Sociedad

30 voces expertas se hacen preguntas en una guía “para construir otro mundo posible”

"Es imposible saber cómo será el mundo que nos deje la pandemia pero sí podemos decidir qué preguntas le queremos hacer tanto a la realidad actual como a aquella de la que venimos", explica el coordinador de esta herramienta.

Ilustración de la 'Guía de preguntas para construir otro mundo posible tras el COVID-19', por Miguel Brieva.

La crisis de la COVID-19 puede suponer un retroceso de una década en la lucha contra la pobreza. Lo decía un informe de Oxfam publicado hace un mes: la situación económica que ha traído la pandemia podría sumir en la pobreza a 500 millones de personas si no se toman medidas drásticas y urgentes. Estos días surgen infinitas cuestiones sobre cómo será el futuro más cercano –la llamada ‘la nueva normalidad’– y también sobre los cambios estructurales que puedan producirse a medio y largo plazo.

En este contexto, el colectivo La Imprenta –todavía en construcción– ha publicado una Guía de preguntas para construir otro mundo posible tras el COVID-19. «Es imposible saber cómo será el mundo que nos deje la pandemia –pueden pasar tantas cosas aún–, pero sí podemos decidir qué preguntas le queremos hacer tanto a la realidad actual como a la realidad de la que venimos«, explica Miguel Ángel Vázquez, escritor y activista que ha coordinado este documento.

En total, 30 personas expertas en 19 temas plantean un conjunto de 115 preguntas que surgen en plena desescalada. ¿La redistribución de riqueza y recursos será más central en nuestras vidas y sociedades? ¿Recuperaremos el sentido de lo público como colectivo? ¿Respaldaremos una acción gubernamental más activa en el mercado y la economía? ¿Pondremos la lucha contra la pobreza en un mundo sostenible como una prioridad?

La guía aborda estas demandas desde perspectivas mucho más concretas, como la lucha contra la crisis climática, el feminismo, las migraciones o el antirracismo y desde ámbitos como la cultura, la gobernanza o la economía. Su coordinador explica que «no queríamos en ningún caso reflexiones sesudas o volver a darle vueltas a un diagnóstico que está más que explicado». Tan solo preguntas. «Al final ha quedado un material que pensamos que puede ser útil para cuestionarnos tanto nuestro sistema actual como aquel que puede llegar a traer la dichosa nueva normalidad», concluye Vázquez.

«Para elegir a las personas pensamos no únicamente en expertos en la acepción popular del término sino en expertos y expertas desde la clave de personas que tuvieran experiencia de esa realidad, vivencia», continúa Vázquez. Así, señala, «la mezcla de sensibilidades que sale es muy interesante, desde el director ejecutivo de Oxfam, Chema Vera, hasta la voluntaria en una organización de personas sin hogar en Madrid –María Villarta–. Desde el revisor del IPCC –el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático– Eloy Sanz hasta la activista por el clima Irene Rubiera».

También han participado en la guía otras voces conocidas, como Violeta Assiego, Moha Gerehou, Lucía Mbomío, Sani Ladan o Jesús A. Núñez Villaverde.

Así, sobre cambio climático, Sanz y Rubiera se preguntan si serán, en algún momento, «nuestros gobiernos tan responsables con la crisis climática como han sido con la COVID-19». Desde el feminismo, la activista Pepa Moleón plantea si, en ese otro mundo posible, se implementarán medidas específicas en el mercado laboral para atajar la precariedad de muchas mujeres o si se prestará especial atención a la educación en igualdad.

Sani Ladan, especialista en migraciones, propone reflexionar sobre el lugar que ocupan las personas migrantes en la sociedad: «¿De qué manera se puede devolver a los inmigrantes su condición de sujetos políticos, respetando sus derechos?». En la misma línea, Lucía Mbomío y Moha Gerehou proponen: «La pandemia del coronavirus ha evidenciado la importancia de una sanidad que garantice el acceso de todas las ciudadanas para cuidar la salud global, ¿con qué mecanismo se va a garantizar una sanidad universidad, pública y gratuita sin distinción por situación administrativa?».

O, en el plano económico, Genoveva López Morales, de la Red de Economía Social y Solidaria, se pregunta, por ejemplo: «¿Qué rol queremos que juegue el Estado en la economía? ¿Podemos salir del binomio público-privado y crear una economía basada en empresas con valores y de propiedad colectiva?».

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Comentarios
  1. Seguro que está muy bien y lo compartiré. Yo trabajo mucho la dimensión social de los problemas, en el análisis y en las acciones deseables, pero pido entenderlas siempre en relación con las actitudes y valores de las personas; me refiero al cambio de la conciencia cívica personal, algo que cuesta valorar en la izquierda social. Leyes, instituciones, cultura y estructuras … y valores éticos y actitudes personales justas… son un trenzado ineludible. No sé si se ha tenido en cuenta como factor de análisis. Me gustaría.

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