictos .
Que se imponga de una vez, la inteligencia, el pensamiento racional y no las doctrinas, porque sino, volveremos a las cavernas .
Pero eso solo se consigue con educación y con gente como tú , entregado a que la población sepa distinguir ,lo que es ser decente, solidario, con una conducta que no anule la ética y moral, que debería regir en el mundo. Que aprenda a aplicar la ley del lado correcto y la justicia.Y no este nuevo orden mundial, fascista y que regresa a la época medieval, donde ya no somos ciudadanos, sino siervos de los poderosos que se creen siempre en posesión de la verdad por sus intereses particulares. Y que si no tragas con » ruedas de molino», eres el revolucionario a combatir. O en el apestado, al que debes sacar de la vida pública, con conductas reprochables , como el acoso , la mentiras o creando denuncias con noticias falsas , apoyados por una judicatura que solo, defiende al que tiene poder.
Precisamente las leyes se crearon, para limitar, el abuso de poder.
Diréis que soy como un mosquetero, pero no nos damos cuenta, que el poder le tenemos nosotros, porque simplemente, somos muchísimos más que ellos. Y que debemos posicionarnos más en defender más la ley y el derecho a vivir dignamente, porque el mundo es de todos, aunque lo manejen unos cuantos, ayudados por los poderes fácticos.
Espero que os dejen seguir ejerciendo y k no os releguen al ostracismo .
Y espero que la gente abra los ojos y se ponga a defender lo más justo y al débil, porque en cualquier momento, ese alguien a quien no conoces y sobre el que se están cometiendo todo tipo de tropelías, puedes ser tú.
OIHANA CASI QUE LA HA PERDIDO.
Oihana Goiriena, compañera de PABLO GONZALEZ: “Al contrario de lo que dicen los ministros Rau y Albares, el derecho a la defensa de Pablo González no está siendo garantizado para nada”. “La dejación del Gobierno español es absoluta, no ocurre igual en otros casos”
Pablo González cumple 600 días en prisión, sin que haya acusación formal por parte de la Fiscalía polaca, que se basa para mantenerle privado de libertad en una simple y dolorosa frase: “seguimos investigando”. Oihana Goiriena, esposa del periodista vasco Pablo González, habla con Sare Antifaxista y reconoce que “no tenemos novedad”. “Sigue igual”: encerrado, sin acusación formal de la que pueda defenderse y sin la ayuda del Gobierno español que, sin embargo, se ha posicionado con quienes le encerraron, como lo hizo el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares . Y lamenta el silencio de la gran mayoría de los medios de comunicación que, sin embargo, sí se preocupan -y mucho- de otros casos de prisión.
Él, a los abogados, les puede llamar, y más o menos me actualizan lo que hay. Él sólo tiene contacto telefónico con los abogados. Ellos no dicen nada, están a la espera, porque el fiscal tampoco les dice nada. Cuando llega la vista de valoración de la prórroga suelen ir casi casi a ciegas porque el fiscal no les facilita ninguna información. Hasta que no llega el día de la vista ellos no saben que va a plantear la fiscalía. Entonces, actúan después, presentan recurso. Hasta el momento de la vista no tienen información.
Lo que estamos pidiendo son los derechos fundamentales. No estamos pidiendo nada más, pero viendo también la actitud del Gobierno español que no les presiona nada, absolutamente nada, el gobierno polaco no se ve obligado a cambiar de actitud.
No he tenido contacto con el gobierno español, de hecho, ni siquiera con el cónsul desde hace bastante tiempo.Creo que en otros casos en los que hay presos en el extranjero es el Gobierno el que se pone en contacto con las familias, en este caso no ha sido así. La dejadez es total, por su parte.
El Parlamento europeo aprobó que pudiera esperar a juicio en una cárcel de aquí, que pueda hacer la prisión preventiva aquí. Es una recomendación. No es ni siquiera una orden. No hay nada que lo impida, pero tienen que dar el paso ellos, o sea los gobiernos polaco y español. Es una falta de voluntad lo que hay aquí. Porque si hubiera voluntad por parte de España para esperar aquí al juicio, se harían gestiones, pero no las hacen.
La comparación duele bastante, porque tanto con el que está en Tailandia, como el que está en Irán (Santiago Sánchez Cogedor), han activado el aparato diplomático al más alto nivel. Eso dicen, y con Pablo le han dado asistencia consular, y ya está. Contentos todos y agradecidos tenemos que estar, eso parece que nos dicen.
Estoy a la espera de la tercera visita. Ojalá que me den permiso. Después de la última del 16 de junio, segunda visita; nada más salir de la misma, le dije al abogado que pusiera en marcha la siguiente solicitud, y estamos a la espera. Vista la prisa que se dan, creo que todavía es pronto. La primera visita llegó al cabo de casi nueve meses, y la siguiente, otros siete más o menos… en esta llevamos cuatro…me toca esperar. Habrá que tomarse con un poco de humor porque, de lo contrario, nos hundimos todos en la depresión. Mis hijos mayor y mediano lo llevan por dentro, a penas dice nada. El pequeño lo típico: a ver cuando le toca a él la visita. Por qué no fueron ellos, cuándo vendrá, si estará en casa en navidades, para los cumpleaños. Tiene ocho años, mucho más no puede preguntar. Aunque con los nervios a flor de piel, te tienes que ir haciendo. No queda más remedio.
Nos decían que cuando llega el año la Fiscalía debe presentar formalmente pruebas de algo más de peso que justifiquen la prórroga de la prisión preventiva y se le ha seguido prorrogando sin esas pruebas de peso. Y no sé que se puede esperar. Seguiremos.
Hoy he leído que el cambio de gobierno en Polonia tardará unos meses. La siguiente vista es a mediados de noviembre, sobre la segunda quincena, si hasta ahora han tirado con el argumento de que ‘están investigando’, como argumento fundamental, y mientras tanto está en prisión preventiva, ese discurso, ese mismo argumento, les seguirá valiendo. Si les ha valido, no veo ningún indicio por el que no les vaya a valer. Los abogados actuan; pero la fiscalía argumenta que hay una investigación en curso, y el juez dice que vale. Y ya está.
https://sareantifaxista.blogspot.com/2023/05/oihana-goiriena-al-contrario-de-lo-que.html
Pocas batallas perderéis si no lucháis en ninguna. En Palestina os esperan con los brazos abiertos.
«Quizá perdamos mil batallas, pero no podemos perder la guerra de la barbarie».
Me quedo con esta preciosa frase. Me da fuerza y esperanza.
Tienes lxs estudiantes que mereces Antonio Manuel.
En tus charlas- conferencias sobre inmatriculaciones he visto que eres auténtico y transparente.
Un tesoro contar con personas así.
La comunidad académica de las universidades del Estado español lanza una declaración en apoyo al Pueblo palestino:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSdczsHBU0XyRKo0iqsh4MZdmnMLb3Zxv_r0JXVG_MiWKnlJZw/viewform?pli=1&pli=1
«Y de las inmatriculaciones, ¿qué?», Andrés Valentín. (Coordinadora Recuperando)
El Estado no ofrece una solución normativa y global al problema, tal como había prometido y, además, promoviendo 35.000 litigios ante los tribunales. Por otra parte, si hay bienes que no se reclaman, ¿se da por hecho que son de la Iglesia?
El «Derecho» ha desaparecido totalmente del mundo desde que aparecio ese sionista: Kelsen. Este, autoproclamado filosofo del derecho, con argumentos carentes de rigor y falsos, logro convencer a todo el mundo de que el Derecho no necesita, para nada, ni de la Etica, ni de la Moral. Y, por tanto, que las consideraciones etico- morales debian excluirse totalmente del razonamiento y de la praxis juridicas.
Segun Kelsen, lo unico que vale e
son las » Leyes» ; o sea, lo que decreta el gobernador de turno, aunque este fuera un psicopata criminal, como lo han sido: Hitler, Stalin, Franco y otros.
Hitler, y los comunistas, aplaudieron a las ideas de Kelsen. Asi, Hitler saco sus «leyes» anti judias e, ironicamente, uno de los primeros judios que la sufrieron fue el propio Kelsen, quien fue gaseado por los nazis, felices de aplicar las leyes de Hitler contra todos los » seres inferiores» de Europa y del mundo.