Cultura | Economía
Miles de contratos públicos incumplen la ley para poder ser adjudicados a dedo
Civio publica la primera parte de una investigación que analiza de forma íntegra todos los contratos menores que han publicado las administraciones españolas entre el 1 de enero de 2018 y julio de 2019.
En verano de 2018 tocaba renovar la cocina de la Base Aérea de Zaragoza. En total, gastaron 49.000 euros en suministros. Por esa cantidad, la Ley de Contratos del Sector Público (LCSP) obliga a abrir concurso público para que las empresas presenten ofertas. Pero los responsables decidieron tomar un atajo: despedazaron sus necesidades en pequeños contratos, lo suficiente como para poder contratar a dedo cada uno de ellos. El 16 de agosto adjudicaron dos de ellos, uno por dos hornos y otro por el equipo frigorífico. Menos de dos meses después, el 10 de octubre, adjudicaron los otros cuatro: uno para el armario, otro para el lavavajillas, otro para comprar la mesa de la cocina y otro para el termo. Todos ellos eran de menos de 15.000 euros, contratos menores, lo que significa que podían adjudicarlos sin concurso y casi sin publicidad ni controles. No sería sospechoso si hubieran comprado a firmas especializadas en cada uno de esos electrodomésticos. Pero todos los contratos menores, los seis, fueron a parar a la misma empresa: Zasel SL.
La ley siempre ha sido clara: está prohibido trocear contratos grandes para pasarlos por menores y así señalar con el dedo, sin muchos más miramientos, a la empresa ganadora. Pim pam. Evitando todo lo que implica un concurso (transparencia en el proceso, todas las firmas del ramo pueden presentarse, reglas claras para elegir al ganador…). Tras la última reforma, el texto es mucho más exigente: prohibido firmar más de un contrato con la misma empresa si, sumados, superan los límites de los menores. Esto es: una vez se ha llegado a ese umbral (de 15.000 euros para suministros y servicios y de 40.000 para obras, sin IVA, como todas las cifras de este artículo) no se podría volver a contratar a la misma firma.
Sigue leyendo la investigación en Civio.
CAPITALISMO SALVAJE, DESTRUCTOR E INHUMANO, inflitrado en todas partes.
“Buscar a los enfermos menos complicados y no atender a los que no lo son es donde está la mayor rentabilidad de los centros sanitarios privados”
En un acto de Ateneo Republicano junto con Asociación por la Defensa de la Sanidad Pública de Aragón, se presentó en la Biblioteca Aragón de Zaragoza el libro “Privatización Sanitaria. Análisis y alternativas”. Hablamos con su coordinador, el doctor Marciano Sánchez Bayle.
Fue un acto en el que el público salió contento y muy sensibilizado frente a los problemas actuales de la sanidad y con la firmeza de que hay que defender “la Sanidad Pública”.
—¿Cuáles son las consecuencias de la privatización o privatizaciones sanitarias?
–Tiene que ver con esto la existencia de enfermos/as rentables y no rentables, ¿realmente hay personas enfermas rentables?
–¿Están bien utilizados los recursos del sistema sanitario público? Más concretamente me refiero a las derivaciones que se hacen a centros privados, mientras se cierran camas en la sanidad pública. De la misma manera hay servicios que pudiendo funcionar mañana y tarde no se hace, pero cuando si se realiza es pagando las famosas peonadas. Es el caso de los quirófanos por ejemplo.
–Hoy tenemos algunos aspectos que nos preocupan y muy especialmente a la ciudadanía son las famosas “Listas de Espera”, ¿por qué se producen y que soluciones ve para disminuirlas o acabar con ellas?
–Siguiendo en esta línea, sabemos que hay personas que abandonan tratamientos médicos por no poder pagar su costo. Esto tiene que ver con “los copagos”, ¿son imprescindibles?
–Según vemos continuamente en medios de comunicación hay un crecimiento de seguros privados. ¿Por qué se produce y qué podemos hacer para invertir esta tendencia?
–Un puntal de nuestra sanidad pública es la Atención Primaria, ¿esto sigue siendo así o más bien está deteriorándose o como decimos por aquí está de capa caída?
–Como profesional también me preocupa y nos preocupa algunas cuestiones específicas como son la cobertura de plantillas y la dedicación exclusiva, ¿qué piensa, es parte de la solución o no es necesario y podemos seguir igual?
–Y ya para terminar ¿hay alternativas a todo esto o más bien nos tenemos que conformar?
https://arainfo.org/marciano-sanchez-buscar-a-los-enfermos-menos-complicados-y-no-atender-a-los-que-no-lo-son-es-donde-esta-la-mayor-rentabilidad-de-los-centros-sanitarios-privados/