Los socios/as escriben

Año nuevo… Seguimos como siempre

"¿Vamos a seguir un año más diciendo prácticamente lo mismo, repitiendo el discurso que está llevando a un progresivo declive del impulso transformador de la sociedad?".

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tras su intervención en el Senado. Foto: Moncloa / Diego Crespo.

Por supuesto, el sector más privilegiado de nuestra sociedad va a seguir. Le está yendo muy bien. La derecha social, si se mueve, es para conseguir un entorno político y económico cada vez más favorable a los intereses de la oligarquía. Los más ricos lo tienen muy claro, el pasado año siguieron aumentando su riqueza de una manera escandalosa ?se puede consultar el último informe de Intermón Oxfam, Premiar el trabajo, no la riqueza, sobre el aumento de la desigualdad en el mundo?, así es que solo pretenden más de lo mismo.

Luego está una mayoría social cuyos intereses económicos no coinciden en absoluto con los de la oligarquía, pero que a pesar de eso tiene una mentalidad conservadora. Resultaría muy interesante analizar los factores que en los últimos decenios han empujado a una gran masa social española hacia una postura cada vez más a la derecha. Sin embargo, parece que nadie está interesado en realizar ese análisis, por lo menos a la opinión pública no han llegado los resultados de cualquier posible estudio.

Lo indudable es que las últimas elecciones, y todas las encuestas, indican esta deriva conservadora de la sociedad española. Parece que últimamente el PP baja, pero es en beneficio de su joven y atractivo hermano, Ciudadanos. Otro sector, que sigue siendo muy numeroso, se mantiene fiel a esa derecha enmascarada llamada Partido Socialista. Aquí quiero dejar muy claro que lo de derecha enmascarada no se refiere a un gran número de afiliados y votantes del PSOE, que siguen teniendo una mentalidad realmente progresista, pero que son incapaces de liberarse de unas cúpulas abiertamente neoliberales. Al otro extremo del arco político, la izquierda sigue sin levantar cabeza. Sobre el último rayo de esperanza, Podemos, podemos constatar cómo se va debilitando.

Si los expertos no nos dicen nada, tendremos que pensar por nuestra cuenta. Observando la evolución de la sociedad española en los últimos decenios, salta a la vista que hemos experimentado un progreso económico notable que llevó, por lo menos a la mayoría del país, a la sociedad de consumo y al estado de bienestar. Esto se conseguía bajo unos gobiernos socialdemócratas, y con la influencia del bienestar económico conseguido en la Europa socialdemócrata. Pero la socialdemocracia no cuestionaba en absoluto el sistema capitalista, y lo conseguido fue un bienestar burgués, que nos empujó hacia una mentalidad burguesa.

En los últimos años, en los que ese bienestar se tambalea y comienza a retroceder aceleradamente, el poder económico ha manejado hábilmente otras dos armas que han resultado muy efectivas: la mentira y el miedo. Recordando el principio de la propaganda nazi de que una mentira cincuenta veces repetida se convierte en verdad, el capitalismo nos ha asegurado, mucho más de cincuenta veces, y por múltiples portavoces, que no hay alternativa a este sistema económico, que es inútil oponerse a él. Y nos lo hemos creído. Por otro lado, el terrorismo, los grandes movimientos migratorios, y el riesgo de perder lo que aún nos queda, ha facilitado el que los poderes económicos nos hayan llevado a una mentalidad temerosamente conservadora.

Y la izquierda más radical, la que está más allá del PSOE, ¿cuál ha sido su discurso? ¿Cómo se ha opuesto a esta deriva conservadora de la sociedad? No es el momento y el espacio para analizarlo, basta con comprobar los resultados: una izquierda cada vez más débil, cada vez más lejos de alcanzar el poder político en la sociedad. La pregunta con que comienza esta hoja se refiere fundamentalmente a ese discurso de la izquierda. ¿Vamos a seguir un año más diciendo prácticamente lo mismo, repitiendo el discurso que está llevando a un progresivo declive del impulso transformador de la sociedad? ¿O vamos a tener la capacidad de dar un cambio valiente y decidido, que afronte la realidad por dura y difícil que parezca, pero que nos traiga la esperanza de vencer al inhumano capitalismo que nos domina?

Antonio Zugasti es socio cooperativista de ‘La Marea’.

Si te gusta este artículo, apóyanos con una donación.

¿Sabes lo que cuesta este artículo?

Publicar esta pieza ha requerido la participación de varias personas. Un artículo es siempre un trabajo de equipo en el que participan periodistas, responsables de edición de texto e imágenes, programación, redes sociales… Según la complejidad del tema, sobre todo si es un reportaje de investigación, el coste será más o menos elevado. La principal fuente de financiación de lamarea.com son las suscripciones. Si crees en el periodismo independiente, colabora.

Comentarios
  1. ¿Qué entiendes por izquierda radical?
    Porque a I.U. y menos a Podemos no se les puede llamar así.
    Y que mayor terrorismo, Antonio, que la criminal dictadura capitalista, que siembra violencia, destrucción e injusticia por los cinco continentes; con esta siembra no esperemos que nos devuelvan gratitud o bonitos regalos.
    El mayor problema que veo, al menos en este país, es la manipulación informativa, que cuando la derecha gobierna llega a límites vergonzosos y luego así vota la gente, gente con inquietudes futboleras que no las llevan a otros ámbitos, me gustaría saber si por pereza o por qué.
    Un pensador inglés decía: «al pueblo se le educa o se le sufre».
    Y la dictadura capitalista al pueblo lo manipula y lo utiliza en su provecho. En ésto son insuperables.
    Cuando no le sirvamos no tendrá ningún escrúpulo en deshacerse de nosotrxs. Los descubrimientos de la ciencia los compra el dinero para sus intereses.
    Julio Anguita dice que a él sólo le produce miedo el silencio del pueblo.
    Un inmenso rebaño nos arrastra con él al matadero, como mínimo, no vayamos cómo corderos dóciles y silenciosos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.