Medio ambiente | OTRAS NOTICIAS
El negacionista Trump, otra amenaza para el cambio climático
El próximo presidente de EEUU quiere vetar los Acuerdos de París, retomar la construcción del mega oleoducto Keystone XL e impulsar el 'fracking'.
«El concepto de calentamiento global fue inventado por los chinos para lograr que la industria norteamericana dejara de ser competitiva». «No creo en el cambio climático […]. Es siempre el tiempo. Y así ha sido durante mucho, y además, la verdad, el tiempo cambia». «Hace frío en Nueva York y estamos a finales de julio. ¿Dónde diablos está el cambio climático?». «Toda esa carísima charlatanería del calentamiento global tiene que acabarse. Nuestro planeta se está enfriando». Estas frases revelan la opinión del próximo presidente estadounidense, Donald Trump, sobre el cambio climático.
Sus teorías negacionistas inquietan tanto a la comunidad científica como a los miles de expertos que estos días participan en Marrakech (Marruecos) en la Cumbre del Cambio Climático (COP22) de Naciones Unidas, que debe velar por el cumplimiento de los acuerdos alcanzados por 195 países hace un año en París para evitar que la temperatura del planeta aumente dos grados antes del año 2030. Pero sin la aportación y el compromiso de EEUU, estos pactos pueden quedar en papel mojado.
Durante su campaña, Trump ha amenazado con cancelar los Acuerdos de París y retirar todos los fondos que EEUU destina a ese programa. También se ha mostrado partidario de retomar las obras de construcción del oleoducto Keystone XL, que trasladaría arenas bituminosas (un petróleo pesado muy contaminante) desde Canadá hasta el Golfo de México, así como de impulsar el fracking y el consumo de carbón. Además, ha atacado a las energías renovables. En su opinión, la energía solar es demasiado cara y las turbinas de viento son las responsables de que cada año mueran miles de águilas.
Desde Marrakech, el presidente de la COP22, Salaheddine Mezuar, ha recordado a Trump que, tras la entrada en vigor hace una semana del Acuerdo de París, «todos los países y los actores no estatales comparten la responsabilidad de continuar los grandes progresos conseguidos hasta la fecha». «La cuestión del cambio climático atañe a la preservación de nuestros medios de vida, de nuestra dignidad y del único planeta en el que todos vivimos», por lo que es necesario creer que «todas las partes respetan sus compromisos», ha reiterado Mezuar.
En la misma línea se ha manifestado en las últimas horas la ministra de Ecología de Francia, Ségolène Royal, quien ha insistido en que el presidente electo de EEUU «no puede impedir» que el documento aprobado en París entre en vigor. “Cuando 103 países que representan el 70% de los gases de efecto invernadero emitidos en el planeta ya han ratificado el texto, [Trump] no puede, en contra de lo que dijo, denunciar el Acuerdo de París”, subraya Royal.
«Ahora que la campaña electoral ha pasado y que las realidades del liderazgo se decantan, espero que Trump tomará conciencia de que el cambio climático es una amenaza para su pueblo y para países enteros que comparten mares con Estados Unidos, incluyendo el mío», añade la presidenta de las Islas Marshall, Hilda Heine.
«La elección de Trump es un desastre, pero no puede ser el final del proceso internacional sobre el clima», subraya May Boece, director ejecutivo de 350.rog, un grupo global que trabaja a favor de una desinversión de los combustibles fósiles. «Nuestro trabajo se vuelve mucho más difícil, pero no es imposible. Nos negamos a perder la esperanza», concluye.