Opinión
La peli de la semana | ‘Una visita comprometida’ (‘Danger in Chanchencho’)
HUMOR. Dos hombres vestidos de negro asaltan por sorpresa a un apuesto veterinario para que opere a un conocido bribón en Chanchencho.
En el pequeño pueblo costero de Chanchencho reside un apuesto veterinario viudo junto a su perro. Una noche, cerrando la clínica, dos hombres vestidos de negro lo asaltan por sorpresa y lo meten a la fuerza en una furgoneta, pese a los intentos del perro por salvar a su dueño.
Tras una pequeña travesía en lancha, llegan hasta un velero que fondea a cierta distancia de la costa. Allí, en uno de sus camarotes, aguarda postrado en una cama el conocido bribón John Charles. «Tiene la cadera destruida. ¡Debes operarlo!», ordena uno de sus secuaces. «¡Pero si yo soy un simple veterinario!», replica él. Pero los secuaces no hacen caso de sus quejas y lo obligan a hacerlo, facilitándole para ello un precario material quirúrgico.
El veterinario se ve forzado a ocultar en su clínica, durante el postoperatorio, a John Charles, al que trasladan allí de madrugada. A pesar del secretismo, pronto comienzan a correr los rumores por el pueblo. La presencia del bribón enrarece el ambiente y condiciona las tranquilas vidas de los habitantes de Chanchencho, poniendo en peligro la integridad del veterinario y su relación con Daisy, la dueña de una tienda de cupcakes.
Una visita comprometida (Danger in Chanchencho), el thriller más taquillero de la primavera.
A los habitantes de Chanchencho les sirve de consuelo que la operación no la pagan con magia sino con sus impuestos.