Política
Pedro Sánchez contra la derecha mediática: “No he evaluado su fuerza corrosiva”
El presidente y candidato del PSOE ha acusado a la derecha "económica, mediática y política" de "inocular veneno en la sociedad con el ‘sanchismo’"
En precampaña, Pedro Sánchez ha dejado de ser el presidente del Gobierno para volver a ser el candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno. Un cambio de rol que se evidencia en su discurso, más escorado a la izquierda y similar al de 2016, cuando pugnaba por regresar a la secretaría general de los socialistas. Y, como hace siete años, ha vuelto a sentarse con Jordi Évole, en este caso en Casa Labra, la centenaria taberna madrileña en la que se fundó su partido.
El cambio discursivo de Sánchez ha quedado probado desde el primer momento. El presidente ha aprovechado las primeras preguntas del periodista catalán para despacharse contra las «mentiras», las «manipulaciones» y la «maldad» de una parte del sistema mediático español: «He evaluado mal la fuerza corrosiva de los argumentos que se han dado en determinados medios de comunicación», ha dicho en prime time, este domingo 25 de junio durante el programa Lo de Évole, en La Sexta. Un discurso crítico contra determinados medios que, sin embargo, ya había usado recientemente: «Vale lo mismo el voto de un conductor de autobús que el del presidente de un canal de televisión», dijo en una comparecencia en el Congreso de los Diputados a finales de mayo.
Preguntado por sus escasas (o nulas) apariciones en espacios televisivos de sesgo conservador como El Programa de Ana Rosa, en Telecinco, o el telediario de Vicente Vallés, en Antena 3, el candidato a la reelección ha hecho autocrítica por no prestar atención «al veneno» inoculado desde determinados altavoces mediáticos a la sociedad. Ante ello, ha asegurado que tratará de acudir a la mayor parte de formatos posibles durante la campaña y la precampaña para desmontar «burbujas» como la del sanchismo.
Évole, sin embargo, le ha recriminado su «falta de contundencia» a la hora de defenderse de las críticas: «Soy presidente del Gobierno y he intentado no caer en las provocaciones que se han vertido desde determinados medios de comunicación. He tratado de hacer un debate político, que es lo que demandan los ciudadanos», ha explicado.
Enmarcado en este discurso duro con el poder mediático, Sánchez ha denunciado la «desproporción» entre las visiones conservadoras y ultraconservadoras en los medios de comunicación frente a la ausencia de voces progresistas. El candidato socialista, aunque ha evitado dar nombres concretos durante toda la entrevista, se ha referido a los «programas nocturnos de entretenimientos», en clara referencia a El Hormiguero, presentado por Pablo Motos en Antena 3, y con un contenido cada vez más político y sesgado hacia la derecha.
Un análisis similar al ofrecido por Podemos y Pablo Iglesias en los últimos años, que han colocado a los medios en el centro del debate, considerándoles un actor político con tanta o más influencia que otros poderes del Estado. Sánchez, por su parte, ha denunciado que las «terminales mediáticas» del poder económico quieren evitar un nuevo gobierno progresista, al igual que hicieron en 2019. Nuevamente, ha evitado dar nombres concretos, pero ha pedido que se siga «el rastro del dinero».
Prof. Marcos Roitman: 12 millones de votantes se abstuvieron.
La derecha gana porque sus votantes no las perciben como tales.
En realidad, no son tantos como se cree los votantes de la derecha y de la extrema derecha. Hay personas que depositan su voto convencidos de apoyar una opción de centro, liberal y orden, incluso progresista. Por otro lado, Vox se identifica con la voz de quienes defienden España frente a una serie de amenazas percibidas, desde el independentismo hasta los inmigrantes ilegales.
Para un sector de la juventud y de la clase trabajadora, el Partido Popular es visto como una entidad que se preocupa por los problemas de la gente, defiende la economía de mercado, fomenta la iniciativa privada y busca un consenso constitucionalista. Vox, por otro lado, se ve como la voz de quienes defienden a España de diversas amenazas percibidas. Estos partidos han logrado conectar con las emociones de sus seguidores y obtienen beneficios políticos de ello.
El votante promedio que se presenta en las urnas se identifica con la libertad de mercado, la propiedad privada y la seguridad, rechazando cualquier alusión a políticas de control de la riqueza y el aumento de impuestos. De hecho, la candidata de Más Madrid a la alcaldía de la capital española adaptó su discurso a estas preferencias para no perder votos.
Los votantes de la derecha no se ven a sí mismos como tales.
Para ellos, la derecha ha dejado de ser derecha. La ven como un partido del orden. Ocultan sus lazos con el gran capital, las corporaciones transnacionales, bancos y empresarios y sus intereses de clase. Trabajan por hacer de España una nación libre de inmigrantes ilegales, respetada en Europa y sus aliados.
Para los millones de votantes del Partido Popular y Vox, sus líderes son buenos gestores y entienden los problemas de la gente. Se ven a sí mismos como españoles, no de derechas, y por esa razón les votan. Es una batalla de libertad frente a comunismo.
Las sociedades basadas en relaciones sociales de explotación, patriarcales, xenófobas y racistas, son dependientes de la economía de mercado y se alimentan de negacionismos. De esta manera, rechazan la violencia de género, el cambio climático, los derechos de la comunidad LGTBI+, y apoyan leyes mordaza, la privatización de la sanidad y la educación.
Estamos presenciando una especie de «guerra neocortical», que se despliega en una batalla sin cuartel, donde las noticias falsas, las redes sociales y el ciber-capitalismo debilitan la capacidad de comprensión, facilitan el control de la conciencia y fortalecen la sumisión al poder.
https://canarias-semanal.org/art/34514/desconcertantes-resultados-electorales-en-espana-el-prof-marcos-roitman-nos-da-algunas-pistas
Resumiendo: Según lo veo yo, Españistán es un país de necios, desinformados y manipulados.De esos necios que dicen con el mayor orgullo: Yo no quiero saber nada de política
La derecha gana porque tiene muchos medios
La batalla electoral tiene su traslación directa en los medios de comunicación. En una sociedad donde los partidos están deshabitados de militantes (algunos mantienen cierta afiliación pero que, en la realidad, no ejerce, no participa, no acude, no existe), los «mass media» resultan imprescindibles para que la clase dominante vierta su ideología, marque línea con la simpleza de buenos y malos, de patriotas y antipatriotas. Entrar a un bar por las mañanas a desayunar y ver en la pantalla a Ana Rosa (millonaria y con marido corrupto) marcando agenda, abrazada a la derecha, blanqueando a la extrema derecha y hacerlo con dramatismo del país se viene abajo, es solo comparable con lo que a esa misma hora hace Losantos en libertaddigital, Alsina en Onda Cero, Herrera en la COPE, Ferreras en la Sexta, Pedro J en El español, Inda en okdiario y así hasta el infinito. El control mediático y el partido de la justicia (fiscales y jueces al servicio del poder), son dos pilares básicos para mantener el orden capitalista y dirigir a los súbditos mensajes que luego replican sin pudor ni conciencia en entornos familiares, laborales o de ocio….
https://insurgente.org/la-derecha-gana-porque-tiene-muchos-medios/
Si tan preocupados están, violadores y liberavioladores, por los medios de comunicación, que los prohíban y se dejen de historias.