Opinión | Política

Dejad de mentirnos

"Plantear una lucha a muerte por el acta de diputado de Quim Torra es un simbolismo decadente y carece de sentido práctico en el camino hacia la independencia", opina el autor.

Quim Torra en la sesión de investidura. Parlament de Catalunya / Miquel González de la Fuente.

Este artículo ha sido publicado originalmente en Crític. Puedes leerlo aquí.

Traducción de Beatriz Tostado

Neo-convergentes: dejad de mentirnos. Desobedecer la resolución de la Junta Electoral Central y del Tribunal Supremo y mantener el acta de diputado de Quim Torra no tiene ningún sentido práctico en el camino hacia la independencia. Se trata de una desobediencia estéril cuya única consecuencia serán más procesos judiciales y más inhabilitaciones. Es puro simbolismo y, si lo miramos con perspectiva, tiene un punto decadente: hace dos años el independentismo hablaba de desobedecer para hacer un referéndum, hoy habla de desobedecer para negarse a retirar una pancarta —que, finalmente, fue retirada—.

Dejad de mentirnos, venga. Si el único presidente legítimo es Puigdemont… ¿Qué sentido tiene plantear ahora esta pelea a muerte por el escaño de Quim Torra? Si Torra no es más que un presidente sustituto y circunstancial, que ocupa el cargo a la espera del regreso de Puigdemont, es más sencillo y práctico que se eche a un lado y que la mayoría gubernamental escoja a otra persona, que, siguiendo esta lógica, seguirá siendo el sustituto del presidente legítimo hasta que este vuelva del exilio. ¿Qué sentido tiene, entonces, librar esta guerra, más allá de buscar una salida aparentemente épica para el presidente Torra y un desgaste para el presidente del Parlament, Roger Torrent? 

ERC: dejad de mentirnos. Ya sabemos que no soportáis a Junts per Catalunya. No lo intentéis con la falacia de la unidad del independentismo. Si os tenéis que divorciar, hacedlo ya. Afrontad que tal vez quisierais explorar fórmulas de gobiernos que pasen por el apoyo del PSC o de los Comunes, y que eso no gustará a una parte de vuestra base social. Pero no continuéis, ni unos ni otros, alimentando el despropósito de una relación que no va a ningún lado. No pretendáis seguir haciendo ver que las derechas y las izquierdas no existen. Si no sois capaces de poneros de acuerdo, convocad elecciones. Pero dejad de mentirnos. Por cierto: convocar elecciones después del 1-O para evitar la aplicación del 155, como pretendía entonces Puigdemont, no era ni una deshonra ni una traición: era un gesto pragmático, como los que ahora defiende ERC. ¿Por qué entonces ERC presionó con la DUI?

CUP: dejad de mentirnos. Dejad de alimentar el discurso del independentismo mágico que dice que la insurrección popular por la independencia es posible. Sabéis que no será así. La República no se implementará. Si después de la declaración de independencia frustrada del 27-O, en el contexto de gran movilización social del 1 de octubre, ni el Govern ni nadie dio un paso en esta dirección… ¿Hemos de creernos que hoy en día estamos en un contexto más propicio para la insurrección? Si los CDR, que ahora hacen ‘escraches’ a ERC por traidora, no se organizaron el 27-O para ocupar puertos, aeropuertos y comisarías… ¿Qué sentido tiene ahora hablar de insurrección? Puede haber rabia, furia y combatividad en las calles. Puede haber represión, que se ha de denunciar. Pero no estamos, ni de lejos, en un escenario insurreccional.

Dejad de mentirnos sobre el 1-O y el retorno de Puigdemont

Y si hablamos del 1 de Octubre y de todo lo que pasó… Neo-convergentes, dejad de mentirnos, también, con la vuelta de Carles Puigdemont. Puigdemont no volverá del exilio para entrar en el Parlament y tomar posesión de su cargo, y tampoco podrá ejercer de President por más que el Parlament decida investirlo a distancia. Puigdemont, con buen criterio y bien asesorado jurídicamente, buscará de todas las maneras posibles, eludir la acción de la justicia española, con todas las estrategias legales a su alcance, e intentará evitar acabar en prisión como Junqueras

Todos vosotros: dejad de mentirnos también sobre el mito del 1 de Octubre. El 1-O fue un embate al Estado sin precedentes  y que hace unos años el independentismo ni habría soñado. Fue, en muchos sentidos, un momento fundacional: de aquí a unos años miraremos atrás y tal vez digamos que el independentismo catalán moderno nació, de verdad, el 1 de Octubre. Pero el 1-O no fue un referéndum que habilitara al Parlament para proclamar la independencia. No es posible la independencia unilateral con un 43% de participación del censo electoral. No es posible hacerlo con esta base social y con un Estado en contra. No es posible hacerlo si los Mossos d’Esquadra tenían incluso un plan para detener al President. En otro contexto, quizás lo sería. Ahora no.

Por todo esto, independentistas: si de verdad aspiráis a lograr la independencia algún día, dejad de mentirnos. Dejad de tratarnos como menores de edad. Dejad que afrontemos como ciudadanos adultos las limitaciones y contradicciones del proyecto soberanista. Dejad de decirnos que lo tenemos a la vuelta de la esquina. Dejad de hacernos creer que vuestro partido, entidad o colectivo es el más puro, autentico y combativo. Dejad de basar vuestra política en hurgar en las contradicciones de los otros independentistas. Dejad de hacernos creer que vosotros sí priorizáis la unidad y no hacéis partidismo, cuando es evidente que no es verdad. Dejad de basar vuestro discurso en el hecho de que el Estado Español siempre será peor que cualquier alternativa que podáis ofrecernos.

Dejad de alimentar el populismo de la derecha indepe

Pero, sobre todo, dejad de mentirnos porque a base de mentiras lo único que hacéis es alimentar el populismo. El discurso del independentismo mágico, una vez se contrasta con la realidad, se deshace como un terrón de azúcar. Y eso no hace sino dar alas a la derecha independentista, que existe de verdad, y que puede acabar recogiendo los frutos de vuestras falacias. Una derecha reaccionaria y carca que se viste de liberal, moderna, rompedora y disruptiva, que tiene presencia en los medios y en las redes, y que fermenta en vuestras mentiras. Y para luchar contra la derecha no hay atajos ni caminos fáciles: hacen falta más dosis de verdad, aunque a veces la vacuna haga daño. 

Es cierto: el discurso de gran parte del independentismo ha evolucionado a lo largo de los últimos años. En mayor o menor medida y con más o menos éxito, hay personas de todos los espacios políticos que han hecho autocrítica. En algunos casos, las propias organizaciones han realizado procesos de análisis muy relevantes. Algunos lo llaman pragmatismo, otros realismo. Es un ejercicio imprescindible, pero aún no suficientemente extendido. Hace falta más pensamiento. Más mentes pensando. Mas discursos que huyan del tópico y del recurso a la épica fácil. Así pues, os lo imploramos: dejad de mentirnos. Y si queréis, convocad elecciones. O aprobamos los presupuestos y hay elecciones. ¡O nada de elecciones!  Hemos tenido tantas que tanto da. Pero sobre todo, si de verdad aspiráis algún día a ver una República catalana, dejad de mentirnos. Porque ningún proyecto que merezca la pena se puede fundar sobre la mentira y el autoengaño.

Si te gusta este artículo, apóyanos con una donación.

¿Sabes lo que cuesta este artículo?

Publicar esta pieza ha requerido la participación de varias personas. Un artículo es siempre un trabajo de equipo en el que participan periodistas, responsables de edición de texto e imágenes, programación, redes sociales… Según la complejidad del tema, sobre todo si es un reportaje de investigación, el coste será más o menos elevado. La principal fuente de financiación de lamarea.com son las suscripciones. Si crees en el periodismo independiente, colabora.

Comentarios
  1. NO TENIM REI.
    LA MONARQUIA ESPAÑOLA ES UN ESTAMENTO QUE NO RESPONDE A LOS VALORES REPUBLICANOS DE LIBERTAD, IGUALDAD Y DEMOCRACIA QUE TANTO NUESTROS PUEBLOS COMO LAS MAYORIAS SOCIALES DEL ESTADO ANHELAN.
    UNA DEMOCRACIA REAL SOLO SERA POSIBLE DESDE LA RUPTURA CON LA HERENCIA, LAS BASES Y VALORES QUE REPRESENTA EL REY Y SU FIGURA.
    EL REY Y LA MONARQUIA DEBEN DEJAR DE EJERCER SU TUTELA SOBRE LA CIUDADANIA, GOBIERNOS Y PARLAMENTOS QUE DE LA VOLUNTAD POPULAR EMANAN.
    Els portaveus al Congrés de les cinc formacions sobiranistes -signants de la “Declaració de Llotja de Mar“-, Gabriel Rufián (ERC), Laura Borràs (JxCat), Oskar Matute (EH Bildu), Mireia Vehí (CUP) i Néstor Rego (BNG), han llegit el manifest en una compareixença conjunta en castellà, català, gallec i basc.

    En l’escrit asseguren que «no consideran el rei com un interlocutor vàlid, ni li atorga cap mena de legitimitat ni funció política». Han recordat, a més, que «Felip VI es va negar a rebre la presidenta del Parlament Carme Forcadell al gener del 2016», i han denunciat el discurs del 3 d’octubre en què «el monarca va avalar la repressió i els cops de porra contra els ciutadans i ciutadanes que volien votar al referèndum de l’1 d’octubre».

    En el manifest exposen que «la Monarquia espanyola i el seu màxim exponent, el rei d’Espanya, no ens representa. La societat catalana, basca i gallega rebutgen majoritàriament la figura d’una institució anacrònica hereva de franquisme que se sustenta en l’objectiu de mantenir i imposar la unitat d’Espanya i les seves lleis, negant així els drets civils, polítics i nacionals que assisteixen a les nostra ciutadania i els nostres pobles».

    Així mateix, han subratllat que el rei «ni té la legitimitat dels nostres pobles, ni li reconeixem cap funció política. Menys encara quan el seu paper envers les nostres nacions no ha estat altre que el d’intentar imposar projectes i valors antidemocràtics, com va quedar demostrat en el discurs autoritari pronunciat el 3 d’octubre».

    També han criticat que «la Monarquia espanyola és un estament que no respon als valors republicans de llibertat, igualtat i democràcia que tant els ciutadans i ciutadanes dels nostres pobles com les majories socials de l’estat anhelen».

    «Una democràcia real només serà possible des de la ruptura amb l’herència, les bases i valors que representa el rei i la seva figura», per això, consideren que «el rei i la Monarquia han de deixar d’exercir la seva tutela sobre la ciutadania i sobre els governs i parlaments que de la voluntat popular emanen».

    «Només així es podrà donar curs a solucions basades en el respecte a la voluntat popular, la llibertat i la democràcia», han finalitzat els portaveus de ERC, JxCat, EH Bildu, CUP i BNG.

  2. Creo que el artículo está incompleto, pues falta pedir al Gobierno central de entonces, a los cuerpos policiales enviados a Catalunya, al supuesto coordinador de los mismos, al secretario de Estado de la época, a la vicepresidenta y al entonces presidente que dejen de mentirnos.

  3. Un independentista pidiendo a otros q no mientan. Y q les queda pues?
    El Aneto es catalán???. Esa es una de las más suaves q les he oido.

  4. Denuncia lo obvio pero da por bueno lo esencial, la reaccionaria causa nacionalista ( en una región rica de uno de los paises mas descentralizados de Europa) y su demencial diccionario pujolista: “estado español”, como si España solo fuera un “estado”, la papanatada del 1 de octubre como algo serio (“momento fundacional”, dice), etc., etc. En resumen un tipo que asume esta opera bufa y que dice a sus creyentes que el rey esta desnudo. Dios mio, cuanto tiempo perdido!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.