Opinión
La peli de la semana | ‘Votación fatal’ (‘Where is my grandson?’)
HUMOR. Caminando sin rumbo, llega a un edificio excesivamente majestuoso para una escuela, pero, como sabe que su nieto va a una privada muy cara, entra.
Un señor debe ir a buscar por primera vez a su nieto a su nuevo colegio. Lleva apuntada la dirección en un papel. Al consultarla, comprueba que se le ha emborronado el número y no es capaz de leerlo. Entonces, caminando sin rumbo, llega a un gran edificio de altas columnas. Le parece excesivamente majestuoso para una escuela, pero, como sabe que su nieto va a una privada muy cara, entra.
Lo reciben unos señores que, de muy malas formas, le dicen: «¡Vamos, rápido! ¡Llega usted treinta minutos tarde!». Lo dirigen hasta una sala muy amplia, de forma semicircular, repleta de personas sentadas en bancadas que parecen aguardar por él. Con ayuda, sube a un estrado. «Venga… ¡Diga algo!», le susurra hostilmente un hombre de barba, trajeado y con corbata verde. El señor, nervioso por la presión, se acerca al micrófono y comienza a hablar de lo primero que se le viene a la cabeza.
Tras una hora de errático discurso, en el que trata temas tan dispares como el cambio climático o las notas de su nieto, una parte de la bancada aplaude con cierta desgana. Al salir de la sala, le pregunta a una chica que parece trabajar allí: «¿Qué ha sido todo esto?», a lo que ella responde: «Ahora votarán para decidir si usted se convierte en el nuevo presidente del Gobierno».
Votación Fatal (Where is my grandson?), la comedia de enredos más disparatada de la temporada.