Análisis | Opinión
Tengo miedo
"Me da miedo que se aplaudan decisiones coercitivas como el confinamiento forzoso que, incluso pudiendo ser necesario, es el resultado del fracaso de la propia ciudadanía para actuar cívicamente y evitar en la medida de sus posibilidades las interacciones sociales", escribe la autora.
Me da miedo que se aplaudan decisiones coercitivas como el confinamiento forzoso que, incluso pudiendo ser necesario, son el resultado del fracaso de la propia ciudadanía para actuar cívicamente y evitar en la medida de sus posibilidades las interacciones sociales.
Me da miedo lo rápido que perdemos la confianza en la sociedad cuando tenemos miedo.
Me da miedo perder derechos democráticos por una medida excepcional –por muy excepcional que sea el escenario del coronavirus– y tener que vivir durante semanas bajo un sistema más autoritario.
Me da miedo saber que, en determinadas circunstancias, gran parte de la población apoyaría la instauración de un sistema autoritario por un supuesto bien común, así sea el de preservar la salud o, incluso, la vida.
Me da miedo percibir la presteza con la que nos convertimos en policías de la moral, en acusadores de nuestros vecinos y vecinas, en vigilantes de un Estado policial.
Me da miedo la velocidad con la que, perturbados por el miedo y la desconfianza, somos capaces de pensar que este tipo de crisis se gestionarían mejor bajo un régimen dictatorial.
Me da miedo el miedo que esta sociedad le tiene al miedo.
Me da miedo en lo que nos puede convertir el virus del miedo.
Me da miedo plantear estos miedos y ser acusada de inconsciente, ingenua, insolidaria, desleal.
Me da miedo que, cohibida por ese miedo, me calle estos miedos.
Me da miedo el miedo que le tenemos a las dudas.
Dudar no me da miedo.
Gracias Pepe, no puedo estar más de acuerdo.
Este virus del miedo es el pretexto perfecto para cambiar las reglas del juego mundial…China a la cabeza junto a un puñado de lobbies de poder enfermos introduciendo aún más si cabe el control, la dominación y la manipulación. Cuidado a partir de ahora con las tecnologías y la inteligencia artificial…
Creo que esta enorme crisis instalará más miedo aún si cabe entre la población pero también permitirá despertar a muchas personas hacia una mayor conciencia crítica y confianza en grupos locales, comunidades autogestionadas y autosuficientes, positivamente estoy segura que la mirada de muchos será más amable y con la mente más abierta hacia nuevos modos de relacionarse y vivir. Este sistema nos oprime, engaña y nos roba nuestro tiempo y nuestra libertad, seamos críticos y digamos basta, transformemos el miedo en fuerza y coraje para vivir desde la honestidad, fieles a nuestros principios y valores, seamos ejemplo y cambio.
Hola Patricia, creo que el miedo es algo natural, un mecanismo que nos pone alerta alerta cuando hay un peligro real y genera las reacciones necesarias en nuestro organismo.
Cuando dejamos que nos metan miedo, el miedo impuesto, el miedo que viene de los miedos de otro, puede provocar reacciones que más allá de proteger nuestro organismo nos acerquen al caos.
A las chabolas no ha llegado este miedo, ya sabes hay otras cosas en las que pensar. Aquí seguimos tan invisibles o más, algunas veces pienso que afortunadamente.
Buen artículo, como siempre.
Saludos desde Lepe.
Muchísimas gracias por tu artículo Patricia.
Se ha aprobado de manera ad hoc un decreto ley con unas multas altísimas que te pueden dejar tieso durante meses o años. Y antes como si nada una situación que me recuerda mucho a la situación antes de la crisis estafa, Zapatero negandola y luego para no alarmar a la gente. Infantilisando a los ciudadanos!!! Si infantilisamos continuamente a las personas, lo que está pasando tenemos al final personas inmaduras que no sabe actuar en momentos de crisis, gritando continuamente por el papá o la mano dura contra aquel que piensa de otra manera!!!
Confiar en una sociedad que tiene miedo, da mucho miedo. Lo vemos ahora y lo comprobaremos cuando al terminar la amenaza del virus, vivamos la verdadera amenaza que atemoriza a la población. Confiar en la sociedad es engañarse a uno mismo. Confiar en personas, en grupos, en uno mismo y su capacidad transformadora da fuerza. El siguiente miedo hará que la sociedad olvide los aplausos y la solidaridad, y volveremos a la sociedad del individualismo, de la envidia, el cinismo y la hipocresía. Y el miedo.
Si, si, y si. En el miedo se desarrollan los virus de la Corona, los orígenes de todos los Fascismos. «Sanchez dijo: Este virus no podrá con nosotros, no podrá con nuestro País» (Abascal, Casado y otros muchos españolitos «de a pie» hubieran dicho España. Ahí tenemos el Ejercito desplegado con diversas policias. Imagino que algo parecido vivieron en el getto de Varsovia los de la estrella de David. Este es otro ensayo de la pandemia del Capitalismo Global que padecemos. G. Orwell y Huxley de obligada lectura en vez de ir a la mili. Resistir ante las manifestaciones menos gratas del humanx compañerx: estupidez, egoismo… pon las que quieras
Gracias por aportar un poco de luz entre tanto «miedo». Pensaba que era la única en cuestionarme todo este despropósito.
Pues yo veo muy positivo, Patricia, que tengas miedo. Es una sensación primaria que sólo mediante la razón se supera. Y cuando lo hagas, supondrá, a la postre, una maduración. Acuérdate que el comunismo fracasó por su idealismo, por su alejamiento de una visión REALISTA del ser humano, y sustituirla por una versión idealizada. Falsificada, en suma. Porque aunque se decía «materialismo científico», su evaluación del ser humano y de la sociedad era una ensoñación de cojones, alejada de la experiencia científica. Un idealismo como el de esos padres que no regañan a los hijos porque en su delirio presuponen que entienden sus sesudas argumentaciones, etc, etc. Tu miedo a las normas coercitivas y a lo que pueden acarrear, es un idealismo más. Es, en el fondo, un primitivismo más, como el miedo, que nos acompañan desde el inico de los tiempos, y que, a buen seguro, cumplen su misión psicológica. Por eso es bueno, ya verás.
Estoy empezando con alivio a leer artículos que cuestionan esta «alerta sanitaria» que me era imposible aceptar con casi todo a mi alrededor, incluidas personas con mucha capacidad de crítica social justificando sin ninguna reflexión todas las medidas tomadas hasta ahora por el gobierno.
Os invito a que leais este otro artículo de @JorgeLenCasero1 (tuiter) que también habla del miedo y del confinamiento como cuestión más peligrosa que el propio COVID-19
https://www.elsaltodiario.com/el-rumor-de-las-multitudes/soberania-en-tiempos-de-biopolitica-estado-de-alarma-y-derechos-fundamentales
COMPLETA DESMOVILIZACION DE ACTIVIDADES DEL MOVIMIENTO POLITICO, SINDICAL Y SOCIA ANTE ESTA COYUNTURA.
En la supuesta era de la información, reina la desinformación. Una vez más, el pueblo trabajador está siendo azotado por la crisis y la violencia. Una vez más, el pueblo trabajador está pagando el pato de este sistema despiadado. Estamos siendo el epicentro de un estado de shock donde cumplimos el papel de ratas de laboratorio. Ratas que estamos predestinadas a vivir o a morir según los experimentos sociales a los que nos están sometiendo. Pero en esta situación, ¿quién se atreverá a morder a quien experimenta con nosotras?
La capacidad que hemos adquirido de asumir las medidas disciplinarias, autoritarias y restrictivas (medidas económicas y de control social más allá de las políticas de salud publica) en el territorio están siendo devastadoras. El miedo y la incertidumbre nos están haciendo ser los peones de una partida de ajedrez, en el que nos pueden manipular al gusto del jugador. El control social es absoluto. Nadie escapa de esta realidad…
Mientras tanto, la crisis económica aumenta a pasos agigantados y los diferentes gobiernos se apresuran a preparar los paquetes de medidas económicas, políticas y sociales que van a producir otro saqueo a los derechos civiles, políticos y económicos del pueblo trabajador. Todo esto, sin aparente resistencia.
En esta situación alarmante, no nos queda otro remedio que volver a despertar y hacernos una serie de preguntas: ¿por qué cierran todo lo publico y no lo privado?¿Por qué han creado esta alarma social?¿Por qué somos nosotras las que pagamos otra vez el pato?
El miedo puede ser paralizante, pero también puede ser catalizador de rabia e injusticia. En esta situación, como en otra cualquiera, no podemos dejar que nos controlen sin ninguna visión crítica. Somos las que seguimos trabajando todos los días; somos las que mantenemos la producción y la reproducción de la vida. Tenemos conocimiento y medios suficientes para hacerlo mucho mejor. Pero para ello, no podemos dejar que nos dominen. No podemos dejar que cunda el pánico.
No podemos quedarnos de brazos cruzados esperando a que pase la crisis sanitaria. Todas las medidas (económicas, políticas y sociales) que están adoptando con esta crisis vienen para quedarse. Si no actuamos ahora, luego sera demasiado tarde.
https://insurgente.org/xabier-lasa-frente-a-la-violencia-del-coronavirus-organizacion-y-lucha/
Un análisis de un sentido común y un pensamiento crítico brutalmente bueno y honesto. Muchos pensamos exactamente igual. Y lo peor, quizá sirva también como test para saber hasta dónde puedes doblegar al individuo para futuros eventos. Porque después de esto los poderes hablarán del enorme gasto, y a renglón seguido » habrá que apretarse el cinturón ( aún más si cabe) «. Hay que estar preparado para las políticas de » El día después»
Que gran artículo, cuanta lucidez y sabiduría. Lástima que estos atributos estén en posesión de una minoría.
Si sólo fueran unas semanas de vivir en un sistema más coercitivo y autoritario casi que me conformaría.
Pero ya me conozco las grandes jugadas de los capos que dirigen el mundo.
Así sucedió, sin ir más lejos, con el ataque a las Torres Gemelas de N.Y. Era lo que necesitaban para someter más al mundo, para vigilarlo y para recortar nuestras libertades.
De momento las grandes multinacionales farmaceuticas están haciendo el negocio del siglo y ya iremos viendo a quienes más favorece el virus éste.
El adoptar medidas obligatorias es necesario porque las diferentes leyes de educacion de los ultimos 40 años han fomentado la falta de disciplina y de responsabilidad al mismo tiempo que han dejado de valorar el esfuerzo ( un pequeño ejemplo sería: no importa que suspendas porque te voy a pasar de curso, te voy a dar un titulo…) he sido maestra durante 40 años y sé de lo que hablo