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Los Borbones, hacer fortuna con la sangre (azul)
Los Borbones han ido de la mano con el poder económico, un matrimonio fructífero que ha acabado en numerosas ocasiones en imputaciones y elusión fiscal.
MADRID// La publicación de los papeles de Panamá por parte de La Marea, eldiario.es, Diagonal a raíz de una filtración llegada al buzón Fíltrala ha propiciado que salgan a la luz las prácticas fiscales de una rama muy importante de la familia del rey, los Borbones-Dos Sicilias. Cuatro de sus miembros usaron sociedades pantalla y una fundación en Panamá para ocultar durante años el patrimonio existente en unas cuentas en Suiza que posteriormente regularizaron con la ventajosa amnistía fiscal de Montoro.
La historia reciente de los Borbones no se puede contar sin la cercanía al poder económico y las grandes fortunas que eran conscientes de la influencia que el monarca Juan Carlos I tendría en la Transición para establecer un paso que no fuera traumático para sus intereses. Que los banqueros Urquijo cedieran la finca de Las Jarillas para que el entonces príncipe estudiara el Bachillerato era una evidencia paradójica, se trataba de pagarle los estudios a quien presevaría su futuro y fortuna. La cercanía del poder económico a la corona no sólo sirvió a los empresarios para hacer prevalecer su posición, sino que garantizó a los Borbones una holgada situación económica. No sólo a la familia real, ni a la del rey emérito, sino a todos aquellos que con la sangre como aval se han enriquecido y utilizado todo tipo de prácticas para lavar ese patrimonio.
El caso más conocido de enriquecimiento por el uso de un nombre, y con ese nombre como único valor, es el de Iñaki Urdangarín, marido de la infanta Cristina, pero son muchos los Borbones y adláteres que se han lucrado con su sangre. Varios de ellos han acabado con problemas con la justicia o salpicados por escándalos económicos que, en algunos casos, afectabn a amigos y compañeros.
Desde que The New York Times publicara el posible origen y montante de la fortuna del rey emérito Juan Carlos I, y tras el escándalo del viaje a Botswana que rompió el bloqueo mediático que protegía a la monarquía y todos sus miembros, se abrió la veda para conocer las actividades que sus familiares y protegidos habían tenido durante su reinado. El caso Nóos, que ha provocado la imputación de la infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarín, son la punta de lanza de una familia cada vez más cuestionada por sus económicas fruto de su posición privilegiada centenaria.
La querencia de los Borbones por las cuentas en Suiza alcanzó a Juan Carlos I. Según publicó El Mundo, el actual rey emérito heredó 375 millones de pesetas de su padre, Juan de Borbón, que despositó en una cuenta de la Societé Générale Alsacienne de Banque de Ginebra sin que nunca jamás la Casa Real revelara si ese patrimonio fue regularizado o lo que se hizo con los millones procedentes de la herencia.
Pilar de Borbón, la hermana caritativa del rey
La hermana del rey Juan Carlos, famosa por su caridad en el mercadillo Nuevo Futuro, apareció en los Papeles de Panamá porque presidía y dirigía la sociedad offshore Delantera Financiera S.A radicada en Panamá. Comenzó a administrar este instrumento de elusión fiscal un mes después de que don Juan Carlos, entonces Príncipe de España, fuera elegido para sustituir a Franco al frente de la Jefatura de Estado durante la enfermedad del dictador. La sociedad se mantuvo activa hasta el 24 de junio de 2014, sólo 5 días después de que Felipe VI sustituyera a su padre como rey de España.
Inés de Borbón-Dos Sicilias y Borbón, la despistada
Acusada de blanqueo de capitales en la operación Púnica, el juez le preguntó sobre el legado familiar de su padre y el montante de la herencia que recibió en el año 2004.
– Ni idea. Es que antes nos enseñaban a no interesarnos por el dinero ni preguntar.
La prima del rey Juan Carlos y tía de Felipe VI se hizo la despistada en su declaración del pasado 3 de febrero ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco. No sabía lo que ya sabemos: cobró más de 22 millones de pesetas del legado de su padre en el año 1964. Esa cantidad equivaldría a unos 17 millones de euros en la actualidad. Una herencia muy jugosa que La Marea publicó ayer.
Los Orleans-Borbón y el primo lejano Jaime Álvaro
Desde la familia más cercana a la más lejana, el apellido Borbón aparece en multitud de ocasiones aparejado a cuentas opacas, en el extranjero y sociedades offshore. Álvaro Jaime de Orleans-Borbón y Parodi utilizó sociedades en las Islas Vírgenes y las Islas del Canal para realizar operaciones inmobiliarias en la costa gaditana, según informó El Confidencial. Gerarda de Orleans-Borbón y Parodi Delfino, prima lejana del rey emérito Juan Carlos I, también compró una vivienda utilizando una sociedad con sede en una Isla del Canal.
Los Borbones en la Operación Emperador
María Inmaculada Borbón-Dos Sicilias Lubomirska recibió dos entregas de aproximadamente 200.000 euros por parte de un intermediario de la red de blanqueo de capitales de Gao Ping. Así lo reconoció ante el juez Andreu María Ilia García de Sáez Borbón-Dos Sicilias. El juez había imputado a María Margarita Borbón-Dos Sicilias, María Inmaculada Borbón-Dos Sicilias y María Ilia García de Sáez por delitos contra la Hacienda Pública y cooperación para el blanqueo de capitales. La vinculación de las tres miembros de la casa Borbón se produjo en la llamada “trama hebrea”, una red que usaba joyeros judíos para blanquear y que tenía como ejes a Malma Maman, Cohen Atzban y François Leiser.
Carlos de Borbón Dos Sicilias y Borbón, ‘El infante fallecido’
El fallecido Duque de Calabria, responsabilidad que ahora ostenta su hijo Pedro de Borbón dos Sicilias, era uno de los más activos en las empresas. Fue consejero en Cepsa, en Thyssenkrupp, en Royal Urbis, en Abengoa Solar, Eléctricas Reunidas, Dragados o Telvent. También tuvo un cargo en Viajes Marsans, pero cuando la empresa de Gerardo Díaz Ferrán quebró, el infante alegó que sufría una enfermedad degenerativa para evitar los embargos, circunstancia que también habría evitado al mantener parte de su patrimonio en una Fundación en Panamá. Carlos de Borbón además fue consejero de la estatal Iberpistas y poseía parte del accionariado de varias sociedades en Reino Unido.