La mayoría de los asesinatos de periodistas en México quedan impunes

«Vengo también aquí para pedirle apoyo, ayuda y justicia laboral. Porque temo por mi vida». Con estas palabras se dirigió la periodista mexicana Lourdes Maldonado al presidente Andrés Manuel López Obrador en una rueda de prensa hace tres años. El pasado domingo, su cadáver fue hallado en el interior de un coche en Tijuana, con varios impactos de bala. Hacía unos días, acababa de ganar un juicio laboral de casi una década de duración contra el exgobernador de Baja California Jaime Bonilla.

El de Maldonado es el segundo asesinato de un periodista en una semana en esta ciudad y el tercero en el país en apenas el mes transcurrido este año: son José Luis Gamboa Arenas y Alfonso Margarito Martínez Esquiviel. «Duele mucho lo que pasó en Tijuana», ha dicho el presidente mexicano, que asegura que su gobierno mantuvo comunicación con ella tras su petición pública. «Hay que ver si hay vinculación con la denuncia, de tipo laboral, y ver quiénes son los responsables con mucha responsabilidad, aunque sea redundante lo que planteo. […] No se puede en automático vincular una demanda de tipo laboral a un crimen […] Que no haya impunidad«, añadió.

El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) tiene registrados 138 asesinatos de periodistas desde 1992, lo que lo convierte en uno de los países más mortíferos para la prensa. Por su parte, la organización ARTICLE 19 contabiliza 145 desde el año 2000. «Es urgente que las autoridades estatales y federal prevengan agresiones, protejan a periodistas cuando son víctimas e investiguen con debida diligencia los delitos cometidos contra la prensa», denuncia el colectivo.

Maldonado, con casi 50 años de trayectoria en la profesión, trabajó para Bonilla en su empresa Primer Sistema de Noticias (PSN) e interpuso la demanda contra el exgobernador por despido improcedente y adeudos de nómina pendientes. También demandó ante la Fiscalía General de México al abogado de Bonilla, el exfiscal general de Baja California Guillermo Ruiz, por abuso de poder, entre otros delitos, informa Europa Press.

México ocupa el puesto 143 de 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2021 de Reporteros Sin Fronteras (RSF). «2022 se ha estrenado con un baño de sangre para el periodismo mexicano”, dijo el director de la Oficina de RSF en América Latina, Emmanuel Colombié. “Estos dos asesinatos, cometidos con tan solo una semana de diferencia, [aún no se había producido el de Maldonado] hacen presagiar otro año sangriento para la libertad de prensa en el país. Sin embargo, esta violencia que se ceba con los periodistas y la impunidad que habitualmente la sucede no deben considerarse como una mera fatalidad. Las autoridades federales y la policía de Veracruz y Baja California tienen que hacer todo lo que esté a su alcance para identificar y detener a los autores de estas ejecuciones cobardes. Los mecanismos de protección también deben reforzarse”, concluyó.

En 2021, al menos siete periodistas fueron asesinados en México, según la estadística anual de RSF publicada el pasado 16 de diciembre: Benjamín Morales Hernández, Gustavo Sánchez Cabrera, Ricardo López Domínguez, Saúl Tijerina Rentería, Jacinto Romero Flores, Manuel González Reyes y Fredy López Arévalo. Además, fueron desaparecidos dos periodistas, ambos en el Estado de Sonora: Jorge Molontzín Centlal y Felipe Romero Chávez. «La impunidad es casi total: entre el 95% y el 99% de los asesinatos de periodistas, el autor intelectual queda impune, y ninguno de los casos de periodistas desaparecidos de los últimos años se ha resuelto», denuncia RFS.

“México ha sido el país más peligroso del mundo para los periodistas durante años. Son asesinados o desaparecen simplemente porque hicieron su trabajo. No aceptaremos que estos crímenes queden impunes casi todas las veces. Apoyamos a estos periodistas y sus familias, vamos a los tribunales con ellos, les damos apoyo psicológico y les dejamos claro a las autoridades que RSF seguirá luchando contra la impunidad. Por eso fuimos a México”, dijo el director ejecutivo de RSF Alemania, Christian Mihr, en una misión internacional de dos semanas en la primera quincena del pasado diciembre.