Con clase | Opinión
Zonas libres de la ley para la clase dominante
"El poder judicial es el elemento paradigmático de la burbuja clasista. Pero también hay burbujas en lugares que creíamos más democratizados", reflexiona Antonio Maestre.
Los liberales doctrinarios del siglo XIX se creían mejor que la plebe. No concebían que el canon surgido de la Constitución de 1812 dotara de ciertos derechos a aquellos que no tenían renta ni patrimonio. Al pueblo, a la plebe, a la casta iletrada había que mantenerlos alejados de la res pública. El poder en España siempre ha tenido una visión clasista de la soberanía que emana de los moderantistas que llevaron el sufragio censitario a la carta magna de 1848 para que el orden divino tuviera su representación en la reglamentación social y así privar a las clases dominantes de la posibilidad de que se votara mal. La doctrina Vargas Llosa procede de una percepción social de las élites que tiene como base que la voz pública y la dirección de lo común tienen que tener prevalencia entre aquellos que tienen el patrimonio porque la renta y el oro te hacen mejores.
Se creen una clase privilegiada en lo moral y lo intelectual. Su percepción íntima es que no tienen esa posición social por herencia, costumbre y una argamasa legal que les dé preeminencia, sino por ser los mejores. Esta ilusión era posible mantenerla cuando no existía relación interclasista y no había posibilidad de interpelar desde abajo a aquellos que se creían superiores. No hay nada como tratar como a un igual a quien se cree superior para que acabe trasluciendo que su nivel intelectual dista mucho de ser el que creen y trasladan.
Esa burbuja soberbia clasista existente en profesiones como la judicatura supura el germen doctrinario del XIX de aquellos que se creían una casta superior que está destinada a quedar al margen de los procesos destilados de la soberanía popular. Los accesos a la carrera judicial que impiden o limitan la llegada de individuos de las clases populares tienen como fin último mantener al margen del pueblo lugares de decisión que permitan crear zonas libres del cumplimiento de la legalidad. Así, llegado el caso, actuar cuando la democracia decide mal.
La clase dominante defiende con uñas y dientes su necesidad por mantener fuera de la soberanía popular lugares de decisión vitales para el desarrollo de la sociedad, que es otra forma de decir que luchan por mantener a salvo de la decisión del pueblo llano las decisiones que pueden salvarles de quien vota mal. La pervivencia de esas burbujas antidemocráticas de clase se ven en la judicatura, pero también en el hecho de que no se pueda abortar en hospitales públicos. Es decir, se crean zonas libres de cumplir las leyes que no gustan a la clase dominante. La manera es sencilla: procurar que esos lugares de decisión fuera de los procesos democráticos estén copados por miembros de la clase dominante.
El poder judicial es el elemento paradigmático de esta capacidad de actuación de las élites, pero no es el único, existen esas burbujas en lugares que creíamos más democratizados. Entre los años 2018, 2019 y 2020 solo se realizaron dos abortos en hospitales públicos de la Comunidad de Madrid. La razón fundamental es que las direcciones generales de los hospitales y los puestos de dirección de ginecología están ocupados, por una cuestión de acceso social por clase, por miembros de esa clase dominante asociada a una ideología conservadora que suele considerar que el aborto no solo no es un derecho, sino que es un crimen. La ley del aborto queda derogada porque no existe pluralidad de clases en los espacios de decisión.
Las barreras de acceso por clase social a los puestos de dirección en los hospitales públicos provoca de facto que un derecho de las mujeres, que emana de una ley dotada por la soberanía popular, quede derogado por las dinámicas de reproducción social que consiguen que la objeción de conciencia de una minoría que son mayoría en lugares de dirección prive al resto de los ciudadanos del normal funcionamiento de un Estado democrático.
DEVASTADOR ATAQUE A LA MAGISTRATURA ESPAÑOLA EN LA PRENSA EUROPEA.
Reproducción íntegra del Informe del periódico alemán Taz sobre el Poder Judicial español
En un informe publicado por el periódico alemán Taz sobre la magistratura española, se da cuenta del número de años en los que los jueces próximos al Partido Popular (PP) y, ahora, al ultraderechista VOX, han estado disfrutando de una holgada mayoría en los Tribunales de mayor rango, así como en el Consejo General del Poder judicial (CGPJ), En su informe el periódico germano denuncia cómo los puestos en el Tribunal Constitucional han sido cubiertos por personajes involucrados en casos de corrupción y oscuras conspiraciones en favor de los acusados en las filas del PP.
https://canarias-semanal.org/art/31654/devastador-ataque-a-la-magistratura-espanola-en-la-prensa-europea
Los que luchan por los derechos y las libertades de los pueblos, ASSANGE, como ejemplo, (el calvario y crucifixión de Jesús de Nazareth no es nada comparada con la premeditada y lenta destrucción física y psíquica llevada a cabo contra este hombre) están muertos, muchos aún están enterrados en las cunetas de este país, están en la cárcel o han tenido que exiliarse.
PABLO HASEL desde la prisión de Ponent (Lleida):
Dar utilidad a la monarquía (Insurgente.org)
…El descrédito de la monarquía facilita poner encima de la mesa que no nos vale un Estado idéntico o similar a este en forma de república. Además, en un momento dado pueden prescindir de esta en una operación de blanqueo ante estallidos sociales dejando intacto el resto del régimen. Si de algo sabe esta gentuza es de operaciones de maquillaje para engañar mejor. Ya hay sectores de sus voceros que apuntan en esa dirección. Una maniobra que están facilitando los oportunistas que hablan de monarquía como si fuera el único problema gordo y no la punta del iceberg. Cada vez se hablará más de república – como viene sucediendo en Catalunya – y es una buena oportunidad para extender la campaña por la República Popular. Explicando correctamente que esta representa el poder de los trabajadores con libertades y derechos plenos, solo los más reaccionarios que atenten contra sus propios intereses se opondrán a esta. Con semejantes condiciones objetivas existe una gran receptividad para ser apoyada comprendiendo que la negación de vidas dignas afectará masivamente mientras no arrebatemos el poder de la oligarquía.
Su insistencia en pintar al rey emérito como un cabo suelto pretende ocultar que está estrechamente ligado a todos los resortes del Estado que han facilitado que haya sido y sea su cortijo. Es tan escandaloso que hasta la fiscalía parece su abogado defensor para asegurar que, como su padrino Franco, fallezca entre lujosa impunidad. Todo lo que ha hecho no hubiera sido posible sin la ayuda de tribunales, cuerpos represivos, ejército, políticos, servicios de inteligencia, etc. Son quienes todo el día se llenan la boca de “España” y perjudican la vida de su población. Casos como el de la monarquía sirven para denunciar ese falso patriotismo con el que ganan tanto apoyo. Como falsa es la mal llamada izquierda cuyo Gobierno ni siquiera ha eliminado el delito de “injurias” a la Corona permitiendo que nos condenen por describirlo. Una vez más toca recordar lo obvio que se olvida demasiado a menudo: no hay rastro de antifascismo sin oponerse con firmeza a la monarquía que impuso el fascismo y que representa la falta de ruptura con este….