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No es a por ellos, es a por nosotros

Existe una España con alma de maltratador que se muestra furibunda contra la independencia de Cataluña que lo único que ofrecen para sus ciudadanos es el maltrato sistemático de sus emociones e identidad

Es domingo y el Mercat de Sant Antoni de Barcelona bulle de gente olisqueando entre los libros de segunda mano, cómics añejos y parafernalia de coleccionista. Todo el mundo absorto en sus pesquisas para encontrar algún viejo libro descatalogado cuando un hombre aparece enarbolando una gran bandera de España con tremendo estropicio. Su libertad nadie la vulnera, el hombre se pasea entre todos sin que nadie le censure su forma de expresarse. Sin embargo, acude a cada columna donde hay un cartel a favor del referéndum o pidiendo ‘democràcia’ para arrancarlo, romperlo y tirarlo a la basura. La libertad que quiere para sí se la niega al disidente. Esa es la patria que todos tenemos que combatir. La que creó el mito de las dos Españas, la de una nación auténtica, que brotó de los militares del 36 y que se contrapone a una Antiespaña hereje, separatista, marxista y laica que hay que aplastar.

La movilización independentista en Cataluña está aflorando el sentimiento más primitivo de todos aquellos ciudadanos imbuidos por el franquismo sociológico. El Gobierno y el aparato del Estado están aplastando de forma brillante el referéndum, utilizando todos los resortes de coerción que la ley les permite, y eso está enardeciendo a las masas tocadas por la vara del fascio y a las que les pone la implantación de la bota sobre el cuello del diferente. Los más radicales contra los independentistas no se conforman y braman para que la represión sea total contra la Antiespaña. Una multitud de ciudadanos acude a la comandancia de la Guardia Civil junto a la subdelegada del gobierno en Huelva, Asunción Gravalos. La comitiva de la benemérita es despedida con soflamas contra los catalanes. “A por ellos”, les cantan. Dadles palos hasta que se les quiten las ideas de irse de nuestra España. La única y verdadera. La escena se repite en Castellón, Cádiz, Guadalajara, León. Un a por ellos que es un a por nosotros.

El periodista Ilya Ehrenburg narraba una conversación con Antonio Machado en Barcelona en diciembre de 1938 cuando el poeta marchaba hacia su exilio de Colliure: «Para los estrategas, los políticos e historiadores todo estará claro: hemos perdido la guerra. Humanamente hablado, yo no estoy tan seguro, quizá la hemos ganado”. El referéndum planteado por el independentismo está siendo derrotado por medio de la ley y la represión. No hay duda ni debate posible. Es un hecho. Sin embargo, moralmente están venciendo la batalla. Porque la ilegalidad del referéndum del procés se está legitimando con la violencia del Estado, una posición que también defiende el cronista Martín Caparrós en un reciente artículo en The New York Times.

Esa España con alma de maltratador

Existe una actitud paradójica en la caterva de espécimenes más radicales contra la independencia, la de aquellos que espuman por la única e indivisible soberanía nacional, que braman contra los separatistas insultando a Cataluña y todo lo que suene a catalán. No soportan la idea de una España partida pero no les importa tenerla unida en contra de la voluntad de sus partes.

Porque es cierto que existe esa “puta España” a la que apelaba Rubianes, aquella a la que pertenecen los que se den por aludidos por este artículo, los que más ruido hacen, la más intolerante y despreciable que funciona con la psicología de un maltratador. Quieren mantener junto a ellos a una parte importante de la población sometida, humillada y oprimida. No quieren dejarla ir, pero lo único que hacen para mantenerla a su vera es aplastar su voluntad. En definitiva, una posición política sádica que utiliza la represión como único elemento para doblegar los anhelos totalmente legítimos de una parte importante de la población.

“Se ha hablado de catalanes y vascos, llamándoles la antiespaña. Pues bien, por la misma razón ellos pueden decir otro tanto. Y aquí está el señor obispo [Plá y Deniel], que lo quiera o no es catalán, nacido en Barcelona, para enseñaros la doctrina cristiana que no queréis conocer. Y yo, que soy vasco, llevo toda mi vida enseñándoos la lengua española que no sabéis. Ese sí es mi Imperio, el de la lengua española”

Miguel de Unamuno decía estas palabras el día de la raza de 1936 frente a un tropel de fascistas. Aquellas palabras que ponían frente a un espejo a ese fulano patrio eran las del venceréis, pero no convenceréis. Unamuno no sabía entonces que no tenían ninguna intención de hacerlo, porque su único cometido era la eliminación total de esa parte de la población a la que llamaban Antiespaña. Ese espíritu que está asomando estos días contra Cataluña no se ha visto contrariado por esos partidos que dicen llamarse constitucionalistas. El PP lo ampara, Ciudadanos participa de él y el “izquierdista” Pedro Sánchez guarda un perfil bajo silente y vergonzoso cuando la serpiente empieza a resquebrajar el huevo en el que se mantenía hibernada.

La España diversa

Existen momentos en el que la reacción desproporcionada ante una postura no compartida te empuja a defender posiciones que no son las tuyas. La España diversa que esté lejos de los independentistas, de los burgueses del PdCAT que votaban junto al PP contra los estibadores, o de los antisistema (a mucha honra) de la CUP, tiene que abandonar sus reservas ante el procés cuando el fascismo de la peor condición empieza a aflorar en diversas capitales españolas legitimado por la actitud represiva del estado. El 2 de octubre solo importará el relato construido durante estos tumultuosos días. El discurso mayoritario y predominante que se está imponiendo en la opinión pública es el de la algarabía por la reacción represiva contra todo aquel que participe en el referéndum. Una respuesta desproporcionada que con el paso de los días está situando el marco del disidente en el antifascismo.

No están dejando otra salida aceptable para aquellos que antes recibían el calificativo de equidistante. El referéndum del 1 de octubre ya está en otra pantalla de realidad. Ese escenario ha quedado superado y ahora solo importa el establecimiento de puentes entre la España tolerante que respeta el sentimiento personal de cada ciudadano con la Cataluña que quiere expresarse libremente. Y esperar que de forma voluntaria decidan permanecer junto a nosotros. Que somos ellos. Porque solo construyendo un país que respete al conjunto de sus ciudadanos se conseguirá que todos lo sientan como propio. Un hogar compartido. 

Respondía José María Queipo de Llano y Ruiz de Sarabia en el siglo XIX a una soflama sobre la aniquilación de la antiespaña que “la historia enseñaba que las guerras siempre habían concluido por transacción, aun venciendo”. Algunos jamás comprenderán que mediante la sumisión y el aplastamiento no conseguirán que los catalanes quieran permanecer en este país, su España no es la de la buena gente. Los que de verdad quieren a Cataluña y su pueblo lo quieren libre y voluntariamente junto a ellos. De los españoles honrados y solidarios que respetan la diversidad depende rechazar a esa España con alma de maltratador que habla de los catalanes como “ellos”, con odio, como si no fueran de los nuestros. 

 

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Comentarios
  1. Pues yo no me considero identificado por la españa esa nacionalista y franquista que vota a falange. Cuanta gente vota a un partido fascista hoy día? Seguro que hay nacionalfalangistas como hay de todo. Desmitifiquemos… la España de todo los días es trabajadora, normal, divertida y demócrata. Tiene familiares dispersos por toda España y no entiende de fronteras. Si queremos volver a reeditar una guerra civil no contéis conmigo. Me iré a otro país del mundo.

    • No te acabas de enterar Félix.
      Si tenemos a los fascistas gobernando al país puedes calcular cuanta gente vota fascismo.
      Algunos saben lo que votan, otros muchos votan demasiado ligeramente.
      Luego al resultado de la votación de inconscientes, desinformadxs y manipulados, le llaman democracia.

  2. Creo que no hay que engañar(se). Estamos donde estamos simplemente por cáculos electorales. Para el PP es rentable la mano dura con Cataluña, y para ERC, PdeCAT y la CUP también lo es. Los exaltados de uno y otro lado solo son carne de titular con la que se alimentan los periodistas, obligados a contar historias nuevas y más tremendas cada día. Sin embargo, al cabo de unos días el clímax se agotará. Cuando eso pase, habrá que ver lo verdaderamente importante. A saber, cuánta gente en Cataluña y en el resto de España va a orientar su voto en las próximas elecciones en función de lo que ha pasado estos días. Hay que entender que todas las mandangas de la independencia y la libertad (por un lado) y del respeto a la legalidad (por otro), no son un fin, sino un medio.

    • Como ya nos las modificaron en el s.XVI, como el Rey al que todos votamos o la religión que imparten en muchos colegios. Los titiriteros, Alsasua, el GAL. Lo que me da pena es todo eso de mi imperio.

  3. Gracias Antonio por tu compromiso con los derechos y libertades universales y por compartir tu acertadísimo análisis.
    Con estos energúmenos maltratadores, que estos días vemos como salen por todas partes cómo las setas en el bosque después de la lluvia otoñal, sin complejo alguno. La dictadura de la que aún no hemos salido plenamente les atrofió su primaria mente. Sus planteamientos se reducen a que lo que se ha hecho toda la vida es lo correcto por la razón de que es lo que se ha hecho toda la vida.
    A ninguna persona con un mínimo de salud mental le debería apetecer ser súbdito nacionalista español con esta clase de paisanaje.
    Pedro Sánchez, prometía, pero ya vemos que empieza a perder trenes.
    Pérez Tapias, sería el mejor dirigente del PSOE pero es tan inteligente como crítico así que esa mano negra del sistema que lo tiene todo controlado e impide que gobiernen los mejores o la propia tibieza de las bases no lo permitirá.

    • Que cierto es que el fanatismo de una parte pequeña de la sociedad Catalana quiere arrastrar al abismo a todos sus ciudadanos y lo peor de todo es que se creen las grandes mentiras que narcotizan sus sentidos ….menores movilizados .empujar a los estudiantes a montarla…marcar como hacian los nazis a quien no comulga con ellos etc etc etc..no por mucho que digan mentiras van a cambiar la verdad ..la gente no es tonta pero vosotros si. Yo soy Español y el manido facha que utilizan estos energumenos no me afecta en absoluto , porque es verdad que a solas todos sabemos nuestras verdades pero sinceramente creo que estais muy confundidos

      • Jolu, cuantos años has vivido en Catalunya? Puede que algunas cosas de las que dices sean verdad, pero esta manía que tiene la gente de insistir en que el tema independentista es cosa de cuatro locos no la entiendo. Quizás haya una mayoría de gente que prefiere seguir en España, y es respetable, pero los que no, los que quieren una Catalunya independiente, son muchos. Y digo son. Y hay que escucharlos. Al final, lo que pensamos muchos, es que la mejor manera de saberlo es con un referendum.

        • Mi solidaridad con el pueblo catalán, que es el que sufre por todos lados. Yo, que no soy catalana pero sí antifascista, veo atónita cómo Naciones Unidas tiene que aparecer a recordar a todos los españoles muy españoles y mucho españoles que las medidas que se están tomando no son democráticas. Y que se paternalice tanto que se digan sandeces como que los niños de 15 o 16 años no saben qué pensar ni qué hacer. Perdonad pero yo a esa edad sabía discernir entre democracia y dictadura, y me manifesté varias veces y hasta me inscribí en grupos de acción, por motu proprio. Esto se ha ido tan de las manos que el manifestarse o el ir a votar ya ni siquiera es para conseguir o no la independencia sino para que los fascistas no se salgan con la suya, es un ejercicio a favor de la democracia. Y con 15 años se tiene claro a poco que tengas algo de neuronas funcionando. Por otro lado, igual en esto peco de ignorancia, pero en lo que he seguido las noticias, sólo he oído a Inés Arrimadas (C’s) diciendo que a través de quiénes van a los colegios y quiénes no, se puede saber la ideología de cada uno. Es el único comentario claramente marcador. Y lo ha dicho tras poner una denuncia contra la Consellera de Educació. Con un par. Así que creo que ayuda que haya gente de España que les diga a los catalanes que no todos somos así y que nos avergüenzan las medidas de opresión, que ni siquiera tiene que venir la ONU a decirnos que eso no está bien, ya lo sabemos por nosotros mismos. No quisiera que os independizarais, us estimem, i estem amb vosaltres.

  4. Leyendo los comentarios cada ves tenguo mas claro que Cataluña se irá. Intolerancia, falta de respeto e ideas de gente que dice conocer y no sabe de qué habla. Cataluña marchará por la misma razón que marchó cuba. España no aprende. Adiós Cataluña que te vaya buen.

  5. Muy buen artículo, tener la voluntad de comprender que esta pasando sin perjuicios rancios, y un mínimo de empatía hacia los catalanes es de agradecer.
    Lástima de ciertos comentarios de los lectores. Dudo mucho que la señora que dice que vivió 30 años en Cataluña viviese realmente allí en algún momento. De hecho dudo que sea una señora y no un picoleto con bigote y tricornio del CNI alimentando odios patrióticos del oscuro siglo XX 🙂

  6. Es en muchas zonas del resto de España donde se tuerce el gesto cuando se habla «de los catalanes». En muchos sitios del resto de España se ha olvidado ya a esa mitad que se siente española. Esa mitad a la que llaman «fascistas» en Cataluña por no ser independentistas y «separatistas» cuando viajan al resto de España y les meten en el saco independentista sin ni siquiera preguntarles. ¿El «a por ellos» es «a por los delincuentes»? Vengas, hombre, no me hagas reir. Es a por todos los catalanes debido a la imagen deformada que se tiene en el resto de España.

  7. El extremismo empezó cuando quitaron la primera bandera de España del primer ayuntamiento.
    Mucho antes de tu paseante del mercado.

  8. Allí no saben quien es Machado , Unamudo ni Queipo de Llano (porque son autores españoles y para ellosde baja categoría) es obvio que usted tampoco sepa de verdad lo que representan para muchos de estos Españoles que si respetamos a nuestra policía y guardia civil.
    Artículos como el suyo son señor mío objetivo de estudio. Estudios profundos sobre como en nuestra raza se están degradando las más mínimas normas de convivencia.
    Yo sí viví en Barcelona más de 30 años y se lo que se cuece y le ruego que se calle sin saber de la misa la mitad:
    «A por ellos» no es ir a por los catalanes; es ir a por delincuentes sean de donde sean.
    No dudo de su titulación académica ,pero permita el que dude de su inteligencia… Porque la verdad es que razona usted menos que mi gato!

      • Con esa frase Machado se refería a las personas que, en la discrepancia o la confrontación, tienden a embestir y no a reflexionar. No se puede meter a aquellas personas con una opinión contraria siempre que esté argumentada. Usar frases célebres como argumentación para aparentar inteligencia resulta ridículo. Lo único que demuestran es carecer de argumentos para rebatir lo expuesto por la otra persona. Como ves, eres tú el que estás más cercano a lo que decía Machado.

    • Yo viví 45 años y doy fe de que lo que usted dice es mentira. Es más, creo que usted no conoce nada de esa bella y cortés ciudad, glosada incluso por Cervantes en su obra más importante.

    • Le escribo para pedirle que me recomiende algún libro de Queipo de LLano que, imagino, será de la generación del 36, junto a Millan Astray (deduzco yo, ya que usted se ha referido a Unamuno).
      En otro orden de cosas, apunto que, Juanma Bajo Ulloa dejó bien plasmado lo que usted está comentando.
      Estoy completamente de acuerdo en lo de que hay que ir a por los delincuentes, sean de donde sean. Lo que no alcanzo a entender es por que partidos imputados que tienen en sus filas, además, más de ochocientos imputados no han sido ilegalizados ni los delincuentes detenidos. Este es el objetivo de mucha gente de bien y por el que luchan, felinamente, cada jornada.

    • Ejemplo claro de lo que habla el periodista sobre a los que va a escocer el artículo. Habla ud. de raza española. En fin…

    • Llamar «autor» a un sanguinario hijo de puta como Queipo de Llano demuestra que no sabe de lo que está hablando.

    • Señora, no se pase que educación tenemos y cultura también. No acabo de ver donde ha podido vivir durante 30 años, con las vacas en el Monte? Menos lobos Caperucita.

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