Política
Abandono y estigmatización en los barrios del sur: “Solo se acuerdan de nosotros para regañarnos”
Los barrios del sur de Madrid alzan la voz contra “las políticas clasistas y racistas” desarrolladas por el Ejecutivo de Díaz Ayuso
En el centro de salud del barrio de San Fermín, en el distrito de Usera (Madrid), una decena de personas esperan en la calle a ser atendidas. “Falta personal; es imposible dar abasto”, se queja en la puerta una de las enfermeras del centro. “Entre revisiones, PCRs y domicilios no podemos más”, recalca. Unas nubes grises cubren el cielo y amenazan lluvia en cualquier momento en uno de los barrios que van a ser confinados por la Comunidad de Madrid a partir del lunes.
“Cuando vienes al centro salud, sabes que tienes que perder como mínimo una hora”. José Pineda vive en la barriada desde hace 14 años y es uno de los miembros de la asociación de vecinos. Tiene muy claro que el abandono institucional al que llevan años sometidos los barrios del sur de Madrid se relaciona de forma directa con el mayor índice de contagios. “Este barrio tiene 23.000 habitantes y solo tiene un ambulatorio y un colegio, y no tenemos ni institutos, ni biblioteca, ni nada. Tenemos una depuradora para limpiar las aguas de los barrios del norte que a veces apesta”, critica mientras recuerda que, en los años que lleva residiendo en el barrio, ha visto como levantaban dos iglesias pero ninguno de los servicios públicos que llevan tanto tiempo reclamando.
“Si las infraestructuras en general son mediocres, aquí son deficientes o inexistentes”, explica mientras señala hacia un solar vacío propiedad del Ayuntamiento de Madrid. Es el más grande que queda en el barrio y estaba destinado a albergar un instituto, ya que ahora los alumnos que acaban la primaria tienen que ir a otros barrios para acudir a las clases. Ahora, la nueva corporación municipal ha anunciado su intención de construir un parking disuasorio en esos terrenos, lo que ha puesto a los vecinos en pie de guerra, llegando a convocar convocatorias en rechazo al nuevo proyecto, la próxima el 27 de septiembre.
Otros vecinos y vecinas de San Fermín también se quejan de la falta de servicios públicos. Cargada con bolsas de la compra, una mujer se para a hablar con otro residente del barrio. Ella lleva solo tres meses viviendo en el lugar, y asegura que solo ha visto al camión de limpieza pasar una vez. “Pues has tenido suerte, porque yo llevo aquí ya muchos años y no les he visto pasar nunca”, señala otro vecino. En ese momento, Telemadrid anuncia que la rueda de prensa de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, se retrasa de nuevo hasta el viernes por la tarde.
Algunas horas después se confirmaban las sospechas. El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, anunciaba que San Fermín es una de las 37 zonas sanitarias de la región que estarán confinadas a partir del lunes 21 de septiembre al superar los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes. Sus habitantes podrán salir del barrio para ir a trabajar, ir al colegio, cuidar a personas mayores… u otras causas de fuerza mayor. Podrán salir de casa, pero no podrán ir a los parques o jardines, que estarán cerrados. Las reuniones sociales se limitarán a un máximo de seis personas y los establecimientos no podrán superar el 50% del aforo, incluidos bares, que deberán cerrar como máximo a las 22:00h.
Pero en ese momento, sobre las 13:00h, todavía no sabían qué va a suceder. “¿Pero cómo nos van a encerrar otra vez? ¿Qué hacemos, pasamos hambre? Porque si yo no puedo trabajar no puedo pagar nada”, se queja otro de los congregados en esa pequeña asamblea improvisada en mitad de la calle. Sin conocer las nuevas medidas y cuál será su situación a partir del lunes, lo que sí tienen claro es que ya han sido marcados y estigmatizados: “Solo se acuerdan de nosotros para regañarnos. Pero, ¿y los ricos qué?”, se pregunta.
La comparación con otros barrios más acaudalados es constante. El pasado miércoles, el viceconsejero de Salud Pública, Antonio Zapatero, achacó el aumento de la incidencia acumulada a la “relajación ciudadana”, principalmente en estos barrios del sur de Madrid, donde el aumento de los casos es constante. Los vecinos no eluden su responsabilidad individual y la de sus vecinos, pero creen que el componente de clase social juega un papel muy importante a la hora de señalar a unos lugares u otros. “Verás como de La Moraleja no dicen nada, y los casos de la zona son también muy altos. Pero allí, en sus chalets, pues no tienen problema”.
Para José Pineda, la relajación es “una mentira”: “Si vas por la calle, la mayor parte de la gente lleva su mascarilla. ¿Que se la quitan cuando entran en un bar? Pues sí, claro, pero pasa aquí y pasa en Chamberí”, subraya.
“Por la Dignidad del Sur ante la segunda oleada”
Tras sentirse agraviados y señalados por parte de la Comunidad de Madrid, una treintena de asociaciones vecinales del sureste de la capital han firmado un Manifiesto por la Dignidad del Sur ante la segunda oleada. En él, rechazan “las políticas clasistas y racistas” desarrolladas por el Ejecutivo de Díaz Ayuso, las cuales creen que están enfocadas “a la discriminación de los vecinos y vecinas del Sur”.
“En lugar de proteger, cuidar y prevenir que la población más vulnerable de nuestra ciudad sufra como está sufriendo las mayores tasas de contagios, han optado por la estigmatización, la exclusión y la discriminación territorial”, critican. Las asociaciones consideran que el virus está sirviendo como excusa “para sembrar el odio y el miedo” entre los y las vecinas: “Se ha optado por señalar al eslabón más débil de la cadena… en lugar de hablar de lo que realmente es importante para el sur”, como la construcción de nuevas infraestructuras públicas eternamente prometidas pero que nunca llegan.
El manifiesto es una llamada a la acción pacífica en aquellos barrios donde se reside “la mano de obra barata de esta ‘ciudad global’ […] donde se ubica todo lo que la ciudad necesita pero le molesta”: “Nos hemos cansado de aguantar. Somos barrios eternamente olvidados y por eso nos oponemos a estas medidas, llamamos a nuestros vecinos y vecinas a reclamar la Dignidad del Sur”.
En Madrid capital, las zonas sanitarias que estarán confinadas a partir del lunes son Puerta Bonita, Vista Alegre y Guayaba, en el distrito de Carabanchel; Almendrales, Las Calesas, Zofío, Orcasur y San Fermín, en Usera; San Andrés, San Cristóbal, El Espinillo y Los Rosales, en Villaverde; la zona básica de Villa de Vallecas; Entrevías, Martínez de la Riva, San Diego, Numancia, Peña Prieta, Pozo del Tío Raimundo, Ángela Uriarte, Alcalá de Guadaira y Federica Montseny, en el distrito de Puente de Vallecas; y Doctor Cirajas, Ghandi, Daroca y La Elipa, en Ciudad Lineal. En Fuenlabrada, se verán afectados los vecinos y vecinas de Alicante, Cuzco y Francia; en Parla, las zonas de San Blas e Isabel II; en Getafe, Las Margaritas y Sánchez Morate; en San Sebastián de los Reyes, la zona de Reyes Católicos; y en Alcobendas, Chopera y Miraflores; en Parla, las zonas básicas de salud de San Blas e Isabel II. Por su parte, Getafe estará afectado en Las Margaritas y Sánchez Morate; en San Sebastián de los Reyes, la zona de Reyes Católicos; y en Alcobendas, la zona de Chopera y Miraflores. A ello se suman los municipios de Humanes de Madrid y Moraleja de Enmedio.
Y ahora sale en todas las tvs el papanatas alcalde de Madrid diciendo que no va a permitir ninguna segregación en Madrid.
¿ A quién quieren engañar a estas alturas ?