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Junts pel Sí cierra la campaña con una demostración de fuerza en Montjuïc
La duda sobre el resultado electoral de este domingo hace que los partidos hayan centrado tofos sus esfuerzos en los últimos actoos de campaña
BARCELONA // A ritmo de rumba y con las calles tomadas por miles de personas (más de 70.000 según los organizadores, muchos de ellos con camisetas y esteladas) despidió la campaña electoral Junts per Sí. En un acto perfectamente organizado a los pies de Montjuïc, Artur Mas, Raül Romeva y Oriol Junqueras se hicieron acompañar de miembros de la Asamblea Nacional Catalana en un acto que más que mitin pareció una continuación de la Diada del 11 de septiembre, reparto de camisetas incluido.
Al grito de “in, inde, independencia” cada uno de los líderes de la coalición fue desfilando por un escenario que miraba hacia la plaza de España donde se proyectaban las cuatro barras de la bandera catalana. El que recibió un mayor número de aplausos fue Artur Mas quien en su alocución apeló al «alma» de los catalanes para que elijan la papeleta este domingo. El mitin transcurrió en clave nacionalista y dejó poco espacio para hablar de programa político o ideología.
Las dudas sobre el coste de la independencia y la pertenencia a la Unión Europea, uno de los temas principales durante la campaña, ho han impresionado a los militantes de las filas independentistas. «Esto entra aquí y sale por ahí», asegura Montserrat, «la identidad va por encima de cualquier coste».
A pocos kilómetros, en el conocido como «cinturón rojo», en l’Hospitalet, Catalunya Sí que es Pot recurría en su último acto electoral a los líderes de Podemos para intentar arañar los últimos votos. En un discreto pabellón deportivo, cerca de 2.500 personas según la organización escucharon las palabras de Pablo Iglesias al grito de “sí se puede” y “presidente”. A Iglesias le acompañó Íñigo Errejón. Quien no estuvo fue Alberto Garzón. “Se han repartido los actos de campaña y hoy no le tocaba a Alberto”, justificaban su ausencia fuentes de su entorno.
A la otra punta de la ciudad, las CUP despedían la campaña en un parque al aire libre. El lugar elegido, Badalona, el feudo del líder del PP en Cataluña, y exalcalde de esta ciudad Xavier García Albiol. De hecho Antonio Baños, David Fernández y compañía hablaron a escasos metros de una avenida en la que se compaginaban los carteles del candidato del PP con pequeños restaurantes de comida halal.
El PSC echó mano del tirón mediático de su candidato para convocar a la militancia a un pequeño espacio de coworking en el barrio de Poblenou con el lema “Ven a bailar con Iceta”. Hasta allí fue el secretario general del PSOE Pedro Sánchez quien pidió el voto para “decir no a la independencia y sí a la convivencia”.
Mariano Rajoy se hizo acompañar finalmente por el expresidente francés, Nicolas Sarkozy en un mitin celebrado en el Palacio de Congresos de Barcelona. El jefe del Ejecutivo español se lo agradeció de una forma muy especial: “tu presencia aquí nos estimula, nos ayuda. […] Eres un amigo y no lo vamos a olvidar nunca”.
Finalmente Ciudadanos repartió sus folletos electorales en el que un corazón une a las banderas de Cataluña y España en un acto al aire libre en la Ciudad Condal. El sitio elegido fue la plaza Virrei Amat. Su cabeza de lista, Inés Arrimadas pidió el voto para su formación por considerarla “la única capaz de frenar al independentismo”.