Sociedad
Rosa Guiralt: “Si no cambiamos la estructura social no podremos educar en igualdad”
Entrevista a Rosa María Guiralt Martínez, fiscal delegada de violencia de género de Valencia.
Puedes leer la entrevista completa a partir del sábado en #PorTodas, el proyecto de investigación de ‘La Marea’ sobre los asesinatos machistas.
Rosa María Guiralt Martínez es fiscal delegada de violencia de género de Valencia desde prácticamente la entrada en vigor de la Ley contra la misma en 2004. Feminista desde mucho antes de que feminismo fuese una palabra de moda, es conocida en el País Valenciano por su compromiso con las mujeres y la claridad de sus declaraciones.
¿Cómo se determina judicialmente que un asesinato de una mujer a manos de un hombre ha sido un delito de violencia de género?
En los casos en los que ella había denunciado previamente, o que los vecinos habían advertido a la Policía de gritos pidiendo auxilio, por ejemplo, es evidente. Pero cuando no, se investiga a través de otros testimonios e indicios, porque los asesinos no suelen declarar. Al principio, los familiares suelen mostrarse sorprendidos –que si era un buen padre, que cómo puede ser…–. Pero después empiezan a contar los episodios en los que se evidenciarion las desavenencias, los ‘no te pintes tanto’, ‘no te vistas así’ o ‘no salgas con esa amiga’, o se descubre que ella le había avisado de que se quería separar. Y ahí es cuando él responde matándola porque ‘o eres mía, o de nadie’. Se trata de una relación de poder de él sobre ella, por eso es violencia de género.
¿Y en los casos aparentemente más dudosos, como los ancianos, normalmente enfermos, que matan a sus esposas y después se suicidan?
Tuve un caso parecido de un hombre que, tras matar a su mujer y antes de suicidarse, le dejó una carta a sus hijos explicándoles que lo había hecho porque no iba a consentir que tuviesen que cuidarles. No está científicamente demostrado, pero por mi experiencia creo que las mujeres estamos socializadas en los cuidados y podemos cuidar a nuestros maridos, hijos, padres y suegros hasta el día en que nos morimos, así reventemos. Pero cuando los roles se subvierten y son ellos los que tienen que cuidar, por primera vez en sus vidas, cuando no aguantan más, matan a sus mujeres y se suicidan. Una anciana no mata a su marido porque no aguante seguir dándole de comer, bañándole, cuidándole. Cuando dicen que la base de la violencia de género está en la educación, yo añado que también lo está en la estructura social: en los roles que la cultura nos impone a unos y a otros. Si no cambiamos esas estructuras, no podremos educar en igualdad.
La Ley de violencia de género de 2004 fue un gran avance, pero ¿qué aspectos cree que se tienen que mejorar 15 años después de su aprobación?
Muchos. Cuando una mujer que sufre violencia de género no sabe salir de esa situación es un problema de la sociedad. Y esta debería darle oportunidades y herramientas. Lo que le estamos ofreciendo a una mujer maltratada que vive en casa de sus suegros, porque su marido gana muy poco, es una casa de acogida –¿cuánto? ¿seis meses?-, una contraprestación de 400 euros –¿dónde va con 400 euros? ¿Quién va a denunciar, como dicen, por ese dinero?–. No le puedo ofrecer nada: no le damos un trabajo, ni una vivienda, así que no ven futuro. Nuestra ley es buenísima, pero si no la acompañamos de medios económicos para darle una perspectiva de vida a la mujer, no funciona…
Puedes leer la entrevista completa a partir del sábado en #PorTodas, el proyecto de investigación de ‘La Marea’ sobre los asesinatos machistas.
FEMINISMO Y RELIGION
«A la mujer dijo: En gran manera multiplicaré tu dolor en el parto, con dolor darás a luz los hijos; y con todo, tu deseo será para tu marido, y él tendrá dominio sobre ti». Está escrito en el Génesis de los cristianos pero también en el Corán de los musulmanes: «Y di a las creyentes que bajen la vista con recato, que sean castas y no muestren más adorno que los que están a la vista, que cubran su escote con el velo y no exhiban sus adornos (…)». Son solo dos de las múltiples citas que en los textos sagrados de los cristianos y musulmanes establecen el sometimiento de la mujer al hombre o unos códigos de comportamiento justificados en esa dominación. Con estas bases, ¿es posible ser feminista desde la religión? ¿Es posible ser cristiana o musulmana, seguir los dogmas y, a la vez, luchar por la igualdad de la mujer?
Juán:
Convincente el vídeo. Igualdad entre personas, no igualdad paritaria. Eso de la educación en igualdad en casa ya es más complicado pués habría que empezar por educar a los padres.
Siempre he considerado que estos difíciles tiempos deben ser liderados por lxs mejorxs, sean mujeres o sean hombres.
Interesante entrevista a una inteligente mujer:
«Cuando dicen que la base de la violencia de género está en la educación, yo añado que también lo está en la estructura social: en los roles que la cultura nos impone a unos y a otros. Si no cambiamos esas estructuras, no podremos educar en igualdad».
. Nuestra ley es buenísima, pero si no la acompañamos de medios económicos para darle una perspectiva de vida a la mujer, no funciona»…
Breve reflexión de 5 minutos sobre feminismo e igualdad:
https://www.youtube.com/watch?v=nNIo5XZMjp4
Espero que pueda servir de ayuda.