Cultura
El universo de Lady Distopía | Lo que Lino no recordaba
Vuelvan a su infancia, a los sábados por la mañana... A Lino, en el universo de Lady Distopía, le ocurrió esto.
Lino Garra recordaba perfectamente aquellos sábados por la mañana en los que, al despertar, corría a la habitación de su madre, que siempre estaba en su cama leyendo, y se tumbaba a su lado a mirar todas aquellas páginas repletas de palabras que él aún no podía comprender.
Después, fue ella quien le enseñó a leer. Y más tarde, empezó a traerle a casa libros de la biblioteca, colecciones de misterio, novelas de aventuras… Hasta que también ella le enseñó a elegir sus propias lecturas.
Lino también recordaba cómo entonces se empezó a equivocar, y comenzaba libros que le aburrían soberanamente. Entonces su madre le enseñó que leer suponía disfrutar. Y consiguió relajarse. Y empezar a elegir mejor. Y luego a devorar libros.
Y ahora que había pasado tanto tiempo desde que ella ya no estaba, Lino no era capaz de recordar cómo era su cara. Sabía cómo tenía los ojos, los labios, la nariz… pero no le venía la imagen completa a la cabeza. Y soñaba con volver a tumbarse en aquella cama junto a su madre. Aunque no entendiera las palabras. O aunque las entendiera pero le aburrieran. O aunque no le aburrieran.
Bendita agua que revive mustios sentimientos…