Política
7 preguntas para el nuevo gabinete de Pedro Sánchez
El presidente acometió la renovación del Consejo de Ministros pensando en la reelección y apostándolo todo a la carta económica.
Pedro Sánchez acometió la renovación de su gabinete pensando en la próxima cita electoral, en la que se juega la reelección y que se disputará a finales de 2023 o principios de 2024. Y lo apuesta todo a la carta económica. Para ello cuenta con el caudal recibido desde Bruselas en forma de fondos europeos. Se apoyará, además, en un partido pacificado tras las traumáticas primarias que ganó en 2017. Ha recuperado a antiguas figuras (como Óscar López, sustituto de Iván Redondo como jefe de gabinete) y ha dado entrada en el Gobierno a nombres muy ligados a las baronías regionales.
En el nuevo Consejo de Ministros, dijo el presidente, destacan la juventud, el feminismo y el ecologismo. De momento, sólo lo primero es seguro. Lo demás está por demostrar. El reto que tiene por delante, después de los estragos causados por la COVID-19, es enorme.
Aquí van (sólo) siete cuestiones íntimamente relacionadas con los últimos cambios en el Ejecutivo a las que tendrá que hacer frente en los próximos meses:
1) ¿Cómo afectará a las pensiones el cambio en la vicepresidencia primera?
En principio, el cese de Carmen Calvo como vicepresidenta primera del Gobierno y su sustitución por Nadia Calviño indica la importancia que la Economía tendrá en los próximos dos años. Calviño será la encargada de gestionar los 140.000 millones de los fondos europeos para la recuperación económica post pandemia. Pero los fondos no son gratis. Desde Bruselas piden más disciplina con el gasto en pensiones. Parece que Calviño coincide con el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en la idea de retrasar la edad de jubilación. Los sindicatos aún no han dicho su última palabra.
2) ¿A quién se le subirán los impuestos y cómo lo explicará el Gobierno?
El mundo parece hoy más dispuesto a gravar a las grandes multinacionales tras el permiso recibido por parte de Estados Unidos. Pagarán el 15% allí donde operen. La medida, por supuesto, tiene letra pequeña: si alguien pensaba que caerán del cielo miles de millones para financiar los servicios públicos, que se vaya despidiendo de la idea. Las arcas públicas, disminuidas por la COVID-19, las llenarán los españoles y las españolas. María Jesús Montero será la encargada de fijar la subida de impuestos, pero no de explicarlas. Pedro Sánchez la apartó el sábado de la portavocía del Gobierno y puso en su lugar a Isabel Rodríguez.
3) ¿Quién se sentará en la Mesa de Diálogo con el Govern catalán en septiembre?
Será precisamente Isabel Rodríguez, exalcaldesa de Puertollano (Ciudad Real), quien desde hoy ocupa el puesto de Miquel Iceta en el Ministerio de Política Territorial. Rodríguez ha sido una política muy próxima a Emiliano García-Page, uno de los barones socialistas más críticos con la concesión del indulto a los políticos catalanes. Iceta, famoso por su mano izquierda para tratar este tipo de temas sensibles, ha sido reubicado en Cultura y Deportes.
4) ¿La diplomacia vuelve a ser cosa de hombres?
De los 27 países que componen la Unión Europea sólo cuatro tienen a mujeres al frente del Ministerio de Asuntos Exteriores: Bélgica, Estonia, Países Bajos y Suecia. Hasta el pasado sábado Arancha González Laya había pertenecido a ese reducidísimo club (en el que también estuvieron las españolas Ana Palacio y Trinidad Jiménez). González Laya ha sido la víctima principal de la crisis fronteriza con Marruecos, que convulsionó la política española el pasado mes de mayo. Su sustituto, José Manuel Albares, ha sido embajador en Francia y es un experto en política europea, amén de un estrechísimo colaborador de Pedro Sánchez (le acompañaba a bordo del Falcon en la famosa foto de las gafas de sol). Amarrada ya la parcela europea, ¿cómo colaborará España con los países de América Latina? Y otra pregunta, quizás estrambótica (o no tanto): ¿tendrá España algún papel en la vacunación de los ciudadanos saharauis refugiados en Tinduf (Argelia) o se limitará a acatar las recomendaciones que lleguen desde Rabat? Mientras recogía su cartera como nuevo ministro, Albares se refirió a Marruecos como “nuestro gran amigo y vecino del sur”.
5) ¿La ministra (catalana) de Transportes impulsará por fin el Corredor Mediterráneo?
La nueva ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana es Raquel Sánchez, hasta el sábado alcaldesa de Gavà (Barcelona). Catalunya, su comunidad, ha sido la región más beligerante contra el centralismo de las comunicaciones. Todo pasa por Madrid, mientras el resto de España se vacía. Ahí radica la fuerza simbólica del Corredor Mediterráneo: una arteria comercial (y social) que enlace Andalucía, Murcia, la Comunitat Valenciana y Catalunya (y de ahí a Francia). La idea incide en la concepción federal del Estado (y el PSOE se dice “federalista”) y en la necesaria y pregonada cohesión territorial del país. El valenciano José Luis Ábalos avanzó poco en el proyecto durante sus tres años al frente del ministerio. En la agenda también le espera el polémico proyecto de ampliación del aeropuerto de El Prat, situado a pocos kilómetros de la ciudad que ha gobernado hasta el pasado sábado.
6) ¿Y qué hay de limitar el precio de los alquileres?
Ábalos habló siempre de “conseguir un equilibrio” entre el derecho a la vivienda (protegido en la Constitución) y su utilización como “bien de mercado”. Raquel Sánchez aseguró poco después de su toma de posesión que “no hay derechos ni dignidad sin vivienda, que es el pilar central del bienestar, la frontera que separa la integración de la marginalidad”. Emotivo discurso. Está por decidir cómo se concreta eso y si los grandes acumuladores de capital inmobiliario seguirán estando por encima de la “dignidad” mencionada por la nueva ministra.
7) ¿Qué planes hay en Ciencia e Innovación?
No se conoce ningún plan especial. El presidente Sánchez decidió prescindir de Pedro Duque, uno de los rostros más conocidos de su gabinete, y apostar por Diana Morant, exalcaldesa de Gandía (Valencia). Según comentaba Fernando Simón en la Cadena SER, “los sueldos de los trabajadores públicos en España no son para hacerte rico pero son suficientes. No ocurre lo mismo con los investigadores, que viven de las becas, con salarios al límite, con una precariedad absoluta. Es impresionante”. El presupuesto para Ciencia no creció con Duque. Habrá que ver si lo hace con Morant, quien recibió su cartera con frases genéricas: dijo que “la ciencia es la respuesta” a la pandemia y que “la vacunación es el primer paso hacia la recuperación”. Bajo su dirección se culminará el desarrollo de la vacuna intranasal en la que está trabajando el CSIC, que según se ha anunciado protegerá contra la enfermedad de la COVID-19 y además impedirá el contagio. Se prevé que esté lista para finales de 2022.
¿Qué hay de la ley mordaza, de los presos políticos, de los exiliados, de los raperos encarcelados y exiliados por cantar grandes verdades?, ¿qué hay de las libertades, que como los derechos se están recortando por cada día que pasa mientras aumenta el autoritarismo de monarcas y políticos retrógrados?.
He aquí un ejemplo de lucha para un pueblo anestesiado, aborregado y manipulado:
Pablo Hasel escribió ésto tras ser cambiado de módulo.
Gracias a la presión de la solidaridad, combinada con mi advertencia de ponerme en huelga de hambre si continuaban sin respetar los escasos derechos que tengo como recluso, hace días me trasladaron a un módulo grande donde ya tengo las horas de patio que me corresponden, puedo hacer más deporte y tener más contacto con otros presos. Tras 140 días pudiendo salir a un patio minúsculo menos horas que si estuviera en aislamiento y sin apenas compañía, este cambio pone fin a esa doble condena y permite que la campaña se centre en otras reivindicaciones.
Este castigo extraoficial me lo impusieron por negarme a realizar cursos con la Junta de Tratamiento, que buscaba mi arrepentimiento y cambio de actitud a cambio de permisos de salida (los que se conceden a los presos tras cumplir una cuarta parte de la condena) y también por negarme a ser explotado en prisión. Pretendían alejarme de cualquier módulo con muchos presos para que no influenciara con mi actitud reivindicativa. Sabían de la simpatía que despierto entre los presos y sobretodo, del descontento de estos por la sobreexplotación de la empresa para la que trabajan aquí (CIRE), por la pésima comida, por los elevados precios del Economato que CIRE (otra vez la misma empresa) impone, la excesiva brevedad de las visitas, las plagas de cucarachas y chinches, las instalaciones obsoletas, las ratas en la cocina, etc. Por todo ello, no les interesaba que alguien como yo estuviera aquí. Al igual que en los centros de trabajo se castiga a quienes luchamos, aquí no iba a ser menos. Por idénticos motivos me separaron de los dos manifestantes encarcelados, a pesar de que les correspondía estar en mi antiguo módulo de ingresos
La lucha da frutos y se ha ganado una “pequeña” batalla que, ojalá, sirva de motivación para ganar muchas más. Sin organización no hubiera sido posible. Es importante recordarlo y señalar lo que hace y no hace el Govern en sus cárceles. Por mi parte, seguiré fuerte, decidido a continuar aportando y agradecido por el apoyo que sirve a la defensa de nuestros derechos y libertades.
Pablo Hasel
4 de julio de 2021 – Centre Penitenciari Ponent