Sociedad

La lista de la no-compra

La subida de los precios ha llevado a numerosas familias a prescindir de alimentos que antes no faltaban en casa, como el pescado, e incluso a cambiar de hábitos: "Con los pañales, he ido adaptando al niño. Le dejaba el Dodot sólo por la noche y, durante el día, le ponía los del Mercadona".

Una mujer compra pescado en un mercado. ÁLVARO MINGUITO

Hay pocas veces, en estos tiempos, en las que un grupo de personas que habla en el bar, en la panadería o, incluso, en ambientes de altas esferas, esté de acuerdo en algo: los precios están por las nubes, siguen por las nubes, y comprar en el súper se ha convertido, en muchas más que en menos ocasiones, en una suerte de yincana para pillar los productos más baratos. Para mucha gente, ir al súper es ahora como ir a comer a un restaurante: te gastas un dinero y al rato no hay nada en la nevera.

En esa nueva travesía por los supermercados, sobre todo de aquellas personas que, a su vez, viven en la espiral de la precariedad –sueldos bajos, pensiones bajas, etc.– hay quien lleva una lista de la compra muy seleccionada, o, visto de otra manera, quien ha confeccionado en estos meses una lista mental de la no-compra: la elevada inflación ha llevado a numerosas familias a prescindir, por ejemplo, de determinados alimentos que antes nunca faltaban al pasar por la caja y que deberían formar parte de esa cesta saludable elaborada por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición y recomendada por el Gobierno.

Manuela Reyes, periodista de 42 años, comenzó a prescindir de un producto básico en cualquier dieta y, en su caso, un alimento que consumía con muchísima frecuencia: «Dejé de comprar pescado fresco porque noté que eso era lo que más me encarecía la compra. Lo que hice entonces fue comprar más pescado congelado, que es más barato. Y, además, reduje el consumo», cuenta.

En los meses donde la inflación se situó en las cotas más elevadas, ella vivía en Palma de Mallorca. Antes de eso, Manuela cuenta que al menos cuatro o cinco días a la semana compraba una gran variedad de pescado: una dorada, sardinas, salmón, merluza… «Y dejé de comprarlo, directamente», remarca. Para suplir esa carencia, incluyó más días de legumbres en su dieta semanal: «Son más baratas y te permiten desde hacerte un guiso a hacerte una ensalada, o incluso revueltas con carne y tomate, que también es sano».

Con la subida del IPC de hasta el 15,4% interanual, la Organización de Consumidores (OCU) calculaba un sobrecoste de la cesta de casi 900 euros al año. Las mayores subidas interanuales han afectado al azúcar (52,1%), la mantequilla (38,2%), la leche entera (33,4%), el aceite de girasol (32,1%), el aceite de oliva (30,5%), los productos de panadería (28,2%), las harinas (28,1%), los huevos (27,2%), los yogures (26,7%), el queso (20,5%) y el arroz (19,6%).

Cambio de hábitos por la subida de los precios

También la carne, otro producto básico de la cesta recomendada por el Gobierno, se ha convertido en un producto de lujo para muchas familias. «La ternera en mi casa ya… Si tengo que hacer un guisito y la veo de oferta, la puedo comprar y la congelo”, cuenta Laura B., limpiadora de 33 años. Ella tiene una hija de cinco años y un hijo de dos, y viven en el Aljarafe sevillano. La subida de los precios, incluso, la han obligado a cambiar de hábitos. “Con los pañales del niño he pasado de utilizar los Dodot a usar otra marca. Y he estado adaptándole el culete poco a poco: le dejaba el Dodot sólo por la noche y, durante el día, le ponía los del Mercadona”.

El uso de marcas blancas es otra de las modificaciones que numerosas personas han incorporado a su lista de la compra. “En mi casa antes éramos más exquisitos y ahora nos hemos vuelto aficionados y devotos de las marcas blancas”, dice Laura B. Al otro lado del teléfono se escucha de fondo a su marido, que hace una acotación a lo que está respondiendo ella: “Y sin marcas, vamos”. Geles, desodorantes, champús, detergentes… Dentro de las marcas blancas, según un informe de EAE Business School, los productos de higiene del hogar son los más comprados, seguidos de lácteos, yogures y postres. La razón principal aportada por las personas encuestadas es la relación calidad-precio.

Los cambios también llegan a la forma de comprar la fruta. Si antes se compraba por kilos, ahora, familias de, por ejemplo, cuatro personas han comenzado a comprar por piezas: dos kiwis, dos manzanas, dos peras, tres tomates… “Y vamos realmente a la oferta. Que hay oferta de manzana, pues compramos manzanas para esa semana; que hay oferta de peras, pues peras”, dice Laura. Manuela ha llegado a ir a buscar la fruta y la verdura a tiendas más baratas ubicadas en otros barrios.

«Es que ahora por menos de 50 euros no compras nada. Antes no me fijaba en los precios, pero es que ya es una pasada”, dice una mujer abogada en un grupo de amigas de WhatsApp. “Verdad, y lo de la mantequilla es brutal”, responde otra amiga, administrativa, que dice que ahora en Mercadona compra “lo justo”. “A mí me pasa exactamente igual. La compra semanal nos ha subido en torno a un 20%. El salmón ahumado lo dejamos de comprar, pero seguimos comprando ahí por falta de tiempo”, responde otra amiga, ingeniera. “Nosotros no hacíamos grandes dispendios pero sí notamos mucho la subida. Hemos cambiado de marca de queso fresco”, responde la arquitecta del grupo. La abogada, que tiene animales, añade: “Y el saco de comida para perros ha pasado de 14 a 17 euros del tirón. Y un mastín come tela…”.

FACUA-Consumidores en Acción ha pedido al Ministerio de Consumo que abra una investigación y sancione a las empresas que estén aumentando ilegalmente sus márgenes de beneficio tras realizar un nuevo seguimiento sobre la evolución de casi un millar de alimentos afectados por la rebaja del IVA en ocho grandes cadenas de distribución: Alcampo, Aldi, Carrefour, Dia, Eroski, Lidl, Hipercor y Mercadona. El estudio determina que casi la mitad los productos, el 48,9%, han subido ya su precio con respecto al que tenían a principios de año una vez aplicada la norma. «Según el real decreto ley por el que está vigente la medida, ninguno de estos productos puede subir de precio salvo que se produzcan incrementos de costes», afirma FACUA.

En septiembre, el mayor número de subidas se ha detectado en Carrefour, donde se han encarecido 92 del total de 150 precios analizados (un 61,3%). Le sigue Hipercor, con 88 productos más caros que el 30 de diciembre (una vez aplicada la rebaja del IVA) sobre una muestra de 166 precios (el 53,0%). Alcampo ha aumentado 66 de los 125 precios analizados (el 52,8%), mientras que Aldi lo ha hecho en 29 de los 58 alimentos recogidos en este estudio (el 50%). La asociación ha detectado 31 precios más caros en Lidl sobre un total de 63 alimentos (el 49,2%) mientras que en Eroski se han encarecido 63 artículos de los 133 contemplados (el 47,3%). Las dos cadenas donde se ha registrado un menor porcentaje de precios con subidas son Mercadona, con 54 productos del total de 137 recogidos en el análisis (el 39,4%) y Dia, con 47 subidas entre los 130 precios registrados (el 36,1%).

En Mercadona, Hipercor, Eroski y Carrefour ha aumentado el número total de alimentos que se han encarecido con respecto a agosto. En cambio, en Dia, Alcampo, Aldi y Lidl ha disminuido el porcentaje de precios con subidas en el último mes.

Mayores incrementos

En Mercadona, según el estudio de FACUA, la malla de naranjas de cinco kilos ha pasado de 5,05 euros a principios de año a 8,75 euros en septiembre, un aumento del 73,3%. En Lidl, la malla de naranjas de cuatro kilos se ha encarecido un 73,5% (de 3,99 a 6,99 euros). En Dia, el aceite de oliva virgen extra hojiblanca marca Coosur ha pasado de 7,63 euros en enero a 11,99 euros actualmente, lo que supone un aumento del 57,21%.

En Hipercor, el producto que más se ha encarecido entre los analizados ha sido el kilo de manzanas Fuji, que ha pasado de 2,84 euros a primeros de año a 4,95 este septiembre, lo que supone una subida del 74,5%. En Alcampo, esta misma variedad de manzanas se ha encarecido un 129,6% en lo que va de año (de 1,43 a 3,29 euros).

En Aldi, la asociación de consumidores ha detectado un aumento del precio del 56,3% en las naranjas de mesa a granel: de 1,49 a 2,39 euros. En Eroski, el litro de aceite de oliva Hojiblanca Coosur cuesta en septiembre 11,99 euros, cuando en enero su precio era de 5,69 euros (un 110% más caro). En Carrefour, la garrafa de cinco litros de aceite de oliva virgen marca Carbonell es ahora un 84,7% más cara que a principios de año: de 26 euros en enero a los 48,05 euros.

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Comentarios
  1. Si se quejan de la carestía de la vida mujeres que ejercen de abogadas, arquitectas, ect., que salgan a la calle, por ellas y por la clase más humilde económicamente. La protesta y la solidaridad han desaparecido en este país.
    Todos notamos el subidón de los alimentos; todos nos quejamos entre amigas y conocidas; pero ya no pasamos de ahí. Cada día estamos más idiotizados, hasta ahora no logro entender el motivo, sospechas no me faltan.
    Desde primeros de año me paso el día descambiando billetes de 50€ cuando anteriormente con uno de estos billetes tenía para más de un día. Escandaloso.
    Dicen que no hay mal que por bien no venga; lo mismo que con el coronavirus se regeneró considerablemente el medioambiente, si ahora no se llega a comprar carne y la sustituimos por ejemplo por legumbres, no veas como lo va a agradecer nuestra salud.

  2. Para que se solucionen estos y otros problemas se celebran procesiones como la Magna en Granada. Esta es la mejor manera de invertir el dinero y de luchar contra cualquier injusticia, incluída la carestía de la vida, unos no pueden cubrir los recursos básicos mientras otros especulando no paran de engordar sus cuentas bancarias:
    200 agentes, 8.700 sillas y sin obstáculos: medidas “excepcionales” para que la Magna sea un éxito en Granada.
    Si la movilidad se verá afectada con cambios en líneas de autobuses, desvíos de tráfico y cortes de calles, el tránsito de personas también se verá condicionado en zonas de especial aglomeración. Para controlarlo todo se ha diseñado un dispositivo especial en colaboración con Policía Local, Bomberos, Protección Civil Inagra, Cuerpos y Fuerzas y Seguridad del Estado y la Real Federación de Hermandades y Cofradías de Granada. Según la alcaldesa de Granada, PP, este evento multitudinario requiere de “medidas excepcionales” para que el encuentro nacional y la Procesión Magna sea un éxito. Este mismo miércoles por la mañana, el concejal de Mantenimiento, Francisco Almohalla, ha realizado una visita al recorrido con miembros de la Federación para supervisar pavimentos, cableado, la retirada del encadenado de la Fuente de las Granada, maceteros,…
    https://laicismo.org/200-agentes-8-700-sillas-y-sin-obstaculos-medidas-excepcionales-para-que-la-magna-sea-un-exito-en-granada/286098

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