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Rajoy (esta vez sí) acepta el encargo del rey, pero no aclara si se presentará a la investidura
Ha asegurado que hará todos los esfuerzos posibles y activará una ronda de contactos para formar un gobierno: "Debemos evitar unas terceras elecciones", afirmó tras su reunión con el rey.
Esta vez sí. El presidente del Gobierno en funciones desde hace siete meses, Mariano Rajoy, ha aceptado el encargo del rey de presentarse a la investidura, según ha informado en una rueda de prensa tras su reunión con Felipe VI, pero no ha aclarado si se presentará finalmente si no consigue los apoyos necesarios. La Constitución no contempla esa opción que sí baraja Rajoy. El líder del PP ha asegurado que hará todos los esfuerzos posibles y activará una ronda de contactos para formar un gobierno, incluso en minoría, sólo con los apoyos del Partido Popular: «Los demás también tienen que colaborar para evitar que se repita lo que ha ocurrido en España desde el 20 de diciembre. No nos podemos permitir una nueva legislatura fracasada, debemos evitar unas terceras elecciones y ser respetuosos con lo que han votado los ciudadanos».
Los principales partidos de la oposición mantienen sus posiciones y su rechazo a unas terceras elecciones. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, insiste en que votará en contra de la investidura de Rajoy. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, deja la pelota encima del PSOE, al que pide que elija entre apoyar al PP o conformar una alternativa de izquierdas. Y desde Ciudadanos, Albert Rivera, aporta dos soluciones: un gobierno de consenso amplio o un gobierno en minoría con la abstención de todos los grupos.
De momento, el PP sólo cuenta con sus 137 diputados, la abstención de los 32 diputados de Ciudadanos y de la diputada de Coalición Canaria. «España necesita un gobierno ya», ha repetido Rajoy. La rueda de prensa ha registrado momentos de confusión entre los periodistas asistentes: no me aclaro, ha dicho una de ellas ante la posibilidad de que Rajoy finalmente no se presente a la investidura. Otro compañero ha utilizado el término investidura en diferido, expresión usada por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, presente en la sala, para explicar el caso del finiquito a Bárcenas.