Política
Las fechas que maneja el PSOE para explicar los acuerdos e investir a Pedro Sánchez
Aunque quedan flecos importantes por cerrar, el PSOE confía en celebrar la investidura de Pedro Sánchez en la segunda o tercera semana de noviembre.
Aunque criticaron a Alberto Núñez Feijóo y calificaron su empeño de enfrentarse a la investidura como una “pérdida de tiempo”, en el PSOE aprovecharon muy bien ese lapso, que les permitió avanzar de manera discreta en las negociaciones con Junts y ERC para investir a Pedro Sánchez. Y sin necesidad de dar explicaciones, puesto que, como reiteraron, era el momento del PP y sobre ellos debía estar el foco.
Sólo los independentistas y el PP hablaron de acuerdos y líneas rojas durante esas semanas. Cada vez que se le cuestionaba a alguien del PSOE, demostraba tener la lección perfectamente aprendida: echaba balones fuera y lo emplazaba todo para un futuro en el que Feijóo no consiguiera ser investido y el rey propusiera a Pedro Sánchez como candidato. Mientras tanto, los encuentros seguían en un segundo plano y se iban dando pasos.
Llegado el señalamiento del líder socialista, y sin opción de ceder el protagonismo, comenzó la ronda pública de contactos, y, sobre todo, siguieron las reuniones privadas y con discreción (que son las que importan).
Manejar los tiempos
Esas negociaciones, señalan fuentes socialistas, van por el buen camino, y están yendo más allá de la investidura: los presupuestos de 2024 también están sobre la mesa.
Cautelosos, pero optimistas, esto es política, recuerdan, trabajan para cerrar los flecos que quedan abiertos y se esfuerzan en controlar los tiempos y el manido relato.
Si finalmente hay acuerdo y no se convocan nuevas elecciones, el objetivo es que la sesión de investidura de Sánchez se celebre en la segunda o tercera semana de noviembre. Antes, probablemente a finales de octubre o incluso principios de noviembre, expondrán cuáles son los principales acuerdos alcanzados para obtener los apoyos. No sólo los pactados con Junts y ERC, sino también con otras formaciones cuyas condiciones se han visto opacadas por las pretensiones de los independentistas catalanes.
Dentro de la entente estará la amnistía (o el sucedáneo lingüístico que elijan en su lugar), que precisará de un notable esfuerzo pedagógico.
En cuanto al referéndum, confían en el PSOE en que tanto ERC como Junts se conformen con un compromiso de apertura al debate, que se materializaría con la renovación de esa mesa de diálogo que se puso en marcha en la anterior legislatura.
El 27 de noviembre, fecha límite
La primera reunión “oficial” de la Comisión Negociadora del PSOE se desarrolló el pasado martes 17 de octubre. Ésta, explican fuentes socialistas, sirvió para refrendar su posición: no será sencillo, pero hay confianza máxima en que se llegue a buen puerto. Prefieren seguir siendo discretos, entre otras cosas, porque hay asuntos clave que todavía no se han cerrado.
La fecha límite que tiene Pedro Sánchez es el 27 de noviembre, es decir, justo dos meses después de la primera votación de la investidura de Feijóo, que es lo que marca el artículo 99 de la Constitución Española.
El paso previo necesario, obviamente, será que la presidenta del Congreso, Francina Armengol, decrete la fecha exacta de las sesiones. Pasaron 35 días desde que el rey propuso a Feijóo hasta que comenzó su investidura. Si se repitiera el plazo, el momento de Sánchez (que fue propuesto el 3 de octubre) llegaría en la segunda semana de noviembre, que es la que tienen marcada en rojo en Ferraz.