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Sólo el 8% de los actores españoles puede vivir de su profesión
Un informe revela que el 57% de los intérpretes no consigue empleo en el sector, y sólo el 2,15% del colectivo cobra 30.000 euros o más euros al año.
MADRID // Los actores y actrices españoles que tienen trabajo en el sector artístico son menos de la mitad del colectivo. Y de entre el total de artistas, poco más del 8% puede llegar a fin de mes gracias a su talento interpretativo. Así lo refleja el Estudio sociolaboral del colectivo de actores y bailarines en España, un trabajo que la Fundación AISGE ha realizado a lo largo de 2016 a partir de 3.282 encuestas. Se trata de la mayor radiografía hecha en España sobre la profesión artística.
Sólo el 43% de los intérpretes realizó algún trabajo sobre los escenarios o frente a las cámaras, un índice de ocupación que representa un drástico retroceso respecto a los estudios anteriores. La gravedad de la situación va más allá. No sólo sucede que una mayoría de actores no tiene empleo en su sector. A ello se le suma que quienes sí lo logran obtiene unos ingresos muy modestos, a menudo ínfimos. Del total de actores y actrices españoles, sólo el 8,17% cobra 12.000 o más euros anuales y, en consecuencia, pueden vivir de esta profesión. Si colocamos el listón en quienes cobran 30.000 o más euros del año y disfrutan de cierta holgura económica, resulta que hablamos de apenas el 2,15% del colectivo.
La investigación constata que no sólo ha bajado la tasa de ocupación, sino también los ingresos que obtienen aquellos artistas que sí logran trabajar. Entre los que cobran por su trabajo como actores, más de la mitad (el 53%) no supera los 3.000 euros anuales. En concreto, el 29% obtuvo menos de 600 euros durante todo el año (una media de 50 euros mensuales), mientras que otro 24% se quedó en la franja entre los 601 y los 3.000 euros.
Las indagaciones de la Fundación AISGE muestran que la situación se ha agravado durante al menos los tres últimos años, en un contexto de «callejón sin salida»: paro cada vez mayor, trabajo cada vez más precario y pocas soluciones alternativas o complementarias fuera del gremio interpretativo. Ante esta grave situación de precariedad, los actores y actrices españoles buscan otras fuentes de ingresos: el 46% tiene habitualmente un empleo al margen de la profesión artística.
Pese a estos esfuerzos por complementar sus ingresos con otras actividades, el diagnóstico general resulta preocupante. El 32% de los artistas españoles acreditan unos ingresos globales (interpretación más otras ocupaciones) inferiores a los 600 euros al mes, lo que les coloca por debajo de la llamada «línea de pobreza» (665 euros mensuales).
Precariedad entre las mujeres
La situación, ya de por sí preocupante, lo es todavía más en el colectivo femenino: la tasa de desempleo alcanzal al 51,6% de las mujeres, seis puntos superior al de sus compañeros masculinos. Las actrices trabajan menos días al año que los hombres, cobran menos, se enfrentan con mayor frecuencia al problema de trabajar sin contrato y sufren una inserción laboral más débil.
Son ellas quienes predominan en el segmento de ingresos inferiores a 600 euros anuales. En cambio, las mujeres empiezan a escasear en franjas de ingresos un poco más favorables. Sólo el 26% de actrices percibe más de 6.000 euros al año, un porcentaje que en el caso de los actores alcanza el 39%.
Jóvenes: trabajan más pero cobran menos
Los menores de 35 años trabajan más que los de las generaciones anteriores, pero, en contrapartida, sus ingresos son sensiblemente más humildes que los de sus colegas de más edad. Por lo pronto, la tasa de ocupación artística va descendiendo con la edad, según se desprende del informe. Trabajan en el sector artístico el 48% de los actores menores de 35 años, pero este índice se reduce hasta el 43% si nos fijamos en los mayores de 45 años.
Los jóvenes tienen mayor tasa de empleo y trabajan más días al año. Sin embargo, su situación dista de ser favorable. En este colectivo predomina el tramo de ingresos de 600 a 6.000 euros, mientras que el grupo de edad intermedia (35 a 44 años) lidera el tramo de 6.000 a 18.000 euros, y los mayores de 45 son mayoría en la escala superior, ese exiguo porcentaje que cobra más de 30.000 euros al año.